TAILANDIA con un bebé (2015) ✏️ Blogs de Tailandia

Nuestra mayor duda a la hora de preparar el viaje era decidir si alojarnos en Ao Nang o en Railay. Finalmente optamos por la primera opción, por aquello de que al ir con un bebé si hace mal tiempo en Railay te puedes quedar colgado, pues dependes del Longtail para salir de la peninsula. De vuelta, sentimos que la decisión fue erronea, pues el ambiente en Ao Nang es demasiado giri y agobiante. Por contra, en Railay todo es más tranquilo, con paisajes idilicos, suficientes servicios, y encima con una de las mejores playas de todo el viaje, la de Phra Nang. Además, para cruzar a Ao Nang siempre hay Longtails disponibles que en menos de 10 minutos hacen el trayecto.

- Vuelos Internacionales:

Contratamos los vuelos internacionales con Etihad Airways, con entrada y salida por Bangkok y haciendo en ambos casos escala en Abu Dabi, casi a mitad de camino entre Madrid y Bangkok. Los compramos a finales de febrero, aprovechando una oferta de la compañía, y el precio fue de 496 € el billete de ida y vuelta para los adultos, y de 78 € para la niña que al ser menor de 2 años únicamente paga tasas.

La experiencia con la compañía fue positiva aunque algo desigual según los trayectos. En líneas generales poca diferencia encontramos entre esta compañía y otras más conocidas como Lufthansa, Air France o la propia Thai Airlines. Eso sí, permite reservar los asientos con antelación de forma gratuita. En el caso de viajar con bebes, te ofrecen la cuna de viaje para menores de un año, y si hay disponibilidad, como sucedió en nuestro caso, siempre te colocan en los asientos de cabecera facilitándote uno de forma gratuita para él bebe.

- Alojamiento

Nuestra prioridad en este aspecto era buscar hoteles bien situados y en todo caso con piscina, pues a mi hija le encanta, y además, siempre se agradece un baño después de pasar el día fuera del hotel haciendo turismo, más con el calor que hace en Tailandia, sobre todo en Bangkok. Al viajar con la niña reservamos todos los alojamientos con antelación a través de Booking con la opción de cancelación gratuita, incluso teníamos varias opciones de alojamiento alternativas reservadas que posteriormente fuimos cancelando.

[align=justify]- Transporte:

- Vuelos internos: Para los desplazamientos internos elegimos el avión. Las ofertas de vuelos son muy numerosas, y cogiéndolos con antelaciones salen muy económicos. Hicimos los trayectos de Bangkok-Chiang Mai (690 Bahts por persona) y Krabi-Bangkok (750 Bahts por persona), con Thai Lion Air, compañía de low cost que ya conocíamos de nuestro viaje por Indonesia, y que cuenta con unos precios buenísimos y aviones muy modernos y cuidados. El vuelo de Chiang Mai a Krabi (2050 Bahts por persona) lo hicimos con Air Asia, que aunque más cara y con peor servicio, era la única que hace ese trayecto sin hacer escala previa en Bangkok, con la pérdida de tiempo que supone.

- Tren: Aprovechando que nuestro hotel estaba muy cerca de la estación central de trenes de Bangkok (Hua Lamphong), utilizamos este medio de transporte para nuestra excursión de Ayutthaya. El tren en cuestión era bastante lento pero nos resultó muy cómodo. Al ir con la niña optamos por hacerlo en vagón con Aire Acondicionado (245 Bahts i/v). Quienes quieran ahorrar algo de dinero tiene la opción mucho más económica del vagón con ventilador (Unos 20 Bahts i/v)

- Airport Rail Link: Muy cómodo y rápido para ir y venir al aeropuerto internacional de Suvarnabhumi. Mucho más barato que el taxi y sin los problemas añadidos del caos circulatorio y atascos de Bangkok.

- Dinero, cambio y Precios

Optamos por llevar euros desde España e ir cambiando allí, aunque también sacamos dinero con la tarjeta en algunas ocasiones. Al final sale más a cuenta la opción de cambiar allí dinero, pues con las comisiones del banco por sacar dinero en cajero y cambio de divisa, el resultado final es mucho peor. Además, todos los cajeros tailandeses cobran un mínimo de 180 Baths por cada extracción.

- Comida:

Nos encanta la comida asiática así que hemos disfrutado mucho de la gran oferta culinaria que ofrece Tailandia. Nos hubiera gustado probar más la comida callejera, buena y barata, pero al ir con un bebe procuramos siempre comer y cenar en restaurantes donde poder sentarnos y elegir entre algo más de variedad para nuestra hija. Mención especial se merecen los Mango Shake, creo que es la única bebida no alcohólica que conozco a la que tal vez podría acabar peligrosamente enganchado. Eso si, como balance final, y teniendo en cuenta que siempre se puede comer más barato que lo hicimos nosotros, la comida no nos pareció tan económica, al igual que el país, como teníamos entendido, pues es difícil comer o cenar por menos de 5 € por persona, bebida aparte. Nada nos sentó mal durante el viaje.

- Perfil y experiencias previas fuera de Europa:

Pareja de 38 y 36 años, ahora con nuestra hija de 17 meses a la que nos empeñamos en inocular el virus viajero que llevamos dentro. Túnez (2006); Turquía (2007); Norte de la India (2008); Jordania (2008); Myanmar (2009); Vietnam y Camboya (2010); Singapur, Sulawesi y Bali (2011); México (2012); Nepal y Sur de la India (2013); Marruecos (2013); Japón (2014)