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Día 10 (04-01-19): vuelo Hanoi- Hong Kong
Último día en Hanoi, el vuelo hacia Hong Kong salía a las 10:30 de la mañana. Contábamos con llegar al aeropuerto sobre las 8 o así, ya que no facturábamos (aunque finalmente acabamos haciéndolo, para no ir tan cargados).
Así que nos levantamos a las 6 de la mañana y bajamos ya con las maletas y todo para desayunar a las 6:30 y hacer el check out. El buffet de desayuno en este hotel fue espectacular, había de todo y si no, lo pedías y te lo preparaban al momento. Es el único sitio donde pusieron variedad de quesos y embutidos, y multitud de dulces, algunos caseros. También todo tipo de platos calientes, frutas, bebidas... Muy bueno y abundante todo.
No pudimos entretenernos demasiado, a las 6:50 ya teníamos el coche esperando para llevarnos al aeropuerto, muy puntual (en principio habíamos quedado a las 7). Pagamos y nos despedimos, de camino al aeropuerto había bastantes coches y motos, pero pudimos ir tirando sin llegar a quedarnos parados en ningún atasco.
El trayecto en taxi desde el centro de Hanoi hasta la terminal 2 del aeropuerto nos llevó casi tres cuartos de hora (unos 40 min). Nada más llegar, hicimos el check in y ya que estábamos en el mostrador facturamos las mochilas. Acto seguido pasamos el control de seguridad, que en realidad son tres: uno donde te escanean la tarjeta de embarque, un control de pasaportes y el de seguridad, donde incluso te hacen descalzarte lleves el calzado que lleves.
Íbamos con mucho tiempo de margen, como es habitual en mí, así que estuvimos dando vueltas por el aeropuerto para acabar de gastar los dongs que nos quedaban. El embarque era a las 10 y fue puntual, despegamos sobre las 10:40 rumbo a Hong Kong. De nuevo muy bien con Vietnam Airlines, lo único es que la comida no tiene opción vegetariana, pero bueno, siempre puedes comerte la guarnición y dejar el resto.
Y aquí finalizaba nuestra rutilla por el norte de Vietnam en invierno, dejándonos con ganas de más. La tierra de los dragones no nos había defraudado y habrá que volver en el futuro para visitar el centro y el sur de este interesante país
.Conclusiones
Vietnam es un destino del sudeste asiático muy frecuentado y bastante habitual para los turistas occidentales, al igual que la cercana Tailandia. Se trata de un lugar bastante completo en cuanto a cultura y naturaleza y tiene una historia muy interesante. Encontraréis aquí templos, ruinas, monumentos, formaciones kársticas espectaculares, remotas zonas de montaña con variedad de etnias, zonas de naturaleza muy hermosas, y tengo entendido que también bonitas playas en la zona centro y sur (aunque nosotros en este viaje no fuimos). Cuenta también con una gastronomía muy interesante, que varía también a lo largo del país y que muestra influencias de las cocinas china y francesa traduciéndose en una mezcla deliciosa. Además, al igual que Tailandia, es un país enfocado al turismo y bien preparado para ser recorrido por vuestra cuenta sin demasiada complicación (excepto quizá las zonas más remotas, aunque últimamente se está potenciando el acceso).
Este enfoque al turismo permite la opción de viajar con todo organizado ya desde casa antes de volar, o bien ir reservando e improvisando sobre la marcha, lo que da más margen de libertad para cambiar el itinerario en función de la climatología que se vaya encontrando uno (punto a tener en cuenta, ya que al ser un país tan alargado conviven múltiples climas y puede haber diferencias importantes según la época entre diferentes zonas). En general encontraréis muchísima oferta de alojamiento de todo tipo y los precios son muy económicos, tanto para los hoteles y guest houses como para la comida. Los transportes destinados al turista son quizá algo más caros, pero siguen siendo muy baratos teniendo en cuenta el servicio que ofrecen.
A modo de resumen os dejo un pequeño listado de lo que ha sido para mí lo mejor del norte de Vietnam (siempre teniendo en cuenta que de momento tan solo conocemos esta zona):
1) La zona de Tam Coc y Ninh Binh: en un entorno tan rural y tranquilo, pese a estar enfocado al turismo encontramos sitios que todavía conservan su autenticidad. Las formaciones kársticas, los ríos y lagos, templos y pagodas, los caminitos serpenteando entre arrozales y todo el entorno en general me parecieron espectaculares, imagino que en parte porque al ser invierno apenas encontramos gente (excepto en Mua Cave). Esta zona me sorprendió muy positivamente y me alegré de haber decidido dedicarle dos días y medio al lugar. A destacar: el itinerario en barca por Trang An, espectacular.
