12 días por Sudáfrica y Zimbabwe ✏️ Blogs de Sudáfrica

Llegamos al aeropuerto de Johannesburgo como a las 10:00 de la mañana. No había demasiada gente así que pronto pasamos el control de pasaporte en el que nos preguntaron de dónde veníamos, qué hacíamos allí...

Mi marido entró al servicio y ya está... a preparar la cartera porque a penas habíamos pasado el control ya estaban pidiendole dinero. Se encontró con un hombre muy simpático que le limpió el servicio, hasta le encendió el grifo.. y claro, eso cuesta dinero

Nos dirigimos a Avis, donde teníamos nuestra reserva. ¿El problema? Tenía la reserva en el mail y por supuesto no tenía internet La mujer que nos atendió, a quien por cierto no entendíamos ni papa, encontró la reserva con los datos del pasaporte, pero no podía salir todo bien... no recordabamos la clave de la tarjeta de crédito así que nos tocó dejar la reserva a medias y buscar una tienda de Vodacom (sí, la misma que aquí es Vodafone) para comprar una tarjeta de datos. Cogimos 3GB para tirar de GPS con tranquilidad y nos sobró la mitad Nos costó unos R404.

Volvimos a Avis y finalizamos la reserva... Ahora a conducir por la izquierda! Toda una aventura.

Llegamos al hotel, a 5 minutos del aeropuerto, el Airport Inn Executive Suites. Aunque tenía mejor pinta en Booking (como suele ocurrir) sobrevivimos Dejamos las maletas y salimos a visitar a unos amigos que viven aquí. En el trayecto de una hora nos encontramos con varios peajes, preparaba el dinero y nunca aparecían... Y es que casi todos los peajes son automáticos, y el único indicio es una señal en la que marca el precio. Lo que nos costó descubrir que aquello que pitaba en el coche era por el peaje

Al día siguiente salíamos para Zimbabwe

---

Nuestra visita a Victoria Falls fue bastante cortita, llegamos el miércoles por la tarde y nos fuimos el viernes por la mañana. Nos alojamos las 2 noches en el N1 Hotel & Campsite Victoria Falls. Es un hotel muy sencillito pero teniendo en cuenta los precios que rondan los hoteles de la zona es más que aceptable.

Viajamos de Johannesburgo a Vic Falls con Air Zimbabwe y fue una aventura. Primer error, nos confiamos y olvidamos confirmar el horario del vuelo, lo habían cambiado, quizá porque solo eramos 3 pasajeros. Quien sabe, tambíen cambiaron el de regreso.

Aunque supuestamente el vuelo era directo paramos en el aeropuerto de Bulawayo para tramitar el visado y de ahí tras pasar un nuevo control volvimos al avión para ir a vic falls. Supongo que será siempre así pero no teniamos ni idea y con nuestro inglés justito el viaje en general fue toda una aventura.

Al llegar a Victoria Falls cogimos un taxi. Nuestro taxista, Lazarus, nos preguntó que planeabamos hacer en nuestra estancia para vendernos excursiones. Realmente no teníamos tiempo porque llegamos por la tarde, el siguiente día ya lo teníamos planeado, y al otro regresabamos a sudafrica por la mañana. Pero el día anterior nuestros amigos nos habían hablado de un amigo suyo que tenía un parque en el que podías caminar con los leones... Se nos antojó probar la experiencia y aunque se hacían por la mañana, el taxista llamó a la reserva para ver si podían recibirnos... No hubo problema, y es que los 300$ que nos iban a cobrar bien valían salirse de su horario. Así que antes de llegar al hotel nos dirigimos a visitar a los leones. Fue impresionante, al principio no nos atrevíamos a acercarnos pero poco a poco uno se acostumbra. Eran dos hembras de 18 meses. Una de ellas se quedaba rezagada y cuando los guías le mandaban levantarse comenzaba a rugir... eso sí que impresionaba


Llegamos al hotel y salimos a cenar... Nos perseguían todo el tiempo procurando vendernos cualquier cosa, cuando uno nos dejaba era porque entrabamos en la zona de otro vendedor. Como no les compramos nada terminaron pidiéndonos que antes de irnos nos acordásemos de ellos y les regalasemos algo de ropa.

