A continuación os dejo un diario de nuestro reciente viaje a Grecia.
CRONICA VIAJE A GRECIA CONTINENTAL, MYKONOS Y SANTORINI
Fechas: 20 de junio al 1 de julio de 2.007
En estas líneas procuraré plasmar algunos pequeños detalles que creo serán de utilidad a la gente que vaya próximamente a Grecia. Autor:DiegozmartinezFecha creación:⭐ Puntos: 4.6 (5 Votos)
CRONICA VIAJE A GRECIA CONTINENTAL, MYKONOS Y SANTORINI
Fechas: 20 de junio al 1 de julio de 2.007
En estas líneas procuraré plasmar algunos pequeños detalles que creo serán de utilidad a la gente que vaya próximamente a Grecia.
Lo primero de todo, con mi carnet de estudiante de la UNED de este curso 2006/2007 he entrado sin pagar un euro a todos los sitios. Te preguntan tu nacionalidad y si eres de la UE no pagas nada. A los americanos les hacían pagar la mitad. Casi me he ahorrado 50 euros en entradas y además si quería volver a entrar a un sitio al día siguiente, pues nada, otra vez enseñaba el carnet y para dentro. Ya la decía a mi mujer que nos estaba saliendo cara en entraditas.(jejejeje. es lo que tiene ser estudiante).
No había pasado tanto calor en mi vida. Nos bebíamos una media de 6 botellas de 1,5 litros al día, sin exagerar nada. A las 7 de la mañana hacía un calor que te morías, y nosotros que somos del norte. Estabas sudando todo el día. Se caían las moscas.
Bueno en cuanto a Atenas, creo que con dos días tiene más que de sobra, aunque sé que hay gente que discrepará de esto. Salvo la Acrópolis y el museo arqueológico, y con el calor que hace no apetecía hacer mucho. La Acrópolis y el ágora y demás cosas pueden llevar una mañana tranquilamente, incluyendo el templo de Zeus. Llevad agua porque os podéis tostar al sol.
Bueno antes de nada, el metro del aeropuerto al centro, son 5 euros por trayecto y es muy fácil llegar a él con seguir las indicaciones de "train". Hay un tren suburbano y un metro que salen desde el mismo andén. NO tiene pérdida y es muy fácil. En 40 minutos os plantais en Syntagma. Nosotros hicimos un cambio de línea y a las 11.30 de la noche estábamos en el hotel, que estaba situado justo encima de la boca de metro de Metaxourgio (Hotel Stanley, que por cierto bastante correcto, sobre todo el desayuno. Llo de los recepcionistas es un tema aparte).
Aunque os parezca que no hay revisores en el metro, que eso fue lo que nos pasó a nosotros que comprábamos billetes de metro de vez en cuando, os puedo asegurar que los hay. En nuestra vuelta a Atenas desde Santorini para pasar la última noche estuvimos a punto de no comprar billete desde el aeropuerto a Atenas, y menos mal que no lo hicimos porque aparecieron los revisores y a unos alemanes que no habían validado les cogieron y se bajaron los revisores con ellos en la primera parada que pudieron. Supongo que la multa no se la quitaría nadie.
Ese mismo primer día de la Acrópolis miramos el tema de los coches para alquilar en la calle Syngrou Avenue que está justo enfrente del templo de Zeus. Miramos unos cuantos y al final cogimos un ford Ka por 55 euros sin límite de kilometraje para hacer el día 22 de junio Corinto, Micenas, Nauplio y Epidauro. Esa tarde subimos andando al monte Licabetto (por no buscar el famoso funicular). No muy recomendable para aquellos que no gocen de buena salud física, porque a 38 grados a las 5 de la tarde por aquellos senderos era pa morirse. Mi mujer casi me mata.
