Llegamos sobre las 13:30 (hora portuguesa) , rodeamos Évora y todo son murallas, además pasamos por debajo del acueducto, que buena pinta tenía la ciudad. Nos ponemos a rodear la ciudad y la muralla buscando el hotel, por el nombre del mismo, no estábamos muy lejos, M’Ar de Ar Muralhas .
Lo elegimos porque se adaptaba bastante a lo que buscábamos, a un paso del centro histórico, buenas instalaciones y de precio se adaptaba bastante a nuestras pretensiones, contratamos alojamiento y desayuno, así como el parking incluido. Recomiendo que lo contratéis, el aparcamiento anda escaso y lo que hay es zona azul, si queréis aparcar sin pagar tendríais que buscarlo por los alrededores del hotel.
Lo dicho, el hotel no está mal, para lo que lo queríamos, aquí os pongo algunas fotos, no son muchas pero tiene su página Web y además podéis encontrar opiniones de todos los gustos por Internet.
www.mardearhotels.com/ ...dex_en.asp
Lo elegimos porque se adaptaba bastante a lo que buscábamos, a un paso del centro histórico, buenas instalaciones y de precio se adaptaba bastante a nuestras pretensiones, contratamos alojamiento y desayuno, así como el parking incluido. Recomiendo que lo contratéis, el aparcamiento anda escaso y lo que hay es zona azul, si queréis aparcar sin pagar tendríais que buscarlo por los alrededores del hotel.
Lo dicho, el hotel no está mal, para lo que lo queríamos, aquí os pongo algunas fotos, no son muchas pero tiene su página Web y además podéis encontrar opiniones de todos los gustos por Internet.
www.mardearhotels.com/ ...dex_en.asp
La piscina es pequeñita y no hay muchas hamacas, pero tiene zona de césped donde puedes tumbarte, decir que había gente (y era Agosto) pero no vimos masificación, al contrario, vimos mucha tranquilidad y la verdad es que lo recomiendo como un hotel de paso para visitar la ciudad, es muy tranquilo. El desayuno, justo, tampoco para ponerle un 10, pero tenía lo básico. La habitación, sencilla, no tenemos queja.
Estuvimos a punto de contratar Media Pensión por un suplemento, pero desistimos, pregunté por el foro como estaba el tema de la comida en Évora y me comentaron que no habría problema para comer, así que hicimos caso del foro.
Sigo con mi relato, que me desvío , como era antes de las 14 (el check-in hay que hacerlo a partir de las 14) nos fuimos a comer algo, ¿dónde? Pues vamos al centro, seguro que allí hay algo.
Llegamos hasta la Plaza do Giraldo, centro neurálgico de la ciudad, además, la Oficina de Turismo se encuentra ahí, así que aprovechamos para informarnos de los monumentos que visitar, obtener planos, mapas y preguntar sitios y lugares para comer.
Salimos con planos, mapas pero sin recomendaciones para comer (según ellos, no podían recomendar, en todo caso, informar) ¿Qué hacemos, donde comemos? Pues mira, ahí en el restaurante Giraldo, para que darle más vueltas , decir que en la plaza hay varios y si sigues por la calle 5 de Octubre, encuentras más. Además tomamos unas fotos de la Iglesia de Sao Antao y su Fuente.
Estuvimos a punto de contratar Media Pensión por un suplemento, pero desistimos, pregunté por el foro como estaba el tema de la comida en Évora y me comentaron que no habría problema para comer, así que hicimos caso del foro.
Sigo con mi relato, que me desvío , como era antes de las 14 (el check-in hay que hacerlo a partir de las 14) nos fuimos a comer algo, ¿dónde? Pues vamos al centro, seguro que allí hay algo.
Llegamos hasta la Plaza do Giraldo, centro neurálgico de la ciudad, además, la Oficina de Turismo se encuentra ahí, así que aprovechamos para informarnos de los monumentos que visitar, obtener planos, mapas y preguntar sitios y lugares para comer.
Salimos con planos, mapas pero sin recomendaciones para comer (según ellos, no podían recomendar, en todo caso, informar) ¿Qué hacemos, donde comemos? Pues mira, ahí en el restaurante Giraldo, para que darle más vueltas , decir que en la plaza hay varios y si sigues por la calle 5 de Octubre, encuentras más. Además tomamos unas fotos de la Iglesia de Sao Antao y su Fuente.
No estuvo mal la cosa, comimos cada uno unos platos combinados y un refresco, hacía mucha , creo que lo mejor hubiese sido comer en el interior, pero bueno, ya estábamos fuera, en la terraza, así que a disfrutar de la comida portuguesa y de las vistas desde de la Plaza, comimos por unos 23 € los dos.
Después de comer, regresamos al hotel, hicimos el check-in y a disfrutar un poco de la que hacía calor ¿ya lo dije? además, entre chapuzón y chapuzón me puse a planificar la visita…si es que ya me lo dicen, que no paro ni debajo del agua.
Descansamos un poco después del baño y ya por la “fresquita”, decidimos dar una vuelta por el centro de Évora para ir viendo si la planificación que había estado haciendo era factible, era el mejor momento para buscar algún lugar para cenar.
Nada más salir del hotel, vamos por una calle que nos llevaría directos a la plaza Giraldo y cual fue nuestra sorpresa que nos encontramos con un restaurante italiano, y al lado del hotel, pero bueno, pasamos por la puerta y vemos gente, no tenía mala pinta, echamos un vistazo a la carta y a los precios y no estaban nada mal, además, vemos a gente llevarse pizzas y todo, vamos, como si fuera el Telepizza, decidimos tomar nota y seguir hacia el centro, si vemos que no nos convence ninguno pues ya tenemos restaurante para la cena.