Entramos al kfc que hay en la gasolinera a 5 min del hotel, mientras nos miraban y saludaban a través del cristal, esperando que terminasemos para darles las sobras... Fue algo duro encontrarse con esa necesidad.

Al día siguiente habíamos contratado todo con Zambezi Explorer, un paquete compuesto por 15' de excursión en helicoptero, y un crucero por el río Zambeze al atardecer. Unos 200$ por persona. Desayunamos en el hotel y nos recogieron allí mismo para ir a la excursión en helicoptero.

Se hace en grupos de 5 personas. Te pesan para repartir la carga y graban el trayecto para intentar sacarte 30-40$ por el video después. Pero desde luego, ver las cataratas desde el aire vale la pena, eso seguro.


Al terminar, en lugar de llevarnos de vuelta al hotel le pedimos que nos dejara a la entrada de las cataratas. Concretamente en el mercado que hay delante, donde nos acosaron para que cogieramos unos chubasqueros. Si mal no recuerdo, nos cobraron unos 3$ cada uno. Aunque al comprarlos no nos dijeron nada estaban usados, y es que al salir se nos ocurrió volver a pasar por el mercado y nos dijeron que se los devolvieramos. Aún tengo la duda de si siempre lo hacen o solo aprovecharon que volvíamos a pasar por allí

Pagamos los 30$ por persona de la entrada, la verdad que la visita a las cataratas no fue como me esperaba, había tal cantidad de agua que la bruma impedía verlas, de hecho solo pudimos verlas desde los primeros puntos. El resto del trayecto fue caminar bajo el agua que caía sobre nosotros en medio de una neblina que no dejaba ver absolutamente nada. Sobra decir que aunque los chubasqueros hubieran sido nuevos no habrían servido de gran cosa. Salí de allí volcando los bolsillos que se habían llenado de agua. El puente que separa Zimbabwe de Zambia fue el punto que más me gustó de esta visita.



Era noche de luna llena por lo que se podía ver el arcoiris lunar, pero nos acordamos después de salir del parque, y con la poca visibilidad que había.. Decidimos que no valía otros 60$de entrada volver a la noche para intentar verlo, ya que nada lo garantizaba.

Al salir fuimos a comer al Lola's tapas. Allí en seguida se nos acercó un babuino a ver si rascaba algo y al escucharnos hablar se acercó la dueña, extremeña ella y el marido catalán si no recuerdo mal. Nos contaron que llevaban 13 años allí. Además de pedir tortilla de patata (queríamos asegurar al menos uno de los platos jaja) que por cierto estaba buenísima, probamos algunos de los platos locales. Nuestra camarera hizo un esfuerzo por decirnos algunas palabras en español y al terminar nuestro almuerzo nos regalaron unos colgantes.

Al atardecer nos recogieron nuevamente en el hotel para hacer el sunset cruise. La puesta de sol impresionante. Nosotros habíamos contratado la cubierta superior, creo que merece la pena, mejor visibilidad, más comodidad... El personal muy agradable se sentaba a charlar con los pasajeros. Las bebidas y tapas estaban incluidas.


Y hasta aquí nuestro viaje express a Zimbabwe . Al día siguiente nos recogió Lazarus, a la hora que habíamos concretado a nuestra llegada, para llevarnos de vuelta al aeropuerto. El error fue no pedirle el teléfono ya que atrasaron nuestro vuelo de nuevo, así que nos recogió temprano y nos tocó esperar bastante en el minusculo aeropuerto de vic falls.

Para salir del país nos tocó pagar una tasa de unos 100$ creo recordar, algo con lo que no contábamos... Y en el vuelo de vuelta rompieron mi maleta nueva. Entre el retraso del vuelo y la parada en el aeropuerto de Bulawayo para sellar el pasaporte llegamos a Johannesburgo bastante tarde, así que nos dirigimos a la oficina de Air Zimbabwe para reclamar la maleta..y nos mandaban a otro lado que nadie sabía donde estaba... Terminamos desistiendo ya que nuestro alojamiento esa noche estaba a unas 4 horas del aeropuerto, ya ibamos con bastante retraso.

