15 Agosto
El plan de hoy en un principio, era visitar Sintra. Pero anoche descubrimos que en Portugal también es festivo el 15 de agosto. Leyendo comentarios sobre la marabunta que se forma en Sintra en fines de semana/festivos y más todavía en verano, decidimos posponerlo a mañana. Hoy nos iríamos a alguna playa de Cascais. Ahora la pregunta que surgía era en coche o en tren, y viendo pros y contras nos decidimos por tren. El no tener que buscar aparcamiento por allí pesó mucho en la decisión final.
Así que cogimos los bártulos y a aprovechar los últimos momentos de nuestro billete diario (¡cómo se exprime!). Cogimos el bus, ésta vez el 732, en la avda. Liberdade y nos dejó en la estación de tren Cais do Sodré. Los trenes hacia Cascais salían cada 20 minutos y tardan 40 minutos en llegar. Nos fuimos a la cola que había en las máquinas automáticas que parecía menor que en las ventanillas. Había 3 máquinas y sólo funcionaban 2, de pronto una de éstas deja de funcionar porque no echaba cambio, y quedaban menos de 10 minutos para que saliera el tren. Tuvimos que comprar 2 tarjetas Viva Viagem porque son diferentes las de tren a las otras, y recargarlas con 2 billetes. Creo que fueron 2'4€ por viaje. Al final no se cómo pero logramos coger el tren, con carrera incluida.
El tren llegó a su hora y salimos de la estación en busca de las playas. Tuve una confusión y en vez de tirar para la izquierda que es donde están las playas más grandes de esa zona, nos fuimos para la derecha qué hay un par de calitas. Al final no nos salió mál la jugada. Lo que íbamos viendo del pueblo nos estaba gustando. Tenía su encanto. Estuvimos en la playa da Ribera de Cascais, que aún siendo pequeña, estuvimos muy cómodos. Nada de estar apretujados. Eso sí, si el otro día el agua estaba fresquita, hoy parecía que había cubitos de hielo, ¡madre mía! Era hora de un refrigerio, así que nos paramos en O'Neill's Irish Pub, que está en la plaza contigua, 5 de octubre. Tiene una pequeña terraza que aprovechamos con nuestras pintas de Kilkenny, un poco caras la verdad (5€) pero es que es una debilidad. Por lo menos pudimos usar el wifi del pub. Antes de darnos otro chapuzón, fuimos a intentar reservar mesa a Polvo Vadío (R. Afonso Sanches 47) que estaba cerca de allí y tenía muy buenas críticas, siendo especialistas en pulpo (polvo en portugues). Sólo reservaban para la noche pero apuntó nuestro nombre para tener un poco de enchufe. El local tiene 6 mesas mal contadas. Otro chapuzón y ya era hora de comer.
Tuvimos que esperar unos 10 minutos antes de tener mesa. Nada viendo el trasvase de gente que iba llegando pidiendo mesa. Nos comimos una tabla de quesos, pulpo frito y arroz con pulpo. Acompañandolo de vino verde e incluso unos caipirinhas recién preparados. Creo recordar que fueron unos 40€. Todo buenísimo, aunque el arroz podría haber estado mejor, pero sólo porque tenía cilantro y a nosotros no nos va mucho.
Había que bajar la comida y el alcohol de alguna manera, y qué mejor manera que ir a la Boca do inferno dando un paseo. El lugar es espectacular y simplemente os dejaré unas fotos, porque mejor verlo. Tened cuidado que hace bien poco ha salido la noticia de que un turista español se ha caido por el acantilado y estaba grave.
Seguimos el paseo que hay junto al mar. Una posibilidad es que cojais unas de las bicis que alquilan de manera gratuita (ALQUILER DE BICAS). Nosotros ni lo miramos porque ibamos hasta con una sombrilla. Volvimos a Cascais, viendo desde lejos el Faro, el museo Condes de Castro Guimaraes y la ciudadela, además de las esculturas que iban saliendo a nuestro paso. Ya estabamos de vuelta en la playa de antes y fue momento de relax de nuevo. Después de un buen rato, nos fuimos hacia la estación de trenes pero antes nos detuvimos en la Gelados Santini (Av. Valbom 28F) a comernos unos cucuruchos de 2 sabores por 2'9€ cada uno. Tienen mucha fama y la verdad es que estaban buenos. Aquí se acabó Cascais para nosotros y volvimos a nuestro apartamento. Esta noche estabamos tan cansados que ni siquiera salimos a tomar algo.
Mañana habría que madrugar para visitar Sintra.
Mañana habría que madrugar para visitar Sintra.