El día 21 de junio hicimos el museo arqueológico nacional en un par de horas por la mañana y a la 12 nos fuimos a coger el bus para ir al cabo Sunión, autobús que sale desde al lado del museo, apenas a 200 metros, desde una plaza donde hay muchos autobuses. Eso sí, un consejo, aseguraos bien de donde sale el autobús al Cabo Sunion porque nosotros después de estar por allí esperando casi 20 minutos volvimos a preguntar y nos dijeron otro sitio y perdimos el de las 12.30 y tuvimos que coger el de las 13.30, otra hora esperando a lo tonto. El autobús sale de debajo de unos árboles que hay en la parte derecha de la plaza según se mira de frente. Pero preguntad bien. Lo del cabo Sunión muy bonito. Estuvimos unas dos horas, porque el templo se ve en media hora y después bajamos a la playa que hay al lado del hotel. Se puede bajar por un caminito que hay al lado de la carretera, pasando entre la maleza se llega a la playa. Primer bañito en el Egeo. Muy reconfortante teniendo en cuenta el calor que hacía. Y hacía las 6 nos volvimos para Atenas. El trayecto se hace un poco pesado, pero bueno, no más de hora y media.
Tercer día en Atenas. A las ocho de la mañana nos plantamos en la empresa de alquiler de coches, le recogemos y salimos para Corinto. Bastante fácil encontrar la salida porque estaba cerca de nuestro hotel y sin problema llegamos a Corinto (85 Km 1 hora). Hay que coger la salida de LOUTRAKI para poder ver el canal de Corinto. Nos fuimos detrás de un autobús de turistada llegando a la salida de la autopista de Loutraki y así llegamos hasta el canal sin problema (de todas formas era bastante fácil). Diez minutos para hacer una fotos y camino del Antiguo Corinto. Cruzamos el pueblo de Corinto y tuvimos que preguntar a una chica por donde se iba porque era imposible sin una sola indicación. La chica de la moto nos sacó de Corinto y nos dejó enfilados en dirección al yacimiento. Otro yacimiento bastante mal conservado. En menos de una hora visto y camino de Mycenas.
Hay dos opciones para llegar: o coger la autopista unos kilómetros y luego desviarte o hacerlo todo por carretera general sin nada de tráfico y bastante amplia. Nosotros elegimos esta última. En poco más de 45 minutos estabamos en Micenas, con un calor para morirse. El yacimiento como los anteriores, está bastante mal conservado, salvo partes de la muralla y la famosa puerta de los leones y el círculo A. De ahí salimos para Nauplio. Precioso pueblo que merece mucho una parada larga de tres horitas. No os perdais la fortaleza de Palamidi. Se puede subir en coche desde Nauplio, en 5 minutos en coche. La visita es una pasada y os podéis tirar allí las horas que queráis porque es enorme.
De Nauplio nos fuimos a Epidauro. Carretera bastante mala y estrecha. Allí estuvimos hasta las siete de la tarde. El teatro es impresionante.. Lo único que merece la pena es el teatro en sí, que es alucinante. Estaban ensayando una obra de teatro del festival que se celebra en verano, pero claro como habíamos pagado nuestra entrada (mi mujer, yo no porque como soy estudiante jejejeje.), pues no me iba a quedar con las ganas de situarme en el centro del escenario y hacer mis pinitos como tenor. Así que allí me planté y probé la acústica. Es una maravilla como se oía aquello. Después el efecto dominó fue inevitable y aparecieron Pavarottis por todos lados. De Epidauro de vuelta a Atenas, un par de horitas porque la carretera de Epidauro a Corinto son muchas curvas y puertos, aunque carretera bastante amplia. Nos pasamos la entrada a Atenas y tuvimos que continuar hasta la salida 11 de la autopista que iba a Kiffisia (barrio de Atenas) y cruzar todo Atenas de extremo a extremo, pero bueno una hora más de coche y nada más. La excursión perfecta y en un día es posible hacerlo sin grandes agobios.
Siguiente día (23 de junio) teníamos el vuelo a Mykonos a las 19.30. Era domingo y fuimos a ver el cambio de guardía que es a las 10.45. NO A LAS 11.00. A las 11.00 es cuando acaba así que ojito con la hora. Mucha gente para verlo con un calor que te morías. Vaya jatos estaban hechos los evzones. Aparte del cambio de guardia no había nada para hacer así que nos fuimos a una zona muy recomendable que aconsejo de verdad. Os cogéis el metro hasta el Pireo (20 minutos) y de allí andáis en dirección sur bordeando los muelles hacia una zona superchula que se llama ZEA MARINA. Es una especie de puerto deportivo pequeño muy bonito y coqueto. (en la guía Lonely Planet viene un plano de El Pireo y aparecen tanto ZEA MARINA como MIKROLIMANO). De ZEA MARINA, se coge un trolebús allí mismo que pasa por la costa y os lleva hasta MIKROLIMANO, que es otro pequeño puerto deportivo muy chulo con unos restaurantes y cafeterías al lado del mar muy alucinantes. (entre una zona y otra habrá unos 20 minutitos andando). Desde allí está al lado el metro de FALIRO, es sólo cruzar un túnel, y estáis de nuevo en Atenas.