---

El día anterior salimos dirección Graskop sin una sola parada, con el retraso del aeropuerto no podíamos permitirnoslo.

Llegamos a nuestro alojamiento sobre las 22.00h... bastante tarde para el ritmo de vida que llevan. Habíamos reservado un iglú (sí, sí, un iglú Blue Swallow Chalets) cerca de la ruta panorama con intención de realizarla por la mañana antes de dirigirnos al Kruger. Aunque hacía bastante frío estaba bien preparado, incluso había mantas electricas en las camas y fue muy económico, unos 25€. El único inconveniente fueron los pavos que no dejaron de meter ruido desde bien temprano en la mañana.

No paró de llover en toda la noche... ni en todo el día siguiente, así que nos quedamos con las ganas de hacer la ruta, la niebla impedía ver nada a 5m en la carretera. Cuando nos levantamos nos dirigimos directamente al siguiente hotel, Protea Hotel by Marriott Kruger Gate evidentemente junto a la Kruger Gate. Aquí ya dejamos de lado lo de económico pero la estancia fue muy agradable.

Contratamos en el propio hotel el full day drive para el día siguiente, y nos fuimos a descansar. A las 5:45 estabamos desayunando en el hall del hotel y recogimos nuestras cajas de picnic para el día en recepción. Nos recogió nuestro guía, el coche solo para nosotros. Debíamos ser los únicos locos que con el frío que hacía se iban a pasar el día en un coche abierto...

Nos dejaron una manta y nos dirigimos al parque. Nada más entrar tuvimos la suerte de encontrar una leona con 6 crías, impalas, impalas y máaas impalas, será por impalas... había comida de sobra para los leones y leopardos A primera hora encontramos leones, cebras, una manada de elefantes, hipopotamos... pasamos las 3 siguientes horas sin ver absolutamente nada.




Los guías se comunican entre ellos cuando hay algún avistamiento. Comimos en uno de los campamentos y continuámos nuestra búsqueda. Y tuvimos muchísima suerte porque cuando ya pensábamos que sería imposible coronamos con el leopardo, logramos ver los Big Five el primer día! Lo pillamos comiendo, a la sombra de un arbusto, a penas se distinguía entre la maleza, pero de vez en cuando se veía su cabeza asomar intentando arrancar un pedazo de carne de su trofeo.


Al día siguiente nos regalamos un masaje en el spa con vistas al Kruger, una pena que volviera a llover. El lugar precioso, pero el masaje fue de todo menos relajante



Nos dirigimos al parque, esa noche dormiríamos en Berg-en-Dal. De camino al campamento tuvimos la oportunidad de ver a las jirafas junto a la carretera, el día anterior las vimos desde muy lejos.


Ya en Berg-en-Dal y tras hacer el check in nos entregaron una tabla de horarios con los game drives. Lamentablemente la tabla que nos dieron no estaba actualizada y perdimos nuestro drive de aquella noche. Como no fue nuestro error uno de los empleados nos llevó en otro coche en busca de nuestro guía que había salido del campamento hacía 20 minutos

Hicimos el night drive, eramos unas 20 personas. A 3 les entregaron unas linternas, el plan? Buscar ojos brillando en la oscuridad. Aunque encontramos poco más que 2 hipopotamos y muchos más impalas fue una experiencia diferente que hay que probar. Así como el morning walk que hicimos al día siguiente.

Aquí sí que solo vimos un Kudu (símbolo del parque Kruger), y huellas Pero fue una sensación emocionante saber que ibamos a pie en el hábitat de aquellos animales salvajes. Prohibido hablar, prohibido quedarse atrás... Todos en fila, si alguien quería parar tenía que indicarlo haciendo algún sonido. Delante 2 guías armados, detrás... nuevamente solo nosotros 2 Escuchamos en varias ocasiones lo que pensabamos que eran rugidos, parece ser que eran los impalas pero habíamos visto huellas recientes de leones y yo no necesitaba comprobarlo de cerca

Al terminar nuestro ultimo paseo por el parque nos dirigimos a Johannesburgo para coger nuestro último avión, dirección Cape Town. Esta vez viajamos con Kulula sin ningún problema, llegamos a la hora prevista.

---