Diez minutos antes de las 6:30 estábamos esperando en el Buffet para desayunar. El buffet abría a las 6:30 exacta y nos dicen que por favor esperáramos un poco, estos japoneses son muy puntuales y si es a las 6:30 es a esa hora, ni un minuto antes ni uno después. A las 6:30 exacta estábamos empezando a desayunar. Comimos rápido pues queríamos coger el metro que partía desde Asakusa a Ueno a las 6:52 o 7:02, según nos indicaba Hiperdya. Logramos coger el de las 7:02 y después empatar con el Sinkansen que sale de Ueno a Utsunumiya a las 7:18 y llega a las 8:03 , este trayecto lo habíamos reservado en el aeropuerto. Una vez llegas a Utsunumiya cogimos la JR Nikko Line que sale a las 8:23 para Nikko. Ambos trayectos incluidos en el JR, en el segundo tren como es local no es posible reservar asientos.
A las 9:08 estábamos en Nikko, salimos a la estación y allí mismo cogimos el bus que va a los templos, no hace falta ir a la estación de Bus (Tobu Station) que está caminando a mano derecha según sales. Decidimos hacer solo un trayecto en bus, el de ida y bajar caminando recomiendo hacerlo así. En nikko solo nos centramos en los templos pues queríamos ir a Odaiba a nuestro regreso a Tokyo y poder verlo tanto de día como de noche.
Nos bajamos en la parada de Omotesando. Las visitas las hicimos en el siguiente orden
1* visita -Nikkō Tōshō-gū: Precio 1300 por persona.En el primer patio se encuentra la pagoda Gojunoto, de cinco niveles; reconstruida en 1818 tras un incendio que la consumió tres años antes. Más adelante, encontramos la puerta Niomon, flanqueada por dos estatuas de figuras Niō. Tras la puerta está el segundo patio, con el establo sagrado. En frente del establo se encuentra el famoso grabado en madera de los tres monos sabios. El patio está rodeado por los almacenes, y la fuente sagrada construida en 1618, utilizada para rituales de purificación. A partir de allí, se suben dos escalinatas hacia la puerta Yomeimon, que conduce al patio final y a los santuarios dedicados al shōgun. Yomeimon es probablemente la edificación que tiene la decoración más elegante de todo el conjunto, es hermoso. Subimos a la tumba de Tokugawa Ieyasu que no se encuentra dentro de los santuarios, sino en una torre adyacente, llamada Hōtō.
2* visita -Jinja Futarasan : Precio 200 yenes porpersona. El Puente Sagrado de Nikko que cruza el río Daiya pertenece al este santuario. A mi gusto este lugar no tiene demasiado interés.
3* visita -Taiyuinbyo. Compramos una entrada combinada por 900 yenes por persona que incluía este templo y el Rinnoji, ambos en reforma pero en el Rinnoji es que no merecía la pena ni entrar.
4* visita -Rinnoji El edificio principal del templo, el Sanbutsudo , alberga estatuas de madera de Amida, Senju Kannon-("Kannon con mil brazos") y Bato-Kannon ("Kannon con una cabeza de caballo"). Estaba en obras y a mi gusto no merecía la pena ni entrar.
Bajo esa foto seguro que es precioso.
Frente Sanbutsudo está el Museo de Rinnoji . También se puede visitar el Shoyoen , un pequeño jardín de estilo japonés que está situado detrás de la casa del tesoro. Precio 300Y el museo con el jardín, pero no entramos.
De nikko me llevo una sensación rara debido a las obras de mantenimiento en los templos, aunque sus templos son preciosos, los mas que me gustaron fueron el Tosho-gu y el Taiyuinbyo, estaban la mayoría en obras y eso no mola nada .
Sobre las 12 estábamos terminando de hacer las visitas y fuimos caminando al puente, no pagamos por entrar,sino que lo vimos desde en frente, ya que si quieres acceder a el hay que pagar una entrada que no recuerdo cuanto era, creo que no merece la pena. Desde el frente, otro puente que hay donde cruzan los vehículos se hacen las fotos y es tremendamente hermoso el paisaje que se observa con el puente, el río,...
Ahora nos dirigimos a la estación de JR, pero antes paramos a comer en un restaurante recomendado en tripadvisor y muy peculiar en su decoración, empapelado de escritos de viajeros de todas partes del mundo, se llama Hippari Dako, bueno, bonito y barato. Almuerzo para dos 1750, probamos la especialidad de la casa los Yakisoba, plato con brochetas(el de albóndigas está muy rico) ,arroz y noddles. Recomendable al 100%.
Tras tener la barriga llena, caminamos a la estación e hicimos tiempo para coger el tren de las 14:20. Mismo camino de vuelta a Tokyo, pero esta vez iríamos a la estación de Shimbashi, para coger monorail a Odaiba.Para esto nos bajamos en Tokyo Station y cogimos la Yamanote Line hasta Shimbashi. En está parada cogimos la línea Yurikamome, un línea más cara y no incluida en el JR Pass, pero es la única que llega a Odaiba, precio del trayecto 320, un poco menos con la Suica, nos bajamos en Daiba poco antes de las 5 de la tarde.
Cuando nos bajamos empezamos a notar un frío que no era normal, lo más asombroso es ver a las japonesas con faldas y media finas, y yo tullida al máximo . Las vistas que se disfrutan desde Odaiba son increíbles, y en la noche aún más, recomendable venir aquí para poder observar la puesta de sol, maravillosa, una vez se iluminan los edificios, las luces, el puente, guauuu!!!!, sin palabras, un momento de esos de subidón viajero que ni el frío estropea .