Nos sorprendió negativamente el que en una ciudad que recibe tantos turistas, como es Atenas, los sábados por la tarde y los domingos no haya abiertos más que los restaurantes de la zona de Plaka y Monastiraki y casi todos los chiringuitos de souvenirs de esas zonas. En cualquier ciudad europea los sabados y domingos son como otro día de la semana.
Total, que a las 5 nos fuimos para el aeropuerto y nuestro vuelo salió un poco tarde, a eso de las 20.00 y en media horita ya estabamos en Mykonos. Llegamos al aeropuerto y miramos un coche para alquilarle para un día. Por 30 euros nos dieron un Atos blanco. Nuestro hotel estaba a apenas 3 km. del aeropuerto, pero de noche, sin conocer la isla y preguntando a todo el mundo al final dimos con el hotel tras perder casi media hora en el intento, y eso que lo teníamos al lado pero con todos los que hay pues ya ves. El hotel era el "K hotels" ( en realidad eran cuatro hoteles en uno). Muy bonita la habitación tipo bungalow, con una piscina amplia y restaurante majo. El desayuno incluía el yogur griego (una delicatessen para los amantes de los derivados lácteos).
Al día siguiente coche y a ver la isla. La primera playa superparadise a las 9.00 de la mañana. No había nadie. Tras ver la playa de Superparadise, más turística que otra cosa, pensada para los americanos/as, italiano/as de menos de veinte años que van allí a hacer lo que puedan, pero no para tomar el sol relajadamente. No es que a mi me guste tomar mucho el sol, porque prefiero bañarme o alquilar algún tipo de cacharro para hacer cosas en el agua, pero a mi mujer sí y tenía que respetar eso de algo de sol. De ahí fuimos a Eliá, [editado moderación]. Total que apareció el hamaquero de turno y tocó el regatear el precio de la hamaca porque las hemos encontrado de todos los precios, desde 4 euros hasta 7. En esta playa estaban la más caras., 14 euros dos hamacas. Le dije al muchacho que sólo ibamos a estar un par de horitas y que le daba 6 euros. Coló y me pegué mi segundo baño en el Egeo (el primero fue en el cabo Sunión).
Bueno pues después de estar por allí un rato tiramos para otra playa, Panormos creo que fue, pequeña y bonita. No me acuerdo ahora de memoria de todas las playas pero vimos 9 en un día. Cuando alguna no nos gustaba, pues nada, a buscar otra, porque nunca había más de 4 km. entre una y otra. De la que me acuerdo muy bien es de la de Agios Iannis y Kepari (o algo así). Están en la zona sur, cerca de Mykonos Town. Se llega fácil y la última, la de Kepari está al final de un camino. Menuda puesta de sol vimos allí [editado moderación]. Había muy poca gente en la playa porque es pequeña y hay que bajar por las rocas (no es muy complicado), pero mereció la pena el paseíto.
No he mencionado que el primer día que llegamos a Mykonos dejamos el coche en el hotel y nos bajamos al pueblo, que estaba a diez minutillos andando. Llegamos al pueblo y claro de noche todos los gatos son pardos, así que nos adentramos por esas callejuelas laberínticas. Dice la historia que esta arquitectura tenía su sentido, y era el facilitar la huída de sus habitantes en caso de ataque por parte de los piratas. Bueno resumiendo que cuando nos cansamos de dar vueltas y quisimos volver al punto de partida aquello se convirtió en misión imposible. Era tal el laberinto de calles y sin ninguna referencia que habíamos tomado, que tras media hora dando vueltas sin saber por donde salir, decidimos ir a la “plaza de los taxis” y cogimos uno hasta el hotel.
Es gracioso ver la cola de gente en medio de la plaza esperando taxi [editado moderación]. Bueno, al final fueron solo 3,5 euros. Mereció la pena pagarlos, pero menudo cabreo me cogí por no poder encontrar la salida.
