Día 3 (31 de diciembre) Estrasburgo y fin de año en Colmar ✏️ Travel Journeys of France

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Y llegó el día de nochevieja.
Este día fuimos a Estrasburgo, ya que pensamos que el día 1 estaría casi todo cerrado y no luciría tanto.
Desayunamos en Colmar y pusimos rumbo al parking de la petit France. Estuvimos casi 7 horas y no llegó a los 7€. Es de los más baratos que hay en el centro.


Aparcamos, atravesamos el puente y sin dar lugar a buscar donde se encontraba, nos topamos de frente con "Un noel en Alsace", una tienda llena de adornos de navidad, de todo tipo y colores. Es una maravilla, hay otras tiendas donde puedes comprar adornos del estilo más baratos, pero merece la pena perder un rato dentro, es increíble la cantidad que tienen y los bonitos que son.




De aquí comenzamos a pasear, llegamos a la catedral, entramos a visitarla (era gratuita) y acabamos en la plaza Kléber, con un árbol de navidad gigante.




Estuvimos andurreando para aquí y para allá un rato, y cuando miramos el reloj ya eran las 2, como todo cierra tan pronto y por el miedo a no encontrar nada, habíamos reservado online en el restaurante Mamama. Es un sitio con cocina modernilla, todo muy rico y sin fliparse con los precios, pero nos quedamos con las ganas de probar un choucroute en condiciones. El plato era una variante mar y montaña, y aunque estaba rico, cupimos a una salchicha cada uno. Pedimos un revuelto con setas, calabaza y algo que aunque con distinto nombre, resultó ser la misma pasta del primer día. No comimos mal y con los postres fueron unos 40€, bastante bien pero menos mal que nos habíamos comido un buen choucroute en Alemania años atrás, porque estas modernuras cuando viajas no te dejan probar la cocina tradicional.


Tras esto volvimos a la Petit Venice porque había leído que había un mercadillo post navidad, pero lo habían quitado ya. Quedaba una zona con juegos infantiles y poco más, así que ya que lo habíamos recorrido todo, decidimos volver a hacer de nuevo el mismo camino, aprovechando que estaba anocheciendo y que se encenderían las luces. Estrasburgo es bonito porque ya de por sí es una ciudad bonita en cualquier época del año, pero sí que es cierto que se pierde el encanto de los pueblos pequeños donde absolutamente cada esquina está decorada, pero cuando cayó la noche, ganó muchísimo. Había calles con una iluminación preciosa, miraras donde miraras era sorprendente y daba gusto pasear. Buscando un supermercado volvimos a la plaza Kléber, y de pronto comenzó en el árbol gigante que habíamos visto antes de comer, un espectáculo de luces y canciones de navidad, estuvo muy chulo y lo pillamos casi por casualidad!! Si no recuerdo mal, por si se suele repetir a la misma hora otros años, eran las 17:00.




Tras esto emprendimos el camino hacia Colmar, donde cenaríamos esa noche.
Esta fue una de las dudas del viaje: dónde cenar en nochevieja. La impresión que me daba era que los restaurantes de la zona no querían turistas. Mandaba mails a los restaurantes y ni contestaban, como no sé francés, ni me planteé llamar, pero en muchas webs apuntaban que solo cogían reservas por vía telefónica. De los restaurantes a los que contactamos, muchos no contestaban, otros directamente cerraban esa noche, otros tenían menú de más de 100€ el cubierto (bebidas aparte), y otros la cena era a las 7, horario poco español, y que además nos suponía volver muy pronto de Estrasburgo.
Había leído en varios sitios hablar del restaurante La Romántica. Aquí si contestaron y me cogieron la reserva a las 21:45 sin ningún problema. A priori no me gustaba la idea de cenar en un italiano estando en Francia, pero era lo más factible dadas las opciones. Es cierto que había un poco de todo: comida Italiana y Francesa. Para no aburrir demasiado, profundizaré un poco en esto en la última etapa para quien esté interesad@ en conocer opciones.

Así que a lo que vamos, nos duchamos, nos pusimos guapos, cogimos nuestras uvas de la suerte y nos fuimos al restaurante. Al llegar había una cola enorme en la puerta, no entendíamos nada, aún con reserva había que esperar la cola?. Había más españoles allí que teníamos reserva y entramos a preguntar. Resulta que nuestra mesa estaba reservada, nos podíamos sentar, la cola de fuera eran persona esperando por si alguna reserva no se presentaba y se podían sentar!!! Así que si pasáis esta noche en Alsacia es totalmente imprescindible tener una reserva. Muchos de ellos después de 2 horas de espera tuvieron que pedir la comida para llevar, y algunos terminaron comiéndose unas pizzas en un par de mesas altas que colocaron en la calle.
Nosotros pedimos una tabla de embutidos, un Cordonbleu y una pizza. Estaba todo muy rico, había muy buen ambiente, muchos españoles y el restaurante está en un sitio precioso (Frente a la típica casa decorada que aparecen en toda la publicidad de Colmar). A las 23:45 nos salimos buscando donde comernos las uvas, y justo a la derecha había una placita con un reloj donde había muchas personas reunidas para hacer la cuenta atrás. Nosotros pusimos la tele en el móvil para ver las campanadas pero fue muy gracioso, porque la tele por internet siempre lleva algo de retraso, y después de terminar la cuenta atrás en la plaza, celebrar y felicitarnos el año nuevo, comenzaron las campanadas en el móvil, pero eh, que cumplimos con nuestra tradición y nos comimos las 12 uvas!! cumplimos como señores!!!! (Espero que este año no nos cuente doble).
Otras de mis preguntas era ¿Hacen algo en la calle en Colmar en Nochevieja? ¿Algún espectaculo, música, fuegos artificiales? Pues aparte de la reunión en la plaza para la cuenta atrás (que apuesto que la inmensa mayoría eran turistas), poca cosa. Si ser nada organizado la gente tira petardos y fuegos artificiales por su cuenta, los ves aparecer por encima de los edificios, poco más y la efusividad del nuevo año dura poco, no son muy fiesteros por esta zona.
Nosotross tras esto buscábamos algo para tomar algo y nos fuimos al pub del primer día. Es muy pequeñito pero la gente estaba fuera tomando cerveza y copas, y allí nos apuntamos. No he comentado que la media de temperatura de ese día y del día siguiente eran 17, 18 grados de día, hacía calor, y esa noche tampoco era desagradable estar en la calle, así que allí nos quedamos a tomarnos un par de copas y hablar con algunos Españoles, la verdad que se estaba agradable, y nosotros que tampoco buscábamos ningún fiestón con cotillón, nos sirvió.
Tras esto nos fuimos a dormir, que al día siguiente teníamos tres visitas por hacer!!

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