Día 1: llegada ✏️ Diarios de Viajes de Holanda

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Con los billetes comprados desde agosto no veía el día de irme por fin a conocer esa ciudad tan bonita e "instagrameable" (que se dice ahora) que es Amsterdam. Mirando el tiempo cada día para ver si hacía sol o metía un chuvasquero en la maleta... llegó el día!
Llegamos al aeropuerto de Schiphol el lunes y lo primero que hicimos fue coger el tren dirección Central Station (el billete se coge en las maquinas amarillas que hay por todo el aeropuerto y también en la estación, incluso alguna en la calle). El billete cuesta 4.20€, más 1€ por cogerlo en la máquina.
Mi casero me recalcó que no tomara el autobús desde el aeropuerto, que cogiera el tren.
Una vez llegamos a la estación compramos un bono para el tranvía/metro/bus también en las máquinas (también se puede coger en el propio tranvía);esta máquina no es la misma que la de los billetes de tren, es una máquina blanca y azul que está a la salida de la estación. Estas máquinas sólo aceptan monedas o pagar con tarjeta, nada de billetes. Antes de ir había leído en varios sitios que en Holanda solía haber problemas con las mastercard, yo pagué con ella en bastantes ocasiones y todo fue correcto.
Otra cosa de la que quiero informar es que en la página web del transporte público de Amsterdam (www.gvb.nl/gvb-dag-meerdagenkaart) aparece una tarjeta válida para 7 días por 34€, pero en las máquinas de las que os he hablado el máximo son 4 días, con lo cual nosotros tuvimos que coger dos, la primera válida para 4 días y otra válida para 3. Desconozco si en el propio tranvía se puede coger la de 7 días.
Después de llegar al alojamiento y dejar las maletas nos volvimos al centro de la ciudad y sin más empezamos a pasear... Amsterdam es una ciudad para pasearla, perderse por sus callejuelas y admirar las casitas tan representativas, los canales, las bicicletas... (ver el dominio que tienen de la bicicleta es impresionante, van con los cascos, el móvil y aún así no se caen ni atropellan a nadie!!)
Vimos plaza Dam, fuimos a ver la casa de Ana Frank por fuera y ver el ambiente ya que leí que siempre hay colas interminables (yo las tenía cogidas por internet para el miércoles) y luego fuimos a la iglesia Westerkerk.
Esta iglesia solo abre hasta las 4 de la tarde, visitarla es gratis pero subir a la torre cuesta 8€, eso fue lo que hicimos nosotros, ya que la iglesia ya estaba cerrada al público. Hay subidas cada media hora, sube un guía con los visitantes y va contando la historia de la iglesia (en inglés). Aviso: hay que subir muuuchas escaleras "amsterdanesas", es decir: escaleras pequeñitas y en caracol. La última parada es el mirador de la torre, vistas impresionantes de todo Amsterdam, sin duda merece la pena pagar los 8€.
Al bajar de la torre nos fuimos caminando para conocer un poco más la ciudad, visitamos el Barrio Rojo y nos fuimos a casa a reponer fuerzas para la semana que teníamos por delante.

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