El segundo día en Mykonos bajamos al muelle que está en la zona de los restaurantes turísticos, en pleno centro, y nos fuimos a la isla sagrada de Delos. Coste del trayecto 12,50 por persona ida y vuelta (aquí no sirve el carnet de estudiante). Cogimos el ferry de las 9, pese a que la recepcionista del hotel nos decía que no había ninguno hasta las 10. Este de las 9 era el primero. Llegamos a la isla y la visita la hicimos por nuestra cuenta con una guía de arqueología de Grecia que llevé al viaje. Bastante difícil encontrar las cosas y con el calor que hacía, pese a soplar un poco el viento, pues eso que mejor llevarlo estudiado .
El primer barco de vuelta para Mykonos desde Delos es a las 12:30, el siguiente a las 13.30 y el último a las 15.00 A mi entender con un par de horas es suficiente porque entre el calor que hace y que no hay sombra más que en el minimuseo que tienen allí montado pues se hace un poco largo. El estado de conservación es bastante malo salvo por algunos mosaicos y alguno de los leones que están casi enteros, pero desde luego, aunque sólo sea por la historia que entraña esa isla la visita es obligada. Nosotros cogimos el primer ferry y a la una de la tarde estábamos en Mykonos.
Ese día nos quedamos por el muelle y entramos a comer algo en uno de los restaurantes de por allí. Algo ligerito: dos bocadillos de bacon, queso y tomate y ensalada griega y botella agua 23 euros (precio oficial), pero la chica se equivocó al traernos la cuenta y sólo nos cobró un bocadillo. Nosotros, evidentemente, no dijimos ni mu, así que la comida en pleno muelle turístico nos salió por 6 euros (incluyendo 20 céntimos de propina). En cuanto a los precios en Mykonos son bastante elevados, pero siempre hay gyros de pollo, cerdo o cordero (para nosotros kebabs) por dos euros que están muy buenos. El precio de una ensalada griega suele variar desde los 4 euros que la comimos en Atenas hasta los 9 que cuesta de media, en Mykonos. Más adelante os hablaré de algún restaurante en Santorini que realmente merece la pena. Bueno pues eso que ese día por la tarde como ya no teníamos coche cogimos un bus para la playa de Paradise. Es divertido eso de ir en el bus todo lleno de críos de 18 años. Los buses suelen salir cada hora y el trayecto dura unos 20 minutos. Pasamos la tarde allí tomando el sol, bañándonos y viendo el espectáculo de la gente bailando en las tarimas y bañándose en la piscina. Por la noche, pues más o menos lo de siempre, paseo por el pueblo, cenita y otra vez al hotel.
Al día siguiente dedicamos la mañana a ver la parte que ellos llaman la pequeña Venecia por su gran parecido con esta ciudad. Es una serie de casas que salen en todas las postales y que están construidas sobre el mismo agua. Es la zona más fotogénica de Mykonos, con unas terracitas muy chulas y unos restaurantes de lo más turísticos. Dice la historia que estas casas fueron compradas por los acaudalados capitanes de la isla que hicieron sus fortunas con el contrabando y manteniendo estrechas relaciones con los piratas de la época y que su proximidad al mar no era una cuestión estética sino más bien práctica, pues en caso de situación de peligro la salida al mar era inmediata. Bueno teorías para gustos. De ahí, subimos a los molinos de viento, que hoy en día no están en servicio, pero que en su día sí lo hicieron. Salen unas fotos muy bonitas. Y a eso de las 14.00 nos fuimos a coger el barco para Santorini.
El barco era el Flyingcat 4, uno de los catamaranes rápidos de Hellenic Seaways. Teníamos el billete cogido por internet desde España (28 euros trayecto por persona). Pasamos por la agencia de Hellenic que tienen allí al lado del muelle, nos dieron los billetes y al barco. Había una cola de gente de muerte y con el calor que hacía, era insoportable. El problema es que salen casi a la misma hora otro jetboat y el flyingcat 4, y allí había más gente que en la guerra, parecía aquello un campamento de refugiados, todos con las maletas, mochilas, etc.