2) La Bahía de Halong: qué puedo decir, su fama es totalmente justificada. Una de las maravillas del mundo natural sin lugar a dudas. Había leído comentarios bastante negativos acerca de la masificación y la suciedad de la bahía, pero personalmente no me dio esa impresión: ni encontramos gente ni lo vimos muy sucio, quizá porque viajamos en invierno y desde Cat Ba, con lo cual solo llegamos a las zonas más alejadas y menos frecuentadas de Halong (centrándonos principalmente en la bahía de Lan Ha, más pequeña y menos visitada). Sí que recomendaría ir en otra época para disfrutarla plenamente y poder bañarse y hacer snorkel, la parte positiva es que disfrutamos de un tour de dos días y una noche prácticamente en privado a precio de grupo.
3) Hanoi: también había leído bastantes opiniones negativas acerca de Hanoi, del caos de motos que la envuelve, la posible inseguridad por "tirones" a turistas desde las motos, que es una ciudad fea y poco interesante... No fue mi caso, a nosotros nos gustó. A ver: no pasaría una semana entera en Hanoi (y en cambio sí que lo veo factible por ejemplo en Bangkok), pero me pareció un lugar interesante y estupendo para dedicarle un par de días. A mí el entorno y la vidilla diaria alrededor del lago Hoan Kiem me encantó, y tiene algunos sitios que debido a su historia considero imprescindibles para hacerse una idea del bagaje de la ciudad y del país, como el complejo de Ho Chi Minh y el Templo de la Literatura. El barrio antiguo con sus callejuelas y la zona del lago del oeste y la pagoda Tran Quoc también me gustaron, y además se puede recorrer fácilmente a pie.
4) La comida y los cafés vietnamitas: si os gusta la comida asiática, Vietnam ofrece una gastronomía muy interesante y que vale la pena degustar. Los conocidos nems, el bun cha, el omnipresente pho bo... Mención especial para el delicioso café vietnamita, que nos encantó. Recomendable probar el egg coffee y el café con leche o helado de coco, que le da un sabor delicioso.
5) Los alojamientos: en general encontramos una elevada relación calidad/precio en todos los alojamientos que reservamos. Incluso en el sitio más económico las prestaciones obtenidas fueron muy buenas. Las habitaciones eran amplias, limpias y totalmente equipadas, aunque nunca optamos por ningún tipo de lujo. A destacar la buena predisposición y lo serviciales que son los empleados o propietarios de este tipo de establecimiento, en todos lados nos atendieron estupendamente y nos proporcionaron gran cantidad de información incluso sin llegar a solicitarla. Facilidad también para gestionar todo tipo de transportes y excursiones desde los hoteles, quedamos muy contentos.
6) El precio: un viaje a Vietnam puede salir realmente económico si se eligen alojamientos sencillos o de término medio y se come en restaurantes locales. Lo único que puede encarecer el viaje es el vuelo internacional, que en temporada alta puede subir bastante. Pero viajando fuera de temporada alta o pillando alguna oferta con tiempo (o combinando Vietnam con alguna otra ciudad asiática donde resulte más económico volar) el total puede salir a muy buen precio.
7) Extra bonus: las motos locas. Sin duda la moto es el medio de transporte más utilizado en Vietnam. Para mí fue una pasada de divertido observar lo que pueden llegar a transportar mediante una bicicleta con motor. En el top number 1, aunque sin foto: un hombre que llevaba un cargamento de cajas de cartón repletas de huevos, que sobresalían por todos lados de la moto (y distribuidas en varios pisos). Número 2: uno que circulaba por la autopista (sí, sí, por la autopista de Hanoi al aeropuerto) con jarrones varios de cerámica enormes atados a la moto. Eso es confianza y lo demás son tonterías, ¡sí señor!
Y ahora la otra cara de la moneda, lo que menos nos ha gustado (por decirlo de alguna manera, ya que el viaje fue prácticamente de diez). Podría llamarlo, factores a tener en cuenta:
1) El precio de los vuelos en Navidad: esto es un clásico ya en las conclusiones de mis viajes navideños. En fechas navideñas hay mucha demanda y oferta de vuelos limitada, así que la cosa se pone fea. Sin embargo, mirando con tiempo y buscando alternativas como entrar desde alguna ciudad asiática donde volar desde España sea más barato, se pueden encontrar buenas tarifas.
