Rumania: un país por descubrir ✏️ Blogs de Rumania

Elegimos Rumania por varios motivos: porque tenemos vuelo directo desde Zaragoza a Cluj y a Bucarest por un módico precio; porque el año pasado habíamos estado casi 3 semanas en la Costa Oeste de EE.UU y buscábamos un viaje más barato (el presupuesto no da para tanto!), y la razón principal, que Rumania tiene muchísmas cosas que ofrecernos (sobre todo tenía ganas de visitar los Monasterios de Bucovina).
Nuestro viaje fue de 14 días, y después de buscar muchas combinaciones aéreas, elegimos Bucarest como inicio y final del viaje por el precio de los vuelos. Volamos con Wizzair por unos 190€ ida y vuelta los dos, con una maleta facturada. Nuestro viaje comenzó el 21 de mayo y finalizó el 4 de junio de 2011.
Para desplazarnos por el país alquilamos un coche con www.ealquilerdecoches.es . Son intermediarios, te buscan la opción más barata. Esta vez el alquiler fue con EcoRent, y todo genial. Pagamos 300€ por 2 semanas, segundo conductor incluido (gratis). En principio habíamos alquilado un Ford fiesta porque solo éramos 2, pero al llegar al aeropuerto no tenían, entonces nos daban un Astra caravan, pero le fallaba una luz y no se la podía cambiar (en Rumania es obligatorio ir siempre con las luces encendidas en las carreteras principales), y al final nos dieron un Passat Caravan, demasiado coche pero muy cómodo.
Las primeras 5 noches las llevabamos reservadas desde casa, pero las siguientes íbamos reservando sobre la marcha. Lo decidimos así porque en un viaje tan largo puede ocurrir cualquier cosa y es difícil calcular el tiempo y las distancias, sobre todo con las carreteras rumanas! Nosotros hicimos una media de unos 50-60 km/h durante todo el viaje. Las carreteras “comarcales” están en general destrozadas, en vez de baches algunos parecen pozos. De hecho, una día se nos salió el tapacubos al coger un bache y mientras lo buscábamos, encontramos otros 2!! Luego, nos fijamos que muchos coches llevaban las ruedas sin ellos. Las carreteras principales están bastante mejor, no suelen tener muchos baches, pero al estar bien tienen tanto tráfico que vas tan lento como las otras e incluso en más de una ocasión estuvimos retenidos.
En cuanto a las comidas, se come genial en todo el país, y bastante barato! Las sopas (que son casi guisos) están de muerte, la “mamaliga cu vranza si smantana” suavecito pero reconfortante, el sarmale riquísimo, el papanasi de vicio, etc. En algunas ciudades cenábamos en muy buenos restaurantes por apenas 10€ por cabeza con su correspondiente cerveza de ½ L (es la pequeña) y postre (si nos entraba). En general las raciones son enormes, y con una sopa y poco más ya comes (y nosotros somos de comer!). De hecho, creo que el único postre que probé fue el papanasi porque normalmente no me entraban. Una curiosidad, que podían importar los bares de aqui, es que en las cartas todos los platos te ponían la cantidad en gramos de cada uno de los ingredientes que llevaba. Es decir, si te pedias pechuga de pollo con patatas y ensalada, te especificaba los gramos del pollo, de las patatas, del tomate y la lechuga. Era muy útil porque te servía para calcular cuánto pedir.
El viaje nos salió por unos 1700-1800€ los dos, souvenirs incluidos. Para el viajero resulta un país asequible. La artesanía es muy barata! La mano de obra de ellos no está nada valorada. De hecho, en Sibiu vimos un ciclista de plástico made in China, que en Zaragoza también lo hemos visto en los vendedores ambulantes, y era más caro que una pieza de cerámica artesanal. Es lo que tiene la globalización! Los restaurantes como comenté también son baratos. Donde más pagamos fue en el Caru cu Bere unos 22€ (me refiero en total, éramos 2) y donde menos en Horezu, 5€ por cenar los 2, con sopa, tortilla y cerveza cada uno. La cerveza solía valer unos 4 leu (aprox. 1€). Los alojamientos estaban en una media de 30-35€/noche la habitación doble.
Una cosa que me llamó mucho la atención fue que tienen wifi en todos lados!! A mí eso me salvó el viaje, porque como no tenía todos los hoteles reservados, me conectaba con el móvil a través del wifi e iba reservando de un día para otro.

