19 de Diciembre
Después de tres horas de coche, una de metro y dos en el aeropuerto montamos en el avión puntuales!! Y salimos tarde…jjajajajjaja alguien había facturado pero no embarcado y tenían que buscar su maleta, en fin, con un poco de retraso salimos y llegamos a Orly a su hora, no, si cuando quieren, vuelan.
La primera impresión fue espectacular: todo París estaba nevado, llevaba nevando dos días seguidos, nos dijeron, rezamos por no tener tan mala suerte el resto de los días y poder movernos bien.
Y llegó nuestro primer contacto con París, a lo lejos pudimos divisar la Torre Eiffel! Pero como había niebla y mal tiempo la foto ha salido muy mal y no se aprecia la Torre por eso no la cuelgo pero ya me puse nerviosa....estaba en Paris!!!
Nos estaban esperando en el aeropuerto y tardamos hora y media en llegar al hotel, habíamos contratado con TravelPlan y teníamos los traslados incluidos, pero el tráfico en París es un caos y no sé las veces que nos quedamos pillados sin movernos, además el hotel está al norte al lado de Place de Clichy y nosotros veníamos del sur, del aeropuerto de Orly, es un tres estrellas, el Elysée Opera, un pequeño hotel, muy bonito, la habitacíon doble muy aceptable con buena calefacción, lo que era imprescindible con el frío que íbamos a pasar, jejejej, también llevábamos el desayuno incluido, tipo buffet y continental, lo cierto es que desayunamos muy bien y abundante todos los días, lo que nos permitía hacer una comida ligera(bocadillo, crepes, ect) y dejar la comida reposada para la cena que era cuando estábamos realmente cansados, el viaje fue casi tan largo como el trayecto de avión, registarnos, dejar las cosas y salir corriendo fue cuestión de 2 min, estábamos impacientes y eran ya las 6 de la tarde, fieles al itinerario nos fuimos dando un paseo dirección Moulin Rouge que resultó estar muy cerca
Paramos en todos los escaparates de las típicas tiendas en esta calle…jejeje y sin darnos cuenta estábamos en el funicular de Montmartre, discusión: escaleras o funicular, increible pero ganaron las escaleras y muertos de frío y resbalando en los escalones por el hielo que se estaba formando llegamos arriba Vaya Vistas!!!
Sabéis que las fotos de noche no salen muy bien pero el paseo por las calles de Montmartre, la Plaza de Tertre, le Lapin Agil, el Moulin de la Galette…..en fin qué os diré: precioso
Nos ha gustado tanto que hacemos el propósito de volver otro día para ver el barrio de día, siempre que podamos, claro, si el itinerario marcado nos va bien, tenemos medio libre el último día, el 23 por la mañana.
A estas alturas estamos congelados pero decidimos no dejar nuestros planes y cogemos el metro en Pigalle y hacia Trocadero y al salir..allí la tenemos, son las 9 y empieza el espectáculo de luces que, debido al aniversario habían aumentado…20 minutos embobados jejejjeej (y congelados), Trocadero estaba lleno de gente, llenísimo, se oye hablar en todos los idiomas, aunque hay que tener cuidado de no contestar a los vendedores de torrecitas, que pesados los pobres, hay que ir esquivándolos porque si miras, te persiguen y son pesadísimos.
El mercadillo navideño de Trocadero con sus casitas de madera y su ambientación es una preciosidad, aunque todo es relativamente caro y no hay nada original que coger, los puestos de crepes y vin chaud que huelen que alimentan, y el ambiente genial.
y nos acercamos al gigante, hay que decir que ninguna foto ni panorámica de la Torre te prepara para lo grande e impresionante que es según te vas a cercando a ella, estuve todo el tiempo con la boca abierta pero cuando llegamos a sus pies tuvimos nuestra primera decepción ya que a causa del frío, nieve y el hielo sólo tenía abierto un ascensor y la primera planta pero decidimos que había que subir y allí estábamos dando un paseito por la terraza a varios grados bajo cero. No disfruté mucho, por el frío y porque al ser de noche no se ve nada bien los alrededores, decidimos que al día siguiente que empezamos por Trocadero, si el tiempo es mejor subiremos arriba.
Ya está bien por hoy cogemos el metro y bajamos en Plaza de Clichy, entramos en un Argelino y pedimos un grepe oeuf, jambom et fromage y dos cocacolas de medio litro, 17 €, (no está mal), que estaba delicioso y además entramos en calor, de vuelta al hotel que el día ha sido muy largo, estamos en pie desde las 6 de la mañana viajando.
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