
Colegio neogótico en el Barrio de Salamanca
A mediados del siglo XIX, Madrid ya no cabía dentro de sus antiguos límites, por lo que se proyectaron dos ampliaciones del casco urbano, siendo una de ellas promovida por el Marqués de Salamanca como iniciativa privada, corriendo a su cargo la urbanización de la zona. Esta se hizo según el modelo francés, en cuadrícula, siendo una de las zonas más caras y elegantes de la ciudad, con edificios lujosos y chalets o palacetes ajardinados.En esta zona, la duquesa de Sevillano decide edificar a su costa un colegio para acoger niñas pobres y darles una educación adecuada como maestras, institutrices o directoras de talleres. Desgraciadamente muere antes de ver terminado su proyecto y el edificio fue comprado por los padres marianistas para llevar a cabo su proyecto de colegio externo para chicos.
El edificio se construyó sobre una de las manzanas del ensanche delimitada por Príncipe de Vergara, D. Ramón de la Cruz y Castelló y es uno de los más bellos ejemplos de arquitectura neogótica madrileña,
Constando de dos pabellones en perpendicular a la calle Príncipe de Vergara unidos por galería acristalada y, en medio de ellos, la iglesia que tiene su entrada por esa misma calle
Y otro pabellón paralelo a la fachada de la calle Castelló, con una preciosa y amplia escalera de acceso que no pude fotografiar porque no se puede acceder al interior, y tres pabellones más. Actualmente por esta calle se accede al colegio.
Desde la calle Ramón de la Cruz pueden verse perfectamente los pabellones y la galería acristalada que les une
Uno de los elementos más hermosos es la iglesia, que puede visitarse sólo en horas de culto, pero no hay ningún cartel que diga cuáles son esas horas. (No sea que nos enteremos: evil: ). Aquí podéis ver un detalle de la fachada
Y en esta otra foto se aprecia una de las figuras labradas de los capiteles, todas ellas con forma de aves.
Una de las cosas que más me llamaron la atención son sus ventanas, las hay de diversas formas, todas ellas con rejas en blanco
Y por último me resultó muy interesante la reja que corona la valla, es especial en la zona de la iglesia, ya que la puerta de acceso es toda ella de hierro, con unos preciosos dragones.