El barco llegó puntual, y el trayecto, parando en Paros y en Ios, duró unas tres horas. A las 6 de la tarde ya estabamos atracando en el muello de Athinio, en Santorini (este pequeñísimo muelle está a unos 4 km de Fira, la capital). Allí cogimos un bus de línea, y por 1,70 euros nos llevó hasta Fira. La isla de Santorini tiene una elevación de unos 127 metros .
Un comentario merece el trayecto desde el puerto de Athinio hasta Fira porque la subida de ese minipuerto con unos desniveles que ya los quisiera el Tourmalet (famoso puerto que se sube en el Tour de Francia). Menuda subidita. En quince minutos estabamos en Fira. Buscamos el Hotel, era el Melina, muy cerca de la estación de autobuses. Teníamos ese hotel para la primera noche y para las otras dos el Golden Star. Dió la casualidad que estaban apenas a 300 metros uno de otro. Bueno, pues dejamos las maletas en el hotelito y nos fuimos a alquilar el coche. Otro hyundai atos. Le metí la bola al tío de que en Mykonos me habían cobrado 25 euros por un día, el hombre se lo pensó como diciendo, éste me está engañando, y al final accedió. El coche estaba lleno de mierda y con algún toque, pero bueno para hacerle 60 km., de sobra. Fuimos andando a ver el pueblo de Fira y la puesta de sol. Llegamos con el tiempo justo para ver lo que nos depararía los siguientes dias y probamos nuestro primer buen restaurante en Fira. Totalmente recomendable, incluso el dueño del hotel Melina nos lo dijo ,DYONISSOS. Fácil de encontrar pues está en pleno centro en una de las calles más concurridas. No tiene pérdida. Pedimos queso feta al grill, calamares estilo Dyonissos y un pescado baked con patatas, verdura y cebolla. Estaba todo buenísimo y no pagamos 30 euros por los dos. Excelente relación calidad precio.
Al día siguiente por la mañanita, a las 8 llevamos las maletas hasta el otro hotel, el Golden Star, y salimos para la playa. Otro día de visitas de playas. La primera, en la zona de Akrotiri. EL SITIO ARQUEOLOGICO ESTÁ CERRADO., así que una pena para todos los amantes de la arqueología. Para mí que eso no lo vuelven a abrir. Les sale más caro pagar a un turista muerto que cobrar diez años de entradas. La playa roja está allí al lado. La verdad es que no llegamos a bajar porque el caminito no es que ofreciera muchas posibilidades y para jugarnos la vida ya lo hacíamos en las carreteras todos los días. NO queríamos andar haciendo el cabra por las rocas, así que tiramos por la Vylchada. Menuda mar había en esa playa. NO lo había así ni en el Cantábrico en un mal día. Bueno, pues ahí estuvimos media horita, un par de fotos y para otro lado.
Tras la visita de la playa de Vylchada continuamos hacia otras playas en dirección norte. No me acuerdo ahora de memoria de los nombres, pero en general no vimos tantas como en Mykonos. La señalización en las carreteras de Santorini es bastante peor que la de Mykonos, así que de vez en cuando tocaba dar la vuelta y preguntar. Lo bueno que tiene es que puedes cometer cualquier tipo de infracción al código de circulación porque allí debía haber cuatro policías para toda la isla y como el tráfico no es que sea excesivo pues en cualquier sitio se puede girar, dar marcha atrás y otra serie de irregularidades.
La última visita de la mañana fue la playa de Kamari, guijarros negros que ardían. Cogimos dos hamacas y sombrilla por 6 euros (estaban de oferta jejejeje) y estuvimos allí desde la una hasta las 4 de la tarde. Comimos en un chiringuito de playa de los que hay a patadas. Kamari es la zona más explotada turísticamente de la isla, es por eso que casi todos los hoteles que ofrecen las mayoristas están en esa zona. Está a 10 km de Fira. Buenos pues comimos por allí, tomamos el sol, nos bañamos y a las 4 nos fuimos tranquilamente hacia Oia/Ia (se dice de las dos formas). Vimos el pueblo, que es realmente bonito, con callecitas estrechas, muy estilo Fira y nos quedamos hasta las 8. No pudimos ver la puesta de sol completa porque al tener que devolver el coche antes de las 8.30 pues no daba tiempo a volver. Fue un error coger el coche por la noche del día anterior. Deberíamos haberlo dejado hasta por la mañana y así haber estado en Oia esa noche, pero bueno, ya no tenía remedio, y eso que pasé a pedirle al de la empresa de alquiler el coche el favor de devolvérsele por la mañana, pero me dijo que no tenía más coches disponibles. Me tomé la revancha y se le dejé con menos gasolina. Total, ni se molestó en mirar el depósito, ni si le habíamos dado algún toque al coche. Vaya personaje.
