Este Tip es un complemento al que publiqué en octubre de 2021, Recorriendo el río Palancia, éste

www.losviajeros.com/ ...is-Segorbe

donde visité, entre otros lugares, Segorbe, pero no pude ver su catedral; ahora he vuelto y sí la he visitado.


Diría que ver la Catedral y sobre todo el Museo Catedralicio es el mejor, y casi único, motivo para ir a Segorbe ( Castellón ), se trata de un edificio y una colección de arte sacro poco conocidas pero bastante notables.

La población es sede de la diócesis Segorbe - Castellón, de ahí su importancia.

Para llegar hasta allí hay dos vías: la que utilizamos nosotros, dejando la catedral a la derecha, por la calle S. Cristóbal, y girando a la derecha por Tras Sagrario y S. María, tiene el inconveniente de ser una prolongada, aunque suave cuesta, que puede hacerse algo pesada; yo recomiendo mas bien entrar por el lado contrario, o sea dejando el edifio a la izquierda, por la calle Colon, y girando a la izquierda por Arco de la Veronica y S. María, con una pendiente mucho más corta.

Enseguida se accede al Claustro



donde sacamos el billete ( 3 € con descuento para algunos colectivos ), sede del Museo Catedralicio. Horario actual: de martes a sábado, de de 11 a 13:30 horas.

Las obras presentes en el Museo fueron generadas en el marco de la catedral, sobre todo hay un conjunto de retablos de grandes dimensiones, obra de pintores primitivos; por ej. los retablos de S. Clara y S. Eulalia, el retablo mayor de la Catedral, de S. Lucas, etc. , la mayoría de los siglos XV y XVI.


También, en la Capilla del Salvador, abierta al claustro por una puerta labrada gótica, se halla el Sepulcro de los Vallterra, un bello monumento funerario de piedra policromada, notable además porque en el ámbito valenciano dichos monumentos no son muy frecuentes ni suelen alcanzar la grandiosidad de otras zonas.


Datable en los primeros años del siglo XV, es anterior al influjo flamenco, y fué objeto de una reciente restauración, que permite contemplarlo libre de la suciedad acumulada por los años.

En la Sala Capitular hay un galería de retratos de obispos, entre ellos Iñigo de VAllterra, artíifice de la construcción de la Capilla del Salvador



Y a partir de aquí pasamos al Templo.


Realizado a finales del siglo XVIII, es un espacio para el culto religioso con una sola nave de grandes proporciones, cabecera semicircular y capillas laterales, de estilo barroco aunque sin excesos ornamentales.

Destacan la sillería del coro


, de madera labrada, las vidrieras allí situadas, y las pinturas murales de la cabecera.