15/05/2018 Los Dragos, Las Buracas y conclusiones. ✏️ Travel Journeys of Spain

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Ultimo día de estancia y nos tocaba la zona noroeste, la galicia de la isla. Para empezar hay que atravesar el barranco de las Angustias y subir al mirador del Time y, aunque sea en coche, impresiona. Las vistas desde el mirador donde paramos a tomar un café son también espectaculares.

Seguimos por la carretera de la costa dejando a nuestra izquierda plataneras y plataneras hasta llegar a Puntagorda donde empiezan a aparecer otro tipo de cultivos como almendros y vides. Llegamos a Las Tricias un pueblito pequeño con una placita con vistas muy coqueta y paramos para hacer la Ruta de los Dragos o Ruta de Buracas.

La ruta tiene unos 7 km con una bajada, y subida claro está, de algo menos de 400 m y nosotros tardamos casi 3 horas en hacerla con muchas paradas. A tramos se cruza con la otra red de senderos importante de la isla, el GR 130 que la circunvala por la costa.

La bajada, muy pronunciada, la hicimos casi en recto siguiendo las agrupaciones de dragos (árboles típicos del archipiélago aunque yo en Lanzarote no he visto ninguno) algunas de ellas espectaculares y por lo visto centenarios. Al final de la bajada y desviándose a la derecha se llega a la zona de cuevas (buracas) que en su día se utilizaron como viviendas. Según leí en la prensa local, se va a hacer en ellas un centro de interpretación y se va a regular el acceso dado el aumento de visitantes. Para subir tomamos un camino a la derecha (según se sube) que nos lleva hacia una pista asfaltada que asciende en zigzag hasta el pueblo y permite contemplar casas y huertas rehabilitadas que conforman un valle muy bonito (Se ven bastantes hippies/ecologistas en la zona). Una ruta ampliamente recomendable por lo bonita.

Quisimos seguir recorriendo la zona pero hacía un viento exagerado, tanto por el día como por la zona de la isla que creo yo es más ventosa. Estábamos en Santo Domingo de Garafía y aparentemente estaba todo cerrado hasta que retrocediendo encontramos el restaurante El Bernegal, otro descubrimiento de interés. Como se aprecia, el tema comida en la isla no tiene puntos débiles. Una casona canaria muy bien restaurada y buena comida: potaje de berros, una ensalada muy completa y muy bien puesta, un cherne con mojo verde exquisito, un tournedo con salsa bearnesa muy rico, botella de vino de la zona y como casi siempre, 49€. Muy bien otra vez.

Teníamos pensado intentar ir al parque natural de la Zarza pero desistimos y nos volvimos a al puerto de Tazacorte a despedirnos de La Palma en una terraza viendo atardecer otra vez.

Para concluir decir varias cosas:

-el nombre de Isla Bonita está más que justificado sobre todo en toda la zona norte de la isla.
-se come muy bien y no sólo pescado.
-los Llanos y Santa Cruz son dos ciudades muy agradables (sobre todo la segunda).
-las distancias con coche en tiempo son importantes por las curvas y los desniveles y conviene alojarse en más de un sitio (yo no descartaría hospedarse también en el norte para evitar desplazamientos).
-hay que ir a andar o pasear y no a la playa y para eso en Canarias cualquier época es buena siempre que el viento no sea excesivo

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