Esa noche probamos el otro gran restaurante de Fira. Nombre NICOLAS, situado a apenas 100 metros del Dyonissos. Totalmente recomendable. Es inconfundible porque siempre tiene cola, bien dentro, o fuera. El hombre te explica en cualquier idioma que no hay carta, todo está escrito en una pizarra al fondo del restaurante. Es un local pequeño, con ocho mesas, apenas caben 30 personas a la vez. Pero te explica que es cocina tradicional griega, y vaya si lo es. Menudos calabacines rellenos, deliciosa musaka y unos calamares de muerte, y agua. Total 28 euros. Relación calidad precio excelente.
El último día en Santorini habíamos cogido la excursión del volcán. Nos costó 25 euros en el barco de madera Odysseas. Habíamos quedado a las 10.45 para empezarla así que como teníamos tiempo antes, nos fuimos a bajar las famosas 600 escaleras del puerto viejo de Fira. Menudo desafío. Nos llevó más de media hora bajarlas porque lo que nos imaginábamos eran unos escalones como los de España, con un peldaño estrecho, pero el problema es que el peldaño tiene más de un metro de longitud, con lo que se recorre una distancia enorme en cada uno. Y para colmo el camino estaba sembrado de minas de burro/mula, porque aquello más que humildes burros a lo español son mulas de bastantes más kilos. Bueno que vamos las escaleras llenas de mierda y cada dos por tres espantando a los animales que subían cargados de turistas que arribaban de los cruceros fondeados en la bahía.
Mi mujer casi me mata por hacerla bajar por ahí. Bueno, una vez llegamos abajo, dimos una minivuelta porque es un sitio muy pequeño y cogimos el funicular de vuelta hacia arriba. El cable car o funicular tiene 6 cabinas en las que caben 6 persona en cada una. El viaje hasta arriba no dura más de 1 minuto. Se pasa en un periquete y cuesta la friolera de 4 euros por trayecto. Turistada máxima.
Tras la experiencia fuimos hacia el punto de encuentro de la excursión. Todo puntual, guía en español. Bueno lo de guía debería entrecomillarse porque la moza lo único que hacía era desde el puente del barco leer en varios idiomas unos apuntes que tenía escritos a mano en unas hojas, de camino entre isla e isla. No se molestó ni en subir al volcán a explicarnos algo allá arriba. Bueno, pues a las 11.15 estábamos todos subidos en el barco. A reventar de gente. Cogimos unos sitios a la sombra porque al sol te morías.
En 30 minutos llegamos a la isla de Nea Kameni, la del volcán, situado justo enfrente de Santorini, apenas a una milla náutica. Te desembarcan en un mini puerto. Y allí mismo han improvisado una taquilla consistente en dos muchachos con sendas máquinas registradoras protegidos del sol con una sombrilla cada uno cobrándote 2 euros por subir al volcán. Estos griegos saben más que los italianos. Pues ya que estábamos allí, decidimos subir.
El paseo de subida dura unos 20-25 minutos por un camino de lava volcánica, no muy difícil, pero no tan cómodo como para ir en chanclas aunque me fijé y había gente que las calzaba. Llegamos arriba. No espereis encontrar un volcan erupción, con lava saliendo por el cráter. Nada de eso, alguna pequeñísima fumarola escondida y poco más. Con las mismas, y tras hacerunas fotos espectaculares de Santorini desde lo alto, otra vez para abajo. En total te dan 75 minutos para subir y bajar (tiempo de sobra). De allí nos llevaron a unas aguas sulfurosas, que sinceramente me decepcionaron mucho.
