Recién llegado de mi viaje de 4 días a Viena, os traslado mis impresiones.
En primer lugar daros las gracias sinceras a todos los que desinteresadamente aportáis vuestra información al foro. Sin vosotros, no podría haber organizado mi viaje, ni este ni otros, pues dais información fiable y muy útil.
-Nos hospedamos en hotel Das Tigra, recomendado por el foro. Perfecto. Buena relación calidad precio, excelente localización, muy buen desayuno, en mi caso incluido en el precio, servicio atento. Silencioso y muy confortable. Sin grandes salones ni cosas por el estilo pues no es lo que busco.Precio a casi 200 euros la noche desayuno incluido.
- Se me quedó en el tintero Schonbrum y bien que lo lamento. Fui el último día sobre la 4 y como cierran a las 6, ya no me dieron entrada. Buena excusa para volver.
-Las dos cosas que a mí más me impactaron: La Biblioteca Nacional y la Iglesia de San Carlos Borromeo, de lejos el mejor barroco que he visto en mi vida. Me pasé un par de horas en ambos admirándolos y me tuvieron que sacar. La belleza que es capaz de crear el ser humano y luego destruirla, a poco que te descuides, me resulta incomprensible.
-El Hofburg, impresionante, aunque pasé de los de los caballos. Mi mujer se empeñó con el museo de Sissi, del que yo hubiera pasado también, pero comprendí sus razones histórico-míticas y no me arrepentí.
-Imponente la catedral de San Esteban, las partes barrocas y góticas también me parecen extraordinarias.
- Si eres aficionado a la música, es imprescindible un concierto en MusikVeiren. Iba con cierto recelo por ser Mozart y Vivaldi, Las 4 Estaciones, lo que suena en principio a turistada. Pero no, curiosamente Las 4 Estaciones sonaron como no las había escuchado y el vionilista estaba muy lejos de cualquier connivencia facilona: le echó lo que había que echarle. Eso sí, mucho chino que aplaudía entre movimientos :-(((
-La Cripta Real, es una colección de sepulcros reales majestuosos, pero a mí se me hizo bastante extraño ver unos féretros deslumbrantes apilados uno a lado de otro sin la más mínima decoración en la capilla, como quien los guarda en el sótano, vamos. Cosas veredes...
- Impresionante colección de pintura en Belvedere superior: Klimt es Klimt, una obra que no solamente es El beso - mágico- sino un prodigio artístico. Y, ya puestos, y si te gusta la pintura, el Museo Albertina es un tesoro en grabados y pinturas, con Picassos, Van Goghs, impresionistas, cubistas ... Del que me sacaron las piernas tras 4 horas de visita.
Viena es paseada, paseada y paseada. Supongo que como Hitler era austriaco, no la pasó a fuego - o solo un poquito- como hizo con Varsovia y todo lo que se le cruzó en el camino. Bendita sea la hora, porque es majestuosa y andar por ella transmite algo muy peculiar que no sé bien explicar: París es también preciosa, pero Viena ...no sé, los Habsburgo eran los Habsburgo y se nota.
-Comida. Buenas las recomendaciones del foro en general ( Salm Brau, 7 Stern Brau, Alt Wien...) Fuimos a lo señalado y muy bien. Nos dimos un homenaje y nos fuimos a comer Steirereck, el mejor de Viena, con sus 3 estrellas Michelin ( por su culpa llegamos tarde a Schonbrum). Técnica culinaria prodigiosa, realmente prodigiosa, y excelente comida. Pero.... Si me das a elegir, aún no siendo quizás tan prodigiosos, ( o sí, vete a saber) me quedo con los 3 estrellas españoles. Quique Dacosta, Can Roca, Diverxo, Arzak, no me atrevo a decir que sea mejores, pero sí que mi gusto latino se encuentra más cómodo en ellos. Pero había que conocerlo y no me arrepiento.
Y eso es todo. Daros de nuevo las gracias a todos los que generosamente aportáis vuestras experiencias. No solo por la información que aportáis, que es mucha y muy útil, sino por lo que significa.
Sus amo.
