DÍA 6 - XEL-HÁ
Fuimos pronto al parque. Lo pasamos muy bien. El parque dispone de varias a actividades. Por un lado, hay una zona acuática con tirolinas varias. También hay un recorrido en bicicleta por una zona selvática en la que puedes ver monos y algún otro animal. Dispone de una laguna para poder hacer snorkel durante horas sin darte cuenta. Y hay unos acuarios con delfines para hacerse fotos… Los precios como los parques temáticos de aquí, tipo port aventura, más o menos. Me pareció caro para ser México.
Casi al cierre nos volvimos al hotel, que queda muy cerca del parque y decidimos devolver ya el coche y no abusar de la cortesía.
Hoy para cenar teníamos reserva en el japonés. Como la noche anterior tuvimos muchísimos problemas con los cochecitos, fuimos antes y así tomábamos algo en el Cobá. Nos volvimos al Club del Akumal. Estaba a reventar de gente. El Akumal también, no tanto, pero ese día se notaba que habían llegado huéspedes y que debían estar a tope de capacidad. Había colas en las barras de los bares, y eso que era hora de cenas, que debería estar la cosa repartida. Al final, volvemos a tener problemas con los cochecitos y cuando llegamos ya había empezado el show, así que dejamos el japonés para el día siguiente. En mi opinión, restaurante completamente prescindible. El espectáculo está bien, pero la comida no es nada especial. Nos fuimos al tortuga y a cenar mexicano otra vez, que no se diga!
Después de la cena, a pasarlo bien en la Hacienda, que es la zona en la que están los bares y se hacen los espectáculos nocturnos. Por suerte el Akumal está al lado y no necesitas coger trenecito para volver a la habitación.