Nosotros habíamos estado en Bodrum, Turquía en una excursión donde te bañabas en barro que sí que olía a azufre y te rebozabas de verdad, pero aquí no había barro por ningún sitio. Es una especie de cala pequeña, cerrada, donde el barco ancla y te tiras desde la borda al agua para alcanzar la cala. Aquello parecía un auténtico naufragio con la gente saltando al agua uno detrás de otro. Bueno, pues tras un breve baño de 20 minutos enfilamos hacia Thirassia, otra de las islas situadas enfrente de Santorini, donde hay varios restaurantes a pie de playa (lo de playa es un decir, porque son varios guijarros juntos). Allí comimos en el último chiringuito de los 6 o 7 que hay seguidos. Casi todos funcionan a base de pìnchos morunos de pescado o de carne. Muy rico. El hombre que estaba al cargo hablaba algo de español y al decirle que éramos del norte nos dijo que había navegado por el cantábrico y que era un mar muy peligroso, que le daba mucho miedo. Muy majo el señorín.
Tras la comida,(un par de horas de tiempo) y pegarme otra baño en el Egeo, nos embarcaron de vuelta para Fira, parando antes en Oia y luego en el puerto viejo de Fira y en Athinio (el puerto donde llegan los ferries rápidos y grandes).
En total, la excursión al volcán acaba hacia las 6 de la tarde. Después de esto, fuimos la hotel nos duchamos, cambiamos y nos dispusimos a disfrutar de nuestra última puesta de sol en Fira. Esta vez elegimos con bastante precisión un buen sitio, aunque al final, creo que todos son buenos porque todas las terrazas tienes vistas espectaculares. Sobre la puesta de sol, bueno, pues que decir, no hay palabras. Desde las 8 hasta las 8.45 sentados mirando al sol, como otros cientos de personas en cientos de terrazas.
Después nos fuimos a cenar a otro sitio, que no me acuerdo del nombre, pero normalito, así que no merece la pena reseñarlo y prontito a la cama, que al día siguiente teníamos vuelo con Aegean a las 7.25 hacia Atenas.
Al día siguiente habíamos hablado con la recepcionista del hotel para que nos pidiera un taxi a las 6 de la mañana. Y el hombre, puntual como un reloj allí estaba esperándonos. Metimos las maletas y en diez/quince minutos estabamos en el aeropuerto. Desde Fira al aeropuerto hay unos 5 km. El taxi nos cobró 12 euros. La recepcionista del hotel nos había dicho que serían unos 15 euros. Mejor.
Había dos vuelos, uno de Aegean y otro de Olympic con una diferencia de 15 minutos de diferencia.
Imaginad el numerito de la sala de embarque pequeñita y con casi 300 personas esperando. Para colmo ambos vuelos se retrasaron y el nuestro que debería salir más tarde que el de Olympic, pues salió antes. Menuda suerte. Bueno a las 9 de la mañana ya estábamos con las maletas en el metro camino de Atenas. Llegamos al mismo hotel de los primeros cuatro días en Atenas, el Stanley, dejamos las maletas y nos dirigimos al Pireo porque queríamos hacer una excursión en ferry a Egina, una de las islas del golfo Sarónico.
Cogimos un ferry que salía a las 12.30 (7 euros por persona y trayecto). No os preocupéis hay ferry casi media hora y los precios son parecidos. Sólo son más caros los hidrofoils. El trayecto en ferry dura 75 minutos y en hidrofoil 35. Llegamos a Egina y con el hambre que teníamos nos fuimos a comer directamente al “Babis”, recomendado en la Lonely Planet. Es fácil localizarle. Está pegado a la playa, literalmente y tal como dice la guía los camareros se juegan la vida atravesando la carretera para traer los platos de comida. La calidad de los alimentos, en la línea de lo que habíamos comido, correcto y el precio pues en la media. Ensalada griega, pulpo y calamares unos 27 euros.
Después nos comimos un heladito y como eran casi las 15.30 de la tarde intentamos alquilar un coche para un par de horitas y acercarnos a ver el templo de Afea. Preguntamos en un par de sitios, uno no tenía coches disponibles y el otro nos pedía 13 euros con gasolina. Intenté sacarlo por diez, el hombre no cedió y al final, pues decidimos que íbamos a andar un poco justo de tiempo para hacerlo así que desistimos del intento. Para otra vez será. En cuanto a Egina, lo que hay por todas partes son pistachos a 5 euros el medio kilo. La gente compraba bastante y los japoneses se los llevaban por kilos.
