Este día lo dedicamos exclusivamente a estar en la zona del Dubai Mall y el Burj Khalifa.
Montamos en el metro y nos bajamos en la estación Burj Khalifa/Dubai Mall. Cruzamos la carretera por una pasarela cubierta y fuimos a las oficinas de Arabian Nigths, que estaban en un edificio enfrente de la estación, a contratar la excursión safari por el desierto para el domingo. Usamos los cupones 2x1.
Después de andar como más de un kilómetro por unos pasillos interiores que conectan el metro con el mall, la mayor parte del trayecto por cintas transportadoras, llegamos al Dubai Mall. Es impresionante, como una gran ciudad donde puedes encontrar unas 1.200 tiendas de todo tipo: moda, libros, relojes, complementos, electrónica, menaje del hogar…., para todos los gustos y presupuestos. Es el centro comercial más grande y visitado del mundo.
Dimos una pequeña vuelta por el mall y sobre las 12 fuimos a la planta baja donde estaban las taquillas para subir al Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo con una altura de 828 metros. No había reservado anteriormente los tickets por internet porque cuestan lo mismo y, como parecía que no había problemas de capacidad para subir en las horas del mediodía, prefería esperar a cogerlos en las taquillas para asegurarme que el día tuviera buena visibilidad.
Antes de llegar a las puertas del ascensor pasamos por unos pasillos o galerías donde se informa acerca del edificio y sobre cómo se realizó su construcción. Montamos en el ascensor y en menos de un minuto llegó a la planta 124, localizada a 442 metros de altura, donde está el mirador. Las vistas desde allí arriba son espectaculares y se puede ver la ciudad con lo más representativo de Dubai: abajo la zona del lago donde están las fuentes danzantes, la zona de los rascacielos cercanos, y a lo lejos el Burj al Arab, la Palmera, las islas artificiales que forman The World, los rascacielos de Dubai Marina,… ¡una pasada! Justo cuando estábamos arriba pudimos ver el espectáculo de las fuentes.
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Montamos en el metro y nos bajamos en la estación Burj Khalifa/Dubai Mall. Cruzamos la carretera por una pasarela cubierta y fuimos a las oficinas de Arabian Nigths, que estaban en un edificio enfrente de la estación, a contratar la excursión safari por el desierto para el domingo. Usamos los cupones 2x1.
Después de andar como más de un kilómetro por unos pasillos interiores que conectan el metro con el mall, la mayor parte del trayecto por cintas transportadoras, llegamos al Dubai Mall. Es impresionante, como una gran ciudad donde puedes encontrar unas 1.200 tiendas de todo tipo: moda, libros, relojes, complementos, electrónica, menaje del hogar…., para todos los gustos y presupuestos. Es el centro comercial más grande y visitado del mundo.
Dimos una pequeña vuelta por el mall y sobre las 12 fuimos a la planta baja donde estaban las taquillas para subir al Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo con una altura de 828 metros. No había reservado anteriormente los tickets por internet porque cuestan lo mismo y, como parecía que no había problemas de capacidad para subir en las horas del mediodía, prefería esperar a cogerlos en las taquillas para asegurarme que el día tuviera buena visibilidad.
Antes de llegar a las puertas del ascensor pasamos por unos pasillos o galerías donde se informa acerca del edificio y sobre cómo se realizó su construcción. Montamos en el ascensor y en menos de un minuto llegó a la planta 124, localizada a 442 metros de altura, donde está el mirador. Las vistas desde allí arriba son espectaculares y se puede ver la ciudad con lo más representativo de Dubai: abajo la zona del lago donde están las fuentes danzantes, la zona de los rascacielos cercanos, y a lo lejos el Burj al Arab, la Palmera, las islas artificiales que forman The World, los rascacielos de Dubai Marina,… ¡una pasada! Justo cuando estábamos arriba pudimos ver el espectáculo de las fuentes.
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Después de estar un rato largo contemplando las espléndidas panorámicas y de sacar un montón de fotos, bajamos y fuimos a comer a la zona del food court, un recinto dentro del mall donde puedes encontrar todo tipo de restaurantes, desde restaurantes de comida rápida, hasta pizzerías, comida libanesa… De postre tomamos unas porciones de tarta y unos cafés en los sofás de una cafetería del mall.
Continuamos paseando por el mall, donde vimos, entre otras muchas cosas, la fashion Avenue (preciosa con sus mariposas colgando), la zona de the Souk, la pista de hielo, el enorme y precioso acuario, que tiene el récord guinness al mayor panel acrílico en una sola pieza del mundo, el parque de atracciones de Sega Republic, la fuente de los saltadores, Water Fall, que es una cascada bastante llamativa,…
Como faltaba poco para las 6 de la tarde, hora en la que empezaba el espectáculo de luz y sonido de las fuentes danzantes más grandes del mundo (Dubai Fountain), que dura unos 10 minutos y se hace cada media hora cambiando de música y coreografía, salimos a la zona del lago. Desde ahí la vista del Burj Khalifa es espectacular, te duele hasta el cuello de mirar para arriba.
Esta zona es muy bonita, con el lago y las fuentes, el Dubai Mall, el Burj Khalifa, otro centro comercial de tiendas y restaurantes en forma de zoco, llamado Souq Al Bahar, el hotel Address, que sin ser tan espectacular como el Burj Khalifa, también es muy bonito y muchos restaurantes con terrazas alrededor del lago.
El espectáculo de las fuentes es muy chulo, una de las atracciones que más nos gustó de Dubai. Lo vimos varias veces esa noche y volvimos la última noche para verlo antes de coger el avión.
Nos acercamos a la zona donde llegan los coches para aparcarlos en el Dubai Mall y había un montón de cochazos, Rolls Royces descapotables, Ferraris, Lamborginis…. Era curioso ver cómo llegaban los dubaitís con su traje típico en su coche, les dejaban las llaves a los aparcacoches y se marchaban.
Había reservado para las 8 una mesa en la terraza del restaurante italiano Urbano. Estuvimos de maravilla cenando con unas vistas increíbles del Burj Khalifa y del espectáculo de las fuentes.
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