Todo empezó en el año 2020, cuando preparé un viaje a Alaska para el mes de agosto, que incluía ‘lo imprescindible’ para mi: osos, glaciares, glaciares de marea, el parque Denali y el Chilkoot Trail, con todo (aviones, hoteles, etc..) reservado y el permiso para el trail.
Llega la pandemia y todo anulado, me devuelven el dinero (con más o menos dificultad), pero Alaska Airways… 'me lo guarda' para que me lo gaste más adelante.
A finales del año pasado Alaska Airways me envía un correo en el que me dicen que a 31 de diciembre de 2021 como máximo he de canjear los puntos o lo que es lo mismo 900$ por otro vuelo, y resulta que para el 2022 se sabe que las fronteras estarán abiertas para el turismo, pero el Chilkoot Trail seguirá cerrado…, no iba a perder ese dinero. Decidí comprar un vuelo Anchorage-Newark para mediados de agosto y más adelante ya vería como lo montaba.
Y teniendo en cuenta que mi mujer siempre había querido ir a Seattle lo monté así.
RECORRIDO
Barcelona – Seattle
Seattle – Vancouver
Vancouver – Bellingham
Bellingham – Ketchikan
Ketchikan – Wrangell
Wrangell – Juneau
Juneau – Anchorage
Anchorage – Newark (New York)
New York – Barcelona
El viaje iba a necesitar mucha agilidad de movimientos y por ello vimos claro que no podíamos ir con maletas ni mochilas, justo lo imprescindible metido en una maleta de cabina, y una pequeña mochila a la espalda, obviamente la idea era no perder tiempo en los aeropuertos facturando y recogiendo equipaje y también que no se perdieran. Algunos transportes incluían en el precio la facturación de maletas, otros no. Pero la razón principal no era el coste (que también) sino la rapidez de movimientos. Al hacer esto ya limité el alcance de las actividades que podríamos hacer, descartado el Chilkoot Trail, todo el material de senderismo se quedaría en casa y los hikes que se pudieran hacer quedarían limitados.
En ningún transporte nos obligaron a facturar las maleta ni las mochilas, ni a pagar nada por ese equipaje
Además según nuestra experiencia previa, todos los hoteles de EEUU, o al menos los del nivel que utilizamos tienen, no servicio de lavandería sino, lavadoras y secadoras a disposición de los clientes, con un pequeño coste claro.
Tenía dudas sobre la temperatura y las posibilidades de lluvia, me llevé dos mudas de toda la ropa, y sólo un recambio de pantalón y un chubasquero. Si luego iba corto de ropa siempre podría comprar algo por allí. A toro pasado, se puede decir que no hacían falta jerseys… frio más bien poco, el chubasquero para la lluvia y el viento, sí que fue muy útil. El sol lo vimos poco, en Seattle i Vancouver sí, pero a partir de Ketchikan, más nubes y lluvia
Lo que si que es necesario es tener datos en el móvil, yo compre una tarjeta
Holafly con datos ilimitados para dos semanas y me fue muy bien, la pega que le veo a esta tarjeta es que datos sí tienes, el Whatsapp, el Google Maps y otros programas de localización funcionan, pero no puedes hacer ni recibir llamadas telefónicas lo cual es una limitación importante.
Marchamos con todos los hoteles, actividades y desplazamientos en los distintos medios de transporte que utilizaríamos: avión, barco y autocar reservados. Por ello también era necesario viajar ligeros de equipaje (como muy pronto pudimos comprobar). Solamente dejamos al aire, sin reserva, las actividades que consideramos opcionales.
29 de julio: Vuelo British Airways Barcelona-Londres-Seattle, empezamos mal, el primer tramo sale con 4 horas de retraso por algún problema con la tripulación y perdemos el enlace en Heathrow. Ciertamente en el aeropuerto de Londres nos proporcionan un hotel en la propia terminal con los vales para la cena y el desayuno del día siguiente. Nos dicen nos pondrán en un vuelo el día siguiente a Los Ángeles y desde allí con Sky West, una filial de American Airlines a Seattle. Presentamos vía WEB la correspondiente reclamación (aún estamos esperando la respuesta, y esto que es British Airways y se supone que son serios)
Al mal tiempo buena cara, cogimos el metro y aprovechamos para dar una vuelta por el centro de Londres que ya hacía tiempo que no estábamos, nos habían recomendado alguna vez un local llamado
Sketch, cerca de Regent St y fuimos a verlo… como mínimo hay que decir que es curioso de ver... pero no nos quedamos: no íbamos vestidos para la ocasión, no era barato precisamente y teníamos la cabeza en otro sitio.
Hoy nos hemos levantado muy temprano y además para nada, volvemos al hotel y ya pensamos en el dia siguiente.