Escribo este diario 8 años después para plasmar los recuerdos de un viaje a un país muy interesante y que en aquel entonces era baratísimo el día a día. Me animo ahora por ser varias las veces que me preguntan por él y que no se pierdan mis recuerdos. Si pongo algún precio, intentaré compararlos con los de 2024. En 2016 1 € equivalía a 4,30 zlt, cambio que se parece bastante al de 2024. Estuvimos barajando alquilar un coche, pero como al final solo ibamos a visitar algunas de las principales ciudades de Polonía, decimos hacerlos en tren. Nos hubiera gustado visitar Gdansk, pero nos complicaba la logistica y tuvimos que quedarnos con las ganas. No solo sería esta la visita que no hariamos, como diré más adelante.
Aterrizamos a principios de agosto en el aeropuerto de Varsovía, al salir de la terminal a la derecha estaba el mostrador para sacar el billetes de ModlinBus. No hubo problemas para coger el siguiente bus que llegó. Mientras en la calle había 22ºC, dentro del autobús estaríamos a unos 18 grados
. Aparte del frío, la velocidad con la que nos llevo el conductor a Varsovia debío ser unos 100km/h. Sobre las 21h estabamos a la altura del Palacio de Cultura y la Ciencia, fueron 35' sin tráfico ninguno. La conexión WiFi tuvimos que ir renovandola cada 15', pero fue gratis. Nos costó en el 2016: 33plz adulto y 23plz niño. En 2024, la empresa que dan el servicio es CONTBUS.
Tanto el grandioso rascacielos del palacio como la amplitud de la avenida Marszatkowska, te hacía volver a sentir que estaba es un país de la era sovietica. Más teniendo en cuenta que Varsovia fue arrasada por los alemanes en la II Guerrra Mundial, todo está reconstruido durante la época de la ocupación rusa, al estilo sovietico.
Tras caminar 30 minutos estabamos en el hotel Novotel Warszawa Centrum donde nos dieron una habitación de las altas, con vistas a todos los edificios modernos de la zona. Buscamos un sitio rápido para cenar y encontramos el restaurante Sphinx. Cerraban a las 23h, la comida fue un menú infantil de nugets, una ensalada César y un shawarma. Todo acompañado con dos cervezas de medio litro. Pagamos 110 zlt. Todo muy rico pero sin ser comida polaca. A las 23h salimos para descansar en el hotel.
De camino al centro, desaynamos en un Costa Coffee, un clon la más famosa franquicia americana de cafés. El café estaba bueno al igual que las magdalenas grandes. Los precios de 2016 fueron: Expresó 6.90 plz, croissant 5.90 plz, zumo de naranja 14.90plz, magdalenas 7.90plz. Es ideal para desayunar.
Después nos fuimos a visitar la ciudad antígua de Varsovia, el barrio más antiguo. Realmente al estar todo reconstruido, el adjetivo sería mejor cambiarlo por histórica. Este barrio que quedó en ruinas a consecuencia del Alzamiento de Varsovia en 1944 durante la ocupación nazi. En el centro paseamos viendo los puestos de la Plaza del Mercado del centro histórico de Varsovia.
Sobre las 13:30 nos sentamos a comer en una de las terrazas de la plaza.
Después de comer, seguimos visitando la parte más histórica de Varsovia. Acercandonos hasta el Castillo Real.
Luego recorrimos la Ruta Real, un antiguo camino que utilizaban los reyes para ir del Castillo Real a los impresionantes palacios de verano en el parque Łazienki Królewskie. El niño se lo pasó en grande viendo como corrían las ardillas.
Nos adentramos en el parque hasta ver el exterior del Palacio Łazienki.
A las 11:30 salía nuestro tren con destino Poznan. En la estación todo muy bien indicado, incluso antes de subirte al tren sabes en que zona para tu vagón. Deberían aprender otros países.
Nuestros asientos estaban en un compartimento de 6 plazas, con espacio para dejar las maletas sobre tu asiento.
Sobre las 14:30 estabamos en Poznan, comimos enfrente de la estación en un North Fish, una cadena de pescado nórdico 75ztl, unos 17€ de 2016.
Al salir hacia el hotel Novotel Poznan Centrum, que estaba a 15 minutos andando, diluviaba. Así que cogimos un taxi hasta el hotel. Durante el trayecto el taxista nos estuvo preguntando de donde eramos y al final terminamos hablando de futbol. Tenía toda la pinta de ser un ultra del Lech Poznań, como presumía de sus tatuajes.
Sobre las 18h estabamos por Stary Rynek, la plaza principal de Poznan. Además de ser el punto turístico más famoso de la ciudad, era también el más bonito.
Además de las casas de la plaza, destaca el Antiguo Ayuntamiento de Poznan.
Estuvo chispeando durante la tarde y cuando nos sentamos sobre las 20:30 en la terraza del Rynek 95 Restaurant, en la plaza mayor para cenar, se puso a llover más. Disfrutamos de la comida y cerveza polaca. Había comida variada: polaca, italiana y americana. La típica sopa zurek (9plz), en Poznan era con salchicha, patata y huevo duro. Estaba muy caliente y sabía a salchicha. Demasiada cantidad para uno sólo. Otra especialidad de Poznan es pyra z gzikien (13plz), patata cocida con queso muy rica. Los tagliatelle (24plz) muy ricos y una pizza de salami (24plz ) extraordinaria. Al final fue mucha comida porque el plato de pasta era muy grande, por solo 6€. Con 2 cervezas de medio litro y una botella de agua pagamos 97plz. Sitio recomendable, los mas curioso fue cenar en agosto con mantas y estufas en la calle. Los camareros muy amables hablan muy bien inglés y te explican con paciencia los diferentes platos. Al niño le trajeron un dibujo para colorear y un tarro lleno de lápices de colores.