Este fue el plan de viaje
Día 01: Bucarest
Día 02: Sinaia – Prejmer – Harman – Brasov
Día 03: Brasov – Rasnov – Bran – Fagaras – Biertan – Sighisoara
Día 04: Sighisoara – Bicaz y Lacul Rosu – Vama
Día 05: Monasterios de Bucovina
Día 06: Vama – Puerto de Prislop – Maramures y sus iglesias de madera
Día 07: Sapanta – Cluj-Napoca
Día 08: Cluj – Oradea
Día 09: Oradea – Arad – Timisoara
Día 10: Timisoara – Danubio – Baile Herculane
Día 11: Baile Herculane – Densus – Hunedoara – Alba Iulia – Sibiu
Día 12: Sibiu – Valle de Olt – Horezu
Día 13: Horezu – Curtea de Arges – Bucarest
Día 14 y 15: Bucarest

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Aterrizamos en Baneasa sobre las 20h del sábado 21 de mayo. Fue aterrizar y el primer susto! Empezamos a buscar la oficina de alquiler y no la encontrábamos, y eso que es un aeropuerto enano!!! (quien haya estado lo entenderá). Preguntábamos y nadie sabía nada de ellos. Nosotros "cagaos”. Llamamos al telefono 900 de ealquiler (que es gratuito dsd cualquier país y la atención es en castellano) y nos explicaron que era un servicio lanzadera, que no tenían oficina en ese aeropuerto y que nos vendrían a buscar para llevarnos a Otopeni (los aeropuertos parecen de 2 países diferentes), y que lo sentían si las persona que nos había atendido no nos lo había explicado. A los 2 minutos apareció un chico con un cartel con nuestro nombre, y nos pidió disculpas porque se había retrasado (llegó 30 minutos después de que aterrizáramos), nos llevó a Otopeni con su coche, que allí tienen oficina e hicimos todo el papeleo y nos llevamos el coche, que había pasado de un modesto Fiesta a un flamante Passat Caravan. A nosotros nos daba “cosica” el Passat porque nos parecía mucho coche (que mala es la ignorancia!) pero nada más salir del aeropuerto nos dimos cuenta que íbamos a pasar totalmente desapercibidos. Es curioso, con lo mal que están las carreteras los cochazos que hay, ¡si no se puede ir a más de 50! Eso sí, nada de coches medios, o veías “Mercedacos” o Dacias de hace 30 años. Y con lo cara que está la gasolina. Cuando estuvimos nosotros estaba al mismo precio que en España (céntimo arriba, céntimo abajo), y el sueldo medio rumano está en unos 400€ (si no me informaron mal).
Bueno, que me enrollo! Salimos del aeropuerto directamente al hotel, que estaba en Otopeni, a 5 minutos del aeropuerto. Decidimos dormir en las afueras porque al final del viaje íbamos a estar en Bucarest y el domingo ya salíamos hacia el norte, por lo que nos resultaba más cómodo no meternos en la capital.
Elegimos el Hotel “Vila Toparceanu”. Es una casa grande, nueva, con las habitaciones enormes y todo súper limpio. Nos salió la noche por 30€ la habitación doble con el desayuno incluido. Ah! Y wifi, de manera que pudimos oír por la radio el partido del Zaragoza que se jugaba el descenso!
Cenamos en el propio hotel, que tenia buenos precios y la comida no estaba mal (16€). Y a dormir que nos quedaba todo el viaje por delante!

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El domingo nos fuimos directamente a Sinaia, y lo primero que visitamos fue el monasterio, con sus dos iglesias.