Cenamos en Odaiba por 1910 yenes las dos personas, en el centro comercial donde está el famoso robot gigante. Paseamos por toda la zona, vimos un concierto que estaban haciendo unos chicos muy jovencito a los pies del robot, visitamos la casa Toyota, otro centro comercial y regresamos a Asakusa. Pasamos por el templo de Asakusa para poder observar por última vez tremenda belleza y a dormir, que mañana tocaba partir a los Alpes Japoneses.
A las 9:08 estábamos en Nikko, salimos a la estación y allí mismo cogimos el bus que va a los templos, no hace falta ir a la estación de Bus (Tobu Station) que está caminando a mano derecha según sales. Decidimos hacer solo un trayecto en bus, el de ida y bajar caminando recomiendo hacerlo así. En nikko solo nos centramos en los templos pues queríamos ir a Odaiba a nuestro regreso a Tokyo y poder verlo tanto de día como de noche.
Nos bajamos en la parada de Omotesando. Las visitas las hicimos en el siguiente orden
1* visita -Nikkō Tōshō-gū: Precio 1300 por persona.En el primer patio se encuentra la pagoda Gojunoto, de cinco niveles; reconstruida en 1818 tras un incendio que la consumió tres años antes. Más adelante, encontramos la puerta Niomon, flanqueada por dos estatuas de figuras Niō. Tras la puerta está el segundo patio, con el establo sagrado. En frente del establo se encuentra el famoso grabado en madera de los tres monos sabios. El patio está rodeado por los almacenes, y la fuente sagrada construida en 1618, utilizada para rituales de purificación. A partir de allí, se suben dos escalinatas hacia la puerta Yomeimon, que conduce al patio final y a los santuarios dedicados al shōgun. Yomeimon es probablemente la edificación que tiene la decoración más elegante de todo el conjunto, es hermoso. Subimos a la tumba de Tokugawa Ieyasu que no se encuentra dentro de los santuarios, sino en una torre adyacente, llamada Hōtō.
2* visita -Jinja Futarasan : Precio 200 yenes porpersona. El Puente Sagrado de Nikko que cruza el río Daiya pertenece al este santuario. A mi gusto este lugar no tiene demasiado interés.
3* visita -Taiyuinbyo. Compramos una entrada combinada por 900 yenes por persona que incluía este templo y el Rinnoji, ambos en reforma pero en el Rinnoji es que no merecía la pena ni entrar.
4* visita -Rinnoji El edificio principal del templo, el Sanbutsudo , alberga estatuas de madera de Amida, Senju Kannon-("Kannon con mil brazos") y Bato-Kannon ("Kannon con una cabeza de caballo"). Estaba en obras y a mi gusto no merecía la pena ni entrar.
Bajo esa foto seguro que es precioso.
Frente Sanbutsudo está el Museo de Rinnoji . También se puede visitar el Shoyoen , un pequeño jardín de estilo japonés que está situado detrás de la casa del tesoro. Precio 300Y el museo con el jardín, pero no entramos.
De nikko me llevo una sensación rara debido a las obras de mantenimiento en los templos, aunque sus templos son preciosos, los mas que me gustaron fueron el Tosho-gu y el Taiyuinbyo, estaban la mayoría en obras y eso no mola nada .
Sobre las 12 estábamos terminando de hacer las visitas y fuimos caminando al puente, no pagamos por entrar,sino que lo vimos desde en frente, ya que si quieres acceder a el hay que pagar una entrada que no recuerdo cuanto era, creo que no merece la pena. Desde el frente, otro puente que hay donde cruzan los vehículos se hacen las fotos y es tremendamente hermoso el paisaje que se observa con el puente, el río,...
Ahora nos dirigimos a la estación de JR, pero antes paramos a comer en un restaurante recomendado en tripadvisor y muy peculiar en su decoración, empapelado de escritos de viajeros de todas partes del mundo, se llama Hippari Dako, bueno, bonito y barato. Almuerzo para dos 1750, probamos la especialidad de la casa los Yakisoba, plato con brochetas(el de albóndigas está muy rico) ,arroz y noddles. Recomendable al 100%.
Tras tener la barriga llena, caminamos a la estación e hicimos tiempo para coger el tren de las 14:20. Mismo camino de vuelta a Tokyo, pero esta vez iríamos a la estación de Shimbashi, para coger monorail a Odaiba.Para esto nos bajamos en Tokyo Station y cogimos la Yamanote Line hasta Shimbashi. En está parada cogimos la línea Yurikamome, un línea más cara y no incluida en el JR Pass, pero es la única que llega a Odaiba, precio del trayecto 320, un poco menos con la Suica, nos bajamos en Daiba poco antes de las 5 de la tarde.
Cuando nos bajamos empezamos a notar un frío que no era normal, lo más asombroso es ver a las japonesas con faldas y media finas, y yo tullida al máximo . Las vistas que se disfrutan desde Odaiba son increíbles, y en la noche aún más, recomendable venir aquí para poder observar la puesta de sol, maravillosa, una vez se iluminan los edificios, las luces, el puente, guauuu!!!!, sin palabras, un momento de esos de subidón viajero que ni el frío estropea .
Cenamos en Odaiba por 1910 yenes las dos personas, en el centro comercial donde está el famoso robot gigante. Paseamos por toda la zona, vimos un concierto que estaban haciendo unos chicos muy jovencito a los pies del robot, visitamos la casa Toyota, otro centro comercial y regresamos a Asakusa. Pasamos por el templo de Asakusa para poder observar por última vez tremenda belleza y a dormir, que mañana tocaba partir a los Alpes Japoneses.