Si en la anterior entrada hablé de las visitas a los casinos y el Strip durante el día, dedicaré este post al momento en que la ciudad se convierte en el verdadero parque de atracciones para adultos y las luces ciegan tanto a los visitantes que literalmente se pueden ver desde el espacio... todo un despropósito si pensamos que es un lugar situado en medio del desierto de Nevada en donde los recursos son escasos, pero nada es nunca excesivo en Las Vegas.
Cuando cae la noche, los casinos del Strip encienden sus luces y ponen en marcha sus propios espectáculos en una especie de demostración de a ver quien la tiene más grande. No obstante, sigue siendo el encanto de los casinos originales de la calle Fremont el mayor atractivo a mi juicio, edificios que pese a su menor altura y volumen, no están exentos de derroche luminoso como veremos a continuación.
Para poder además disfrutar de toda la explosión luminosa desde un lugar de observación privilegiado, es una buena idea subir a las alturas de la Torre Stratosphere, en donde se puede cenar mientras se contemplan las vistas del Strip.
Espectáculos de los casinos del Strip
Aproximadamente a partir de las siete de la tarde, empiezan consecutivamente los espectáculos callejeros de los hoteles siguiendo el Strip, por lo que grandes congregaciones de turistas se reúnen ante los mastodónticos edificios a contemplar los espectáculos.
Son especialmente recomendables los del Bellagio, en donde las fuentes sobre su lago artificial realizan una danza de agua acompañada de música de aproximadamente un cuarto de hora de duración con diferentes luces de colores.
Otro de los shows más espectaculares, es el del Treasure Island, en el que su volcán entra en erupción lanzando grandes nubes de fuego al aire y apestando todos los alrededores a gasolina con gran estruendo... toda una gran frivolidad.
Otros, durante la noche, simplemente su decoración es si cabe aún más cantona... u hortera, según como se mire. Por ejemplo este es otro de los casinos de estilo medieval, el Excalibur, que aún no había mencionado.
En general todos los casinos se ven más atractivos con sus iluminaciones nocturnas, como la fantasmal apariencia que toma el Caesar's Palace.
Siguiendo la misma dirección del Strip tomada durante la ruta diurna hacia la calle Fremont, llegamos de nuevo al Venetian, iluminado también caída ya la noche.
Continuando por el Strip, llegamos a la parte que de verdad merece más la pena visitar durante la noche, la calle Fremont, con sus antiguos casinos originales iluminados en grandes cascadas de luz animadas, con sus antiguos carteles y la atracción en forma de bóveda luminosa que cubre toda la calle y en la que se proyecta el show en memoria de Freddy Mercury en la llamada Calle Fremont Experience.
La calle Fremont
Como comentaba, si hubiera alguna parte en Las Vegas que pudiera considerarse histórica, esa sería la calle Fremont, en donde se alzan algunos de los casinos antiguos más famosos, como el 4 Queens o el Golden Nugget, y que ha aparecido en multitud de películas.
Es tal la explosión de luz en esta antigua calle que se su apodo es Glitter Gultch (barranco brillante) y en el se encuentran otros famosos carteles de los casinos originales como el del vaquero Vegas Vic, aparecido también en tantas escenas televisivas, sobretodo de anuncios comerciales sobre la fascinación por Las Vegas.
La calle está cubierta por una bóveda también iluminada sobre la que se proyecta un show de Freddy Mercury en lo que se da a llamar experiencia de la calle Fremont. Una vez cada hora, la bóveda se activa en una experiencia sensorial y auditiva en donde el cantante de Queen vuelve a la vida.
De la misma forma que hay un cowboy, está su acompañante brillante chica cowgirl. Todo ello alrededor aderezado de gente tirándose en tirolinas, imitadores de Elvis, strippers, tiendas de souvenirs y bares, claro.
Tras una vuelta y contemplar el show a la sombra del Golden Nugget, el casino más antiguo de Las Vegas, nos dispusimos a ir hasta la Torre Stratosphere, en donde cenaríamos contemplando las luces de Las Vegas.
La torre Stratosphere
La torre es en realidad otro casino hotel de una altura de 350 metros desde la que se puede divisar el Strip en toda su longitud, lo que lo convierte en un gran observatorio nocturno para contemplar la iluminación de Las Vegas con una gran perspectiva.
Tras cenar y disfrutar un poco más de nuestro paseo y vistas, nos recogimos a nuestro hotel a descansar esa última noche, tras la que diríamos adiós a Las Vegas para dirigirnos al día siguiente de vuelta a California... ¿A dónde sería? Podrás comprobarlo en la próxima entrada de Gattotrips... If you are going... to...
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