Monasterio de Sinaia

Monasterio de Sinaia - iglesia antigua

Frescos Iglesia Antigua Monasterio de Sinaia

Justo al lado del monasterio hay un pequeño parquin en una de las entradas al Castillo de Peles. Como no lo sabíamos movimos el coche para volver aparcarlo de inmediato (debía de haber menos de 50m). Os recomiendo que si aparcais bien en el monasterio no lo movais porque tuvimos que pagar. Además creo que aparcando aquí es por donde más corto es el camino hasta el castillo.
Nosotros escogimos la segunda modalidad de entrada. Como había un montón de gente y casi toda para la visita en inglés, nos fuimos a la visita en rumano porque no había nadie. Después de un rato allí esperando, abren la puerta y al ver que no hablábamos rumano no nos dejaron pasar y tuvimos que volver a la otra puerta.
A mí me gustó bastante, aunque me pareció un poco cara la entrada.
Luego dimos un paseo por los jardines y nos acercamos hasta el Castillo de Pelisor, pero no lo visitamos por dentro.
De vuelta al coche, en uno de los puestecillos compramos un kurtos, que es una masa dulce con forma cónica que se hace girando sobre unas brasas, riquísimo

Castillo de Peles

Castillo de Peles

Castillo de Pelisor

Una vez en el coche nos fuimos en busca del oso perdido! (dicen que por esta zona hay muchos osos) Empezamos a subir montaña arriba, con el coche. La verdad es que la vista era muy chula, pero como fue algo improvisado y no sabíamos muy bien hacia donde íbamos, al rato dimos la vuelta y nos fuimos dirección Brasov, pasando antes por Prejmer y Harman.
Pasamos por una tiendecilla y compré un poco de pan, agua y patatas. Nosotros llevábamos algún paquetillo de fiambre en el coche porque nunca sabes dónde vas a parar y siempre está bien llevar algo encima. Así que ese día comimos un poco de picoteo entre el dulce y 4 cosas que llevábamos. Ya cenaríamos bien esa noche en Brasov.
Prejmer y Harman son dos ejemplos de las iglesias fortificadas que existen en Transilvania declaradas Patrimonio de la Humanidad
Llegar a Prejmer nos costó más de lo esperado porque nos pasamos el cruce y no sé cuantos km hicimos hacia el este, así que cuando llegamos estaban las dos cerradas, aunque en Harman había un timbre, llamamos y nos abrieron, con mala cara, aunque ya se había pasado la hora.
La verdad es que encontramos mucho tráfico en todo el trayecto desde Otopeni a Brasov.
Como era domingo había un montón de gente pasando el día en el campo con la familia y amigos. Me llamó la atención que cada grupo se hacia sus hogueras en el medio del campo sin un lugar especifico.

Prejmer

Harman

Harman

A media tarde llegábamos a Brasov. Lo primero fue dirigirnos a la pensiunea que había reservado desde casa: La Despani. La casa está fenomenal, limpia, nueva, con pisicna, wifi, etc. El dueño nos dio un montón de recomendaciones para cenar y tomarnos una copa, y sobre la ciudad. La situación de la casa es buena porque se puede ir caminando tranquilamente hasta la piatra Sfatului, y así no tener que coger el coche (en Rumania la tasa de alcohol para conducir es de 0,0). Pagamos 30€ la noche por una habitación doble. No daban desayunos, pero en el sótano de la casa tenían un salón-cocina enorme donde te podías hacer lo que quisieras, incluso cenar. Nosotros compramos cosas en un súper que estaba al lado de la casa, que por cierto, estaba abierto por la noche y desayunamos unos tés, un poco de zumo y unos bollos que compramos volviendo al hotel a medianoche en una pastelería-panaderia que estaba abierta La verdad es que tenían un horario bastante flexible!
Para cenar elegimos el restaurante Sergiana, que recomendaban en el foro. La verdad es que nos gustó mucho. Te invitaban a un aperitivo y solo me acuerdo de que yo comí estofado de ciervo que estaba delicioso! Y el vino también estaba bastante bueno! Pagamos en total 16,89€
Luego nos fuimos a tomar una copa a un bar que nos había recomendado el dueño de la casa, donde a media tarde nos habíamos tomado ya una cerveza. El bar se llama “Festival 39” y os recomiendo que paséis por allí.
Os dejo algunas fotos de nuestra visita a Brasov. Por cierto, la Iglesia Negra no la pudimos ver porque estaba cerrada.

Brasov

Brasov - Biserica Neagra

Brasov

Brasov

Brasov

BRasov "Festival 39"

Brasov - "Festival 39"

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