DIA 4 Y 5: HOI AN ✏️ Travel Journeys of Vietnam

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Al final nuestro vuelo despegó a las 12 de la noche con llegada a Da Nang sobre la 1, cuando salimos del aeropuerto había una fila de gente para coger taxis y una persona de la compañía Vinasun asignándolos. Cuando nos tocó nuestro turno, intentamos negociar con el taxista el precio, pero nos dijo que iba con taxímetro, cual fue nuestra sorpresa que al llevar a Hoi An el precio era de casi de 500.000 VND (cerca de 20 euros) mientras que decían que decían que se podía conseguir por 15 dólares… en fin, eran cerca de las 2 de la madrugada y estábamos muy cansados para discutir…

A la mañana siguiente tocó levantarnos a las 8,30 para desayunar y dar una vuelta por la Old Town antes de que el calor apretara, en el hotel nos dejaron las bicis para bajar, nos dimos una vuelta por la ciudad (al centro solo se puede acceder andando o en bici, por fin un rato sin motos!), por el mercado, buscamos un restaurante para comer y nos subimos otra vez al hotel para descansar.

A la vuelta de la esquina del hotel, vimos una lavandería, así que llevamos la ropa sucia, 20.000 VND por kilo, es decir, menos de un euro.

Por la tarde después de la siesta cogimos las bicis otra vez, pero esta vez nos fuimos a la playa. Al llegar allí, aparcas la bici en uno de los sitios preparados para ello en la entrada (creo que nos costó 20.000 VND) y al llegar a la playa, alucinábamos con el montón de gente que había, el 99% vietnamitas, así que si queréis un día tranquilo de playa, mejor ir por la mañana, pues los locales suelen ir por la tarde para que no les dé el sol, según nos dijeron… un rato antes de que se pusiera el sol, regresamos al hotel y nos dimos un baño en la piscina, que estaba bastante más tranquila que la playa jeje.

Nos preparamos para ir a cenar y esta vez bajamos al centro andando, lo malo que llovía, pero en la habitación del hotel teníamos 2 paraguas, así que hicimos buena cuenta de ellos. Cenamos en un restaurante que se llamaba Bale Well, que tenía un menú por un precio fijo, creo que solo sirven eso, porque no nos dieron carta y empezaron a sacar platos y platos, otra vez que nos sobré un montón de comida…

Después de cenar ya no llovía y dimos un paseo nocturno por el rio, una pasada el ambiente que había! Con los farolillos y toda la gente, la verdad que estaba muy bien, tomamos una cervecita al otro lado del rio y regreso al hotel que al día siguiente volvíamos a madrugar para ir a las Montañas de Mármol.

Para ir a las montañas de mármol, se puede contratar una excursión, negociar un taxi que te lleva, espera 2 horas y regresa (hay gente que cuando va al aeropuerto hace esto) o incluyo contratar una moto. Nosotros lo valoramos todo y finalmente decidimos ir en el bus local, en la Lonely habla de él, pero no da bien la dirección, nosotros la encontramos bien en la página de vietnamitasenmadrid, que resulta que estaba a 15 minutos andando de nuestro hotel.

www.vietnamitasenmadrid.com/ ...anang.HTML

Creo que el bus sale cada 30 minutos y llega hasta Da Nang, nosotros paramos en las montañas de mármol y nos cobró 30.000 VND a cada uno (no sacas billete, hay una señora en el bus que va cobrando a la gente que se sube). Media hora más tarde la misma señora nos avisó que ya llegaba nuestra parada.

Hay dos entradas, una con muchas escaleras y un ascensor para los que no quieran subir por las escaleras, y otra con unas menos escaleras. Nosotros elegimos esta última entrada sin saberlo, pues es la que estaba más cerca de la carretera, así que empezamos el recorrido al revés, pero bueno da igual, eso sí, después descubrimos que si no quieres usar el ascensor (no sé cuánto cuesta) mejor esas escaleras, que se son bastante menos que las de la otra entrada. Como íbamos por libre, seguimos el recorrido del mapa y las descripciones de la Lonely, la verdad que el sitio es muy bonito pero había una humedad del 100% y se hizo duro. En dos horas ya estábamos fuera esperando el bus para volver, y resulta que fue el mismo que el de iba con la misma chica.

Regresamos al hotel, cogimos la ropa limpia de la lavandería, descansamos un poco y cogimos las bicis para dar una vuelta por los arrozales que hay camino de la playa, para terminar comiendo en una restaurante en medio de los arrozales que se llamaba “trà qué garden” que ofrecen también “cooking class” pero nosotros solo queríamos comer, la verdad que muy bonito, comimos por 8 euros y como siempre sobró comida…

Por la tarde, después de la siesta, bajamos otra vez al centro, para dar el último paseo, pasamos por el mercado, compramos un par de camisetas y una mochila y buscamos un sitio para cenar, en estos dos días intentamos 3 veces comer o cenar en el café de Miss Ly, y las tres veces que no pudimos entrar, así que comimos en un restaurante cualquiera.

Paseo, cervecita y regreso al hotel porque al día siguiente cogíamos el sleeping bus a Hue. Que por cierto, lo contratamos en el hotel y nos venían a recoger al hotel. No recuerdo el precio, pero no fue muy caro. Si no tenéis la posibilidad de contratarlo en el hotel, hay agencias por todo Hoy An que ofrecen el servicio, así como transfer al aeropuerto y a Da Nang.

CONCLUSIONES HOI AN: Nos gustó mucho esta ciudad, sobretodo la idea de ir en bici, y que el centro estuviera cerrado a las motos y coches ni te cuento, el ambiente de la noche también era muy bueno, así que en general nos fuimos contentos. Hay algunos comentarios negativos que dicen que es una ciudad demasiado preparada para el turismo, pero a nosotros eso no nos importó, como ya dije antes, que el centro esté cerrado al tráfico es un punto a su favor.

El hotel donde estuvimos nos gustó mucho, aunque estaba un poco alejado del centro, pero se solucionaba con las bicis, lo malo era por la noche que había que bajar al centro andando (20 minutos), pero bueno, no había inseguridad, así que no nos importó, el hotel se llamaba Hoi an Rose Garden Hotel y nos costó unos 60 € nuevo, con desayuno y piscina (y paraguas) 3 noches.

Desde Hoi An se puede hacer una excursión a unas ruinas que se llaman My Son que las ofrecen por todos los sitios y la ciudad también es famosa por hacer ropa a medida en menos de 24 horas y por las “cooking class”.

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