Si os sirve.. llegar a la Antartida es ya una proeza aunque sea en un buque rompehielos ruso o un buque de recreo que hoy está en El Caribe, mañana recorriendo el Atlántico Norte y pasado la Península antártica, eso sí: precio de curcero y un helicóptero en la cubierta y mucha gente atendiendo.
He visto un velero de dos palos de origen francés también pero si tuviéramos un velero...
No es posible para gente normal hacer una expedición al Polo Sur, la última la concluyeron militares argentinos con perros eurpeos adaptados.
Está muy lejos de todo y solo con pisar la Península ya es un hito que tenemos que pagar como si de un viaje medio caro a otro lugar se tratara.
Tuve la oportunidad de hablar con un expedicionario argentino, no es territorio para novatos en cuanto te adentras al continente, en un minuto puede variar la temperatura, los vientos son libres, de 8 a -15ºc las bases militares están todas ubicadas en la costa y durante más de 6 meses quedan aisladas, la española solo es abierta en el verano austral y casi todo se hace en el buque oceanográfico Hesperides y si no eres militar o científico ni de cocinero te contratan.
La posibilidad es el crucero, vives en el barco, no hay hoteles ni más edificaciones que las bases, algunas se pueden visitar y tienen cosas que venden como recuerdo de que estúviste allí y al volver a embarcar tienes que lavar las botas antes en una tinas, nada en los pies y nada en los bolsillos.
Queda alguna instalación, ya derruida, de la industria de la grasa de foca.
Una expedición particular tienen que autorizarla y no lo harán porque la disputa sobre la territorialidad o nacionalidad está siempre en cuestión. Chile pide su cacho y en sus mapas delimita un buen trozo, Argentina, Usa, Reino Unido, Sur Africa, Australia....
El acuerdo internacional sobre la no explotación con fines comerciales de el continente blanco se ve presionado día trás día y si se abre al turismo por libre siempre habrá quien lo explote. Está terminante prohibido dejar desechos, todos vuelven al pais que los originó. No imagino una expedición por libre que pueda ir y volver con sus desechos. No vale hacer agujero y tapar después, no se pudre, se congela y dentro de 1000 años seguirá tal cual.
Visitar el continente blanco es una experiencia inerrable. Es estar en la nada y ver vida. Es paisaje puro, sin intervención humana y es así como tiene que ser.
Hay tres o cuatro barcos que hacen la ruta a la Península y en ocasiones es adversa en pleno verano aun siendo un recorrido protegido por el relieve montañoso y los glaciares, se hiela igual y la blanquise se puede cerrar en horas bloqueando el buque.
Los barcos de doble casco pueden romper la blanquise, los cruceros no.
Los vientos pueden alcanzar velocidades que en tierra civilizada son huracanes, nada en cubierta sin amarar y nadie se atreve a asomar la nariz, la temperatura baja y la sensación térmica alcanza los -20ºc.
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