Amaicha ✏️ Travel Journeys of Argentina

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Hoy nos levantamos más tarde y nos despedimos de la buena gente de Cafayate. Nos vamos a Amaicha, un pueblecito que no entraba en nuestros planes pero que mucha gente nos había recomendado. Quizá por eso nos decepcionó tanto porque la gente nos hablaba maravillas de él.

Se trata de un pueblo minúsculo totalmente muerto y sin nada que hacer dónde aparentemente hay el mejor clima de Argentina. Tanto era así que algún tiempo atrás si hacia nublado te regalaban la noche y la comida. Aunque hacia mucho sol también soplaba un aire bastante desagradable (el sonda) que levantaba todo el polvo.

No sé porque, hay bastantes sitios dónde hospedarse y bastante más caro de lo que teníamos previsto (unos 150 pesos por persona) a pesar de que no se veía a nadie por las calles. No sabíamos si quedarnos o irnos, pero hablamos con una chica que había en la plaza que nos ofreció su casa por 50 pesos cada una y nos quedamos.

A partir de un viajero que también estaba en la casa, conocimos la Casa Mazamorra regentada por Noe una descendente de indígenas que quería recuperar las costumbres y la concepción comunitaria del pueblo. Amaicha es el único territorio de Argentina que el reino de España otorgó a los indígenas por lo que es propiedad suya. Eso ocurrió porque los Amaichas traicionaron a otro pueblo indígena, los Quilmes, y obtuvieron su recompensa. Los Quilmes eran un pueblo muy valiente a los que los colonos no podían derrotar. Los Amaichas les mostraron como y los españoles se llevaron a toda su gente andando desde allí hasta la provincia de Buenos Aires. La mayoría murieron por el camino y son muy recordados. Las famosas Ruinas de Quilmes se encuentran a pocos kilómetros de allí y como curiosidad, la cerveza Quilmes lleva este nombre porque se originó en el lugar dónde llegaron en Buenos Aires.

La casa de Noe era un lugar muy hippy que hospedaba gente a cambio de colaborar con la comunidad y estaba bastante concurrida. Nos quedamos allí a pasar la tarde, pero fuimos a cenar con la chica que nos hospedaba en su casa. Si sois muy hippis esa es una parada obligada.

En Amaicha hay una excursión a hacer de unos 12km (aunque hay un bus que te acerca unos 8km, pero pasan pocos durante el día) también a una cascada dónde se tiene que abonar una entrada de unos 30 pesos. No fuimos porque no nos quedó claro si nos podíamos bañar (algunos decían que sí, otros que depende de quien este cobrando entrada, otros que no…) y no nos queríamos arriesgar.

Al terminar el día no acabábamos de ver porque todo el mundo recomienda tanto Amaicha, pero si vais en auto os viene de camino (está a unos 30 o 40 minutos de Cafayate) así que podéis pasar por ahí y juzgar vosotros mismos.

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