Después de 3 deseados días de descanso salimos al mediodia de nuevo hacia Ao Nang donde ibamos a pasar nuestra última noche en Thailandia. Compramos los últimos souvenirs, disfrutamos de la última cena, es increible el montón de restaurantes que hay y la buena pinta que tienen todos, como no, nos comimos el último pancake (un tipo de crepe) y a descansar de nuevo en el Hotel J.
A primera hora de la mañana del día siguiente en busca del bus que habiamos contratado para el traslado al aeropuerto de Krabi y a las 12h nos poníamos rumbo a Singapur.
Eran las 15h cuando llegabamos a Singapur y como queríamos exprimir al máximo nuestro viaje nos habíamos buscado el próximo vuelo a las 09h del día siguiente, así que buscamos donde dejar las mochilas y a por el metro para que nos llevara a disfrutar unas horas más de la ciudad.
Basicamente recorrimos un par de centros comerciales por Orchard Road que no habíamos visitado y a volver a disfrutar de los food court de la zona y comer, comer y comer.
Llegada la noche de vuelta al aeropuerto, facturamos, recorrimos un poco el aeropuerto que es interminable y nos dirigimos a un lugar en el que tienes unas duchas y zona de relax donde descansar un poco y esperar nuestro vuelo.