Esta escapada fue totalmente improvisada. Me encontré con un par de días de vacaciones que me tenía que gastar cuanto antes, por trabajo de mi pareja solo podía ser el fin de semana siguiente, al que le uniríamos esos dos días. Nos íbamos de escapada 4 días, pero ¿dónde? Mi idea inicial era irme al norte de Portugal, o por Castilla y León, pero parecía que iba a llover. El destino de este viaje surgió mirando el mapa de la previsión meteorológica. El suroeste de la península parecía ser el único sitio donde no iba a llover. Perfecto, somos muy lusófilos y el Algarve es una zona preciosa que no nos queda demasiado lejos.
Aunque ya habíamos estado, no nos importaba volver, y dedicarnos a recorrer algunos de los senderos de esta región. Así que en dos días busqué senderos y un alojamiento en una zona central para lo que queríamos ver.
Finalmente nos quedamos en un apartamento en Portimão, que era fantástico y nos salió muy bien de precio. Se llama RochaBay Apartment y lo reservamos por Booking.
Para los senderos consulté varias webs:
www.walkingportugal.com
www.viaalgarviana.org/ ...nas-rotas/
www.alalgarveconmigo.com/ ...rutas.html
Este es el diario de nuestra anterior escapada al Algarve, en aquella ocasión solo un fin de semana, y con un tiempo bastante malo:
El sábado por la mañana pusimos rumbo al Algarve. Nuestra primera parada fue Portimão, donde dimos una vuelta por el centro y comimos en el restaurante O Mataporcos. Lugar recomendable, con grandes raciones ajustadas de precio, de clientela mayoritariamente local.
De camino al apartamento pasamos por un supermercado Pingo Doce para comprar algunas provisiones para nuestra estancia. En este viaje descubrí las cervezas "Coruja" de Superbok, con adición tardía de lúpulo, muy aromáticas. Me gustaron tanto que el último día compré para llevar a casa.
En el apartamento nos estaba esperando Ana, la dueña. Fue muy amable, y nos tenía fruta, vino, leche, agua, pan y mantequilla. Al apartamento no le faltaba de nada y estaba muy limpio.
Una vez instalados nos fuimos a pasear por la Praia da Rocha, a escasos 10 minutos andando del apartamento. En verano debe estar muy masificada, es de las playas más largas y urbanas del Algarve. Pero en esa tarde que amenazaba lluvia estaba muy tranquila.
Pasamos por un pequeño túnel a la Praia dos Três Castelos, para mi gusto más bonita que la Praia da Rocha. Llegamos al final de la playa, subimos las escaleras y continuamos el paseo por lo alto de los acantilados hasta llegar a la Praia do Vau. Son múltiples sendas que se entrecruzan y que permiten ir avanzando disfrutando del paisaje rocoso de esta costa algarviana. Pasamos por la Praia do Amado y la Praia dos Careanos, y por muchas cuevas (algares) que ha formado el mar erosionando la roca caliza.
Nos empezó a chispear un poco y bajaron las temperaturas. Así que, tras una parada en el mirador que separa las playas da Rocha y dos Três Castelos nos fuimos al apartamento a disfrutar de esas cervezas especiales que habíamos comprado. También cenamos en el apartamento. En el Portimão cercano a la costa los restaurantes son los típicos adaptados para guiris, y no nos apetecía desplazarnos en coche al centro.