La zona del puerto de Egina es preciosa. Hay cientos de pequeñas embarcaciones en las que los pescadores salen diariamente a faenar, pero por el tamaño supongo que no puedan alejarse más de un par de millas de la costa. El sitio arqueológico, que según la Lonely Planet tiene bastante pocos restos cierra a las 15.00 horas así que atentos. Nosotros llegamos a las 16.00 y no nos dejaron entrar. Desde fuera se ve la única columna del templo que allí se erigía. Tras pasar apenas 5 horas en la isla cogimos el primer ferry que había de vuelta y nos volvimos para el Pireo, donde llegamos sobre las 19.00 de la tarde. De vuelta los ferries los hay cada media hora más o menos y hasta las 21.00 horas creo que era el último. En el puerto de Egina hay 5 o 6 casetas, una por cada compañía, con los horarios y tarifas.
Las tarifas entre los 7 y los 8 euros lo ferries y 11 euros los hidrofoils. Miradlos al llegar para no tener sorpresas a la vuelta. Ya en el Pireo, cogimos el metro y nos fuimos de nuevo al centro a hacer las compras de última hora. Otra vez todo cerrado porque era sábado tarde, salvo cuatro tiendas de souvenirs. Hacia las 9 de la noche estabamos en el hotel pasando nuestra última noche en Atenas.
Al día siguiente, metro al aeropuerto de nuevo, con el pequeño inconveniente de que no había metro desde Syntagma al aeropuerto directamente no se por qué motivo y menos mal que lo dijeron por la megafonía del metro. Tuvimos que bajarnos en la última parada Plaketias o algo así y allí esperar al metro que iba al aeropuerto que tardó 15 minutos. En realidad tampoco fue ningún contratiempo, sino una simple anécdota.
Creo que con esto está más o menos expuesta nuestra experiencia. Si recuerdo alguna cosa os la iré soltando sobre la marcha. Si tenéis alguna duda os la intentaré solventar. NO dudéis en preguntar. Se trata de que futuros visitantes de Grecia se beneficien de la experiencia de los que ya han estado, al igual que yo hice en su momento.
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Llevo tiempo leyendo vuestras entradas y por fin me he puesto a colgar mi ruta.
Después de mucho mirar en varios lugares y en especial en este, ya tengo más o menos planificada la ruta por Grecia, en concreto por la isla de Creta, el Peloponeso y como no Atenas.
Pudiendo realizar algunas variaciones, ya que queda mucho tiempo y supongo que seguiré leyendo mucho. Realizaremos la ruta del 18 al 31 de agosto.
Día 18: llegaremos a las 8,55 horas, desde Málaga en avión a Heraklion, Creta. Aquí será coger coche y empezamos la ruta. Nos diriguiremos a La Canea , donde nos alojaremos 2... Leer más ...
Hola Iccici hoy un amigo me ha mandado un wassap con una noticia que me ha encantado y creo que a ti también te va a gustar.Al parecer han aprobado una ley para poner cuota de musica local en hoteles y espacios publicos con el fin de proteger este patrimonio.No lo he podido escuchar muy bien porque a la vez,mi amigo que es muy entusiasta estaba gritando "ostras la Carmen se va a salir con la suya,la van a nombrar ministra de cultura" mi amigo esta un poco loco pero la noticia me parece estupenda.Recuerdo que hace 5-6 años estuve en Karpathos,la cual yo creia una isla muy... Leer más ...
Qué estrés y ca uno es ca uno. Es lo que a bote pronto se me ocurre. Ten en cuenta que Grecia no es Japón donde el reloj se acopla a los horarios de los trenes y no al revés. Quiero decir que son, no puntuales sino exactos.
A lo que voy es que yo separaría Creta del resto, fíjate que te dejas la pare oriental. La garganta de Samaria hacer un trozo de abajo no se si tiene mucho sentido.
Yo reservaría hotel el primer día y el último y el resto poco a poco. Es lo que he hecho yo cuando he ido. Pero si lo haces y tienes problemas no me eches la culpa, ja ja ja. Es lo que yo haría. La... Leer más ...
Últimos comentarios al diario GRECIA CONTINENTAL, MYKONOS Y SANTORINI
universo18 17/12/2008 03:18
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