@Gadiemp y todos los viajeros, gracias por vuestros comentarios,
Bueno, de vuelta de esta escapada/viajazo super disfrutable y relajado a Gdanks, actualizo un poco de acuerdo a mi experiencia, en Noviembre.
Domingo: Llegamos el domingo a mediodía y nos dió tiempo de hacer una toma de contacto con la ciudad y ver el Mercado de Navidad, que nos ha parecido estupendo, horario de 12 a 20 hrs. Pero según el día y hora va a medio gas.
Lunes;
Free Tour.
Westerplatte; tal como informaba Gadiemp, está la posibilidad de hacerlo en bus, número 106 y 138 o en barco. Nosotros cogímos el barco "pirata" por recomendación del guía del Free Tour. En Noviembre con el frío que hacía no es para nada mala opción. De hecho el ferry "normal", no tenía nada de afluencia, vamos, cero. Así que ibamos todos en el pirata, que por muy turistada que fuera, podías tomar algo y estar en un entorno más cálido. El problema es que apenas se veía el exterior.
Comento un poco para los que se planteen tema horarios, trayectos, y facilidad de recorrido y tal.
El barco y el ferry salen desde la zona donde están los restaurantes en el río, pleno centro, y el ticket lo compramos al subir al barco.
Las salidas del Pirata, eran a las 9, 11 y 13:00 hrs. El trayecto fue de aproximadamente 30 minutos y la última vuelta desde Westerplatte a las 15:30 que fue cuando volvimos nosotros. Todo esto, ahora en invierno.
Desde donde deja el barco, hasta el comienzo del recorrido son unos minutillos andando, no más. Visitar Westerplatte, mínimo, unos 30 minutos y lo que quieras alargar. Al volver vimos la parada de autobús pero ya teníamos la vuelta comprada en el barco. Hay un barecillo antes de coger el barco con una estufa que nos dió la vida.
Martes; Malbork; Lo mismo,… para los preocupados por trayectos: Desde la estación al castillo son menos de 20 minutos andando tranquilos. La visita, pues mínimo, 3 horas. Nosotros comimos en el U Flisaka, que se ve al otro lado del puente a la salidad de la visita. Y de nuevo con el frío que hacía estuvimos bien el restaurante.
Miercoles; Gdinya y Sopot, no teníamos pensado visitarlo pero nos animamos y muy bien. La verdad es que Gdinya no nos entusiasmó, aunque vimos que desde allí se puede coger un ferry para ir a la Península de Hel que en verano igual merece la pena visitar. Es mucho más interesante Sopot, que sí que es muy bonito y había más ambiente, restaurantes, galerías de arte y tal. Muchísimo aire y mucho frío. Ver el aspecto tan frío del mar desde el muelle daba mucho respeto.
Jueve: Visitamos Santa Brígida y el museo de la IIWW que es impresionante, realmente se debe visitar, sí, o sí y echarle unas horas. Quizás sería interesante visitar Westerplatte y este museo en el mismo día.
Los trenes funcionan de maravilla como algunos ya habéis comentado.