Desayunamos en el Hostel y directos a nuestra estación de metro la Mayakovskaya para hacer cambio en Gostiny Dvor a la línea 2 y bajarnos en la estación de Moskovskaya.
Una vez llegamos a Moskovskaya como teníamos entendido que al ser turista individual solo podemos entrar en el turno de las 12:00, fuimos a visitar la iglesia rosa CHESME CHURCH (en ruso Чесменская церковь) . Ésta iglesia está a 5 minutos caminando, aproximadamente a 1 Km, abre a partir de las 9:00 y es gratis. Cuando llegamos ya estaba abierta, la verdad que verla por fuera es realmente curioso.
Ahora caminamos nuevamente hasta la estación de metro y allí cogimos el minibús K-545, también llevábamos anotado el K-299, que también van hacia allí, supongo que buses hay más así que cuando llegues pregunten y problema solucionado, pero estos seguro van a el Palacio de Santa Catalina. Te montas y le dices al conductor Santa Catalina Palace, pagas 35 rublos y para dentro. El trayecto dura unos 45 minutos más o menos. Cuando llegamos nos avisaron donde nos bajábamos y nos dispusimos a visitar el palacio, aún no eran las 12:00 y nos pusimos en cola, al poco empezaron a entrar por tandas, entraba un grupo de gente y paraban la cola, supongo que con la intención de que dentro no estemos todos juntos, justo cuando llega a nosotros para la cola, normal ,siempre tenemos la mala suerte, pero nos camelamos al trabajador y nos dejó pasar, qué más da 3 personas más, así que nos ahorramos unos 10 minutos de espera más o menos . Precio de la entrada 400 rublos.
Al entrar en el palacio, se puede sentir el espíritu de la época y enseguida caemos cautivados por la suntuosa decoración de la Gran Sala y por la famosa Sala de Ámbar que volvió a la vida. Una visita altamente recomendable junto con el palacio de Peterhoff, al que iríamos mañana. Tras recorrer el palacio, caminamos por los jardines, aún bajo el hielo y con las esculturas cubiertas, aquello en primavera debe ser precioso.
Antes de regresar caminamos hacia la Catedral de Santa Catalina, la visitamos y allí en frente cogimos el minibús de vuelta a San Petersburgo.
Una vez llegamos al metro de MOSKOVSKAYA decidimos ir a visitar el monasterio de Smolny que cerraba a las 18:00, para lo cual deberíamos llegar a la estación de metro de CHERNYSHEVSKAYA, de la linea 1 y allí coger el minibús K-46 o K-76, que nos llevaría hasta la catedral de Smolny, pero antes paramos para ver el Arco del Triunfo, que se encuentra justamente en la salida del metro Moskovskiye Vorota.
Ahora sí que pusimos rumbo a el monasterio de Smolny, y cual fue la sorpresa que cuando llegamos estaba en obras, así que dimos la vuelta, entramos dentro, y decidimos marchar a el centro caminando por el paseo que va por el río, que pensábamos que era menos según el GPS y fue un buen rato caminando, eso sí, un paseo bonito, con la puesta de sol y sus reflejos entre el agua y el hielo, precioso.
Llegamos a el centro después de mucho caminar, cenamos por allí y cogimos el Trolebús hacia nuestro hotel.
Una vez llegamos a Moskovskaya como teníamos entendido que al ser turista individual solo podemos entrar en el turno de las 12:00, fuimos a visitar la iglesia rosa CHESME CHURCH (en ruso Чесменская церковь) . Ésta iglesia está a 5 minutos caminando, aproximadamente a 1 Km, abre a partir de las 9:00 y es gratis. Cuando llegamos ya estaba abierta, la verdad que verla por fuera es realmente curioso.
Ahora caminamos nuevamente hasta la estación de metro y allí cogimos el minibús K-545, también llevábamos anotado el K-299, que también van hacia allí, supongo que buses hay más así que cuando llegues pregunten y problema solucionado, pero estos seguro van a el Palacio de Santa Catalina. Te montas y le dices al conductor Santa Catalina Palace, pagas 35 rublos y para dentro. El trayecto dura unos 45 minutos más o menos. Cuando llegamos nos avisaron donde nos bajábamos y nos dispusimos a visitar el palacio, aún no eran las 12:00 y nos pusimos en cola, al poco empezaron a entrar por tandas, entraba un grupo de gente y paraban la cola, supongo que con la intención de que dentro no estemos todos juntos, justo cuando llega a nosotros para la cola, normal ,siempre tenemos la mala suerte, pero nos camelamos al trabajador y nos dejó pasar, qué más da 3 personas más, así que nos ahorramos unos 10 minutos de espera más o menos . Precio de la entrada 400 rublos.
Al entrar en el palacio, se puede sentir el espíritu de la época y enseguida caemos cautivados por la suntuosa decoración de la Gran Sala y por la famosa Sala de Ámbar que volvió a la vida. Una visita altamente recomendable junto con el palacio de Peterhoff, al que iríamos mañana. Tras recorrer el palacio, caminamos por los jardines, aún bajo el hielo y con las esculturas cubiertas, aquello en primavera debe ser precioso.
Antes de regresar caminamos hacia la Catedral de Santa Catalina, la visitamos y allí en frente cogimos el minibús de vuelta a San Petersburgo.
Una vez llegamos al metro de MOSKOVSKAYA decidimos ir a visitar el monasterio de Smolny que cerraba a las 18:00, para lo cual deberíamos llegar a la estación de metro de CHERNYSHEVSKAYA, de la linea 1 y allí coger el minibús K-46 o K-76, que nos llevaría hasta la catedral de Smolny, pero antes paramos para ver el Arco del Triunfo, que se encuentra justamente en la salida del metro Moskovskiye Vorota.
Ahora sí que pusimos rumbo a el monasterio de Smolny, y cual fue la sorpresa que cuando llegamos estaba en obras, así que dimos la vuelta, entramos dentro, y decidimos marchar a el centro caminando por el paseo que va por el río, que pensábamos que era menos según el GPS y fue un buen rato caminando, eso sí, un paseo bonito, con la puesta de sol y sus reflejos entre el agua y el hielo, precioso.
Llegamos a el centro después de mucho caminar, cenamos por allí y cogimos el Trolebús hacia nuestro hotel.