2) Es un destino lejano: el viaje hasta Hong Kong fueron unas 15 horas totales incluyendo la escala en Munich, y luego perdimos otra mañana en llegar hasta Hanoi (lo mismo para regresar a Hong Kong). Por tanto, si disponemos de solo dos semanas de vacaciones, como fue nuestro caso, nos quedan unos 12 días efectivos entre los dos destinos destino. Personalmente lo encuentro un tiempo algo escaso para un desplazamiento de tantas horas, me gusta amortizar más los vuelos largos y dedicar más días al sitio, pero como siempre digo, en esas fechas no podemos rascar más. Consecuencia: pese a centrarnos tan solo en el norte de Vietnam se nos quedó corto, muy corto, aunque mejor eso que nada y creo que nuestro itinerario fue equilibrado y sin pretender abarcar demasiado.
3) El tiempo y las temperaturas: éramos conscientes de ir en invierno y de que en el norte de Vietnam las temperaturas pueden llegar a ser bajas, por eso descartamos Sapa directamente. Pero la verdad es que, en el resto de sitios, pensábamos que tendríamos temperaturas más suaves, entre 15 y 22 grados como indicaba la previsión antes de volar. Sin embargo, no fue así: pillamos un frente frío del monzón de invierno y llegamos a estar a 9-10 grados. Además, no vimos el sol hasta la última tarde en Hanoi. Pese a ir mentalmente preparada, nunca se pierde la ilusión de disfrutar de algún rato soleado para poder hacer buenas fotos, pero no tuvimos suerte. Por este motivo las fotos desmerecen bastante y no hacen justicia a la realidad. De poder elegir fechas, recomendaría ir en Octubre-Noviembre o en Marzo-Abril, por lo menos a lo que es el norte. Si no es posible, no descartéis viajar en navidades, se abriga uno un poco y ya está (no es frío insoportable y lo único que impide hacer es bañarse). Si no sois aficionados a la fotografía, entonces este punto no es tan importante, tampoco. También os digo que prefiero este fresquete a morirme de calor abrasador y humedad sofocante.
La parte positiva: poca gente en la gran mayoría de lugares.
4) El tema de los parkings de moto en los principales sitios turísticos de la zona de Ninh Binh: sobre todo en la Mua Cave, donde prácticamente nos obligaron de malos modos a utilizar un parking de pago, me pareció que este tema causa una impresión muy negativa sobre el visitante. Da la sensación de ser un impuesto revolucionario que toca pagar sí o sí por ser guiri. Sinceramente, preferiría pagar algo más y que ya estuviera incluido en la entrada, así no se quedaría uno con la desagradable impresión de que le toman el pelo tontamente
.5) El exceso de construcciones en parajes naturales privilegiados: una pena, pero el afán de potenciar el turismo de lujo está fomentando que se destruyan zonas de gran belleza como la costa de Cat Ba, por ejemplo. La construcción del mega-resort a pie de playa en Cat Co es un claro ejemplo. Parece ser que las leyes urbanísticas no regulan este tema, por el momento, y quizá cuando se den cuenta de todo lo negativo que implica ya sea demasiado tarde. En este caso, al igual que en otros muchos lugares a lo largo de la historia, los intereses económicos prevalecen sobre el sentido común y la protección del medio ambiente. Me gustaría que apostasen un poco más por el conservacionismo, la verdad.
¿Qué cambiaría de nuestro itinerario a posteriori? De contar con más días, posiblemente añadiría algún día más en Tam Coc para visitar el parque nacional de Cuc Phuong, como inicialmente teníamos previsto. También dedicaríamos un par de días a Mai Chau, una zona menos conocida pero que dicen que tiene mucho encanto, muy rural y donde pueden conocerse algunas de las minorías étnicas del país. En el resto de sitios los días fueron apropiados, aunque puede dedicarse un día adicional en Cat Ba para conocer el parque nacional y hacer alguna de las excursiones básicas.
De haber ido en otra época y contar con más días también hubiésemos incluido Sapa y la zona del norte más hacia el este, que incluye el parque nacional de Ba Be y la meseta de Dong Van, entre otros lugares.
Quedan pendientes para un futuro dos posibles viajes con la intención de acabar de conocer el país:
- un viaje de unas dos semanas por el centro y sur de Vietnam.
- un viaje al sur de Vietnam combinado con Angkor Wat, centrado principalmente en el delta del Mekong y entrando mediante navegación por el río a la vecina Camboya para acabar visitando el templo de templos, Angkor. En este caso posiblemente tendríamos que renunciar al centro del país, aunque también sería una pena (si le dedicásemos unas tres semanas podríamos incluir todo: centro, sur y visita a Angkor Wat por el Mekong).
Y poco más puedo decir, espero que este diario resulte útil a los futuros viajeros y consiga transmitir un poquito lo mucho que disfrutamos en el norte de Vietnam, la tierra donde los dragones campan a sus anchas
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