Día 20. Oslo
Nos toca el último trayecto de viaje y el más largo. En unas 4 horas llegamos a Oslo y nos vamos directos a la National Gallery donde, entre otros muchos cuadros, podemos contemplar El Grito de Edvard Munch. El museo en sí no es muy grande y es una pinacoteca muy completa e interesante.
El Grito de Edvard Munch
Después nos acercamos al parque Vigeland. Está ya cayendo el sol y la luz del atardecer es perfecta para admirar las esculturas que se reparten por todo el parque. La verdad que nos sorprendió mucho, no nos imaginábamos que mereciera tanto la pena visitar este museo al aire libre.
Parque Vigeland