Damos una vuelta por la plaza Giraldo, a esa hora estaba “atestá” de gente en las terracitas o paseando y la verdad es que se estaba muy a gusto, la temperatura ahora que se había ido el sol era agradable y se estaba muy bien aunque hacía un poco de viento pero para nada molesto, paseamos un poco por la Rua 5 de Octubre y calles aledañas, vemos a lo lejos la Catedral, ay madre y el templo de Diana, ay Dios Mío, yo ya , mejor mañana, no abuses hombre , menos mal que me dejé la cámara en el hotel, era de noche y probablemente no saldrían las fotos muy bien.
Después de hacer que el estómago hablara un poco de tanto andar, nos fuimos para…el italiano , pero más que nada porque los que habíamos visto no nos atraían mucho y los de la Rua 5 de Octubre estaban muchos cerrados, en fin, cuestión de gustos. .
La verdad es que lo recomiendo , está a un paso del hotel y los precios son muy asequibles y la comida no está mal, tienen pizzas medianas y pequeñas y los platos son grandes . Vamos, nosotros aunque estábamos en Portugal, reconozco que no echamos de menos la comida típica portuguesa , lo siento, puede tener delito pero tranquilos que al día siguiente nos desquitamos y disfrutamos de comida típica portuguesa 100% pero eso en la siguiente etapa.
Por cierto el restaurante se llama L'italiano y está en la Rua dos Mercadores, muy cerca del hotel. Cenamos por 21,10 € los dos (tortelini, pizza pequeña, agua, coca-cola, helado, fruta, cesta con pan de ajo y mantequilla).
Después de cenar, seguimos paseando un poco más, más que nada para bajar las pizzas y regresamos al hotel que estaba al lado para descansar pues al día siguiente tocaba visitar a fondo Évora.
La primera impresión de Portugal fue muy positiva y todo iba sobre la marcha, Elvas nos gustó y Évora tenía muy buena pinta. Una pena que no pudiéramos visitar Campo Maior y Estremoz, pero en fin, todo no se podía tener, el día había sido completo, mañana, tocaba más. Me quedé dormido contando… iglesias de Évora que por lo que vi, tener, no tiene muchas.
Después de comer, regresamos al hotel, hicimos el check-in y a disfrutar un poco de la que hacía calor ¿ya lo dije? además, entre chapuzón y chapuzón me puse a planificar la visita…si es que ya me lo dicen, que no paro ni debajo del agua.
Descansamos un poco después del baño y ya por la “fresquita”, decidimos dar una vuelta por el centro de Évora para ir viendo si la planificación que había estado haciendo era factible, era el mejor momento para buscar algún lugar para cenar.
Nada más salir del hotel, vamos por una calle que nos llevaría directos a la plaza Giraldo y cual fue nuestra sorpresa que nos encontramos con un restaurante italiano, y al lado del hotel, pero bueno, pasamos por la puerta y vemos gente, no tenía mala pinta, echamos un vistazo a la carta y a los precios y no estaban nada mal, además, vemos a gente llevarse pizzas y todo, vamos, como si fuera el Telepizza, decidimos tomar nota y seguir hacia el centro, si vemos que no nos convence ninguno pues ya tenemos restaurante para la cena.
Damos una vuelta por la plaza Giraldo, a esa hora estaba “atestá” de gente en las terracitas o paseando y la verdad es que se estaba muy a gusto, la temperatura ahora que se había ido el sol era agradable y se estaba muy bien aunque hacía un poco de viento pero para nada molesto, paseamos un poco por la Rua 5 de Octubre y calles aledañas, vemos a lo lejos la Catedral, ay madre y el templo de Diana, ay Dios Mío, yo ya , mejor mañana, no abuses hombre , menos mal que me dejé la cámara en el hotel, era de noche y probablemente no saldrían las fotos muy bien.
Después de hacer que el estómago hablara un poco de tanto andar, nos fuimos para…el italiano , pero más que nada porque los que habíamos visto no nos atraían mucho y los de la Rua 5 de Octubre estaban muchos cerrados, en fin, cuestión de gustos. .
La verdad es que lo recomiendo , está a un paso del hotel y los precios son muy asequibles y la comida no está mal, tienen pizzas medianas y pequeñas y los platos son grandes . Vamos, nosotros aunque estábamos en Portugal, reconozco que no echamos de menos la comida típica portuguesa , lo siento, puede tener delito pero tranquilos que al día siguiente nos desquitamos y disfrutamos de comida típica portuguesa 100% pero eso en la siguiente etapa.
Por cierto el restaurante se llama L'italiano y está en la Rua dos Mercadores, muy cerca del hotel. Cenamos por 21,10 € los dos (tortelini, pizza pequeña, agua, coca-cola, helado, fruta, cesta con pan de ajo y mantequilla).
Después de cenar, seguimos paseando un poco más, más que nada para bajar las pizzas y regresamos al hotel que estaba al lado para descansar pues al día siguiente tocaba visitar a fondo Évora.
La primera impresión de Portugal fue muy positiva y todo iba sobre la marcha, Elvas nos gustó y Évora tenía muy buena pinta. Una pena que no pudiéramos visitar Campo Maior y Estremoz, pero en fin, todo no se podía tener, el día había sido completo, mañana, tocaba más. Me quedé dormido contando… iglesias de Évora que por lo que vi, tener, no tiene muchas.