La humanidad se encuentra confrontando una de las crisis más fuertes de los últimos tiempos debido al virus Covid-19, el cual broto en la ciudad de Wuhan, China; y se propago a varios países dejando al mundo parcialmente parado.
Todos los rubros se vieron afectados y mucha gente quedo desvinculada de sus labores, sin embargo, es el sector turístico el que se destaca por ser el más golpeado.
La OMT crea el comité Mundial de Crisis de Turismo el cual esta abocado a encontrar soluciones para todos los países y crear recursos que ayuden a mitigar el impacto impositivo de la pandemia.
En esta batalla participamos todos, hoy el personal de blanco esta haciendo frente y dando inclusive la vida en esta lucha contra el enemigo invisible y cuando los números de contagios sean mínimos podremos salir a las calles y viajar de vuelta, pero ojo no significará que la guerra haya terminado, y es ahí donde los funcionarios del sector turísticos tendrán un roll importante para evitar nuevos brotes, lo que significa que en este periodo de cuarentena debemos prepararnos para lo que se viene.
La tarea de los que operan en turismo será la de siempre, vender experiencia y a esto se le sumará el cuidado integral de los consumidores; la responsabilidad de los que ofrecen servicios será aún mayor, debido a que un mínimo descuido puede ocasionar los estragos que estamos viendo hoy en día. No servirá de nada que se implemente toda la tecnología y se diseñen las mejores cámaras de desinfección si es que el personal de atención al cliente no toma las medidas correspondientes o simplemente no esta adiestrado para esto.
En pocas palabras la salud de los viajeros y la nuestra estará en manos de los que prestan servicios en los destinos desde un recepcionista, un cocinero o chef, el personal de check in del aeropuerto, así como los vendedores de comidas en las calles, ya que todos estos oficios o rubros conforman la planta turística.
By V.E.
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