Ojo Guareña puente mayo 2023
Una escapada a esta zona que teníamos hace tiempo pendiente y como el 1 de mayo es festivo y hay finde largo, nos animamos a ir a esta zona de Burgos y recorrer pueblitos cercanos.
Como ha sido una escapada de última hora, había pocos alojamientos libres y hemos elegido el Hostal El Escudo en Cilleruelo de Bezana, es un alojamiento con bar debajo, necesita reforma más que nada porque han pasado los años y aquí esto sigue igual jejejejeje, pero bueno como estaremos lo justito aquí no está tan mal y la cama es cómoda.
Nos levantamos sin prisas, hoy el plan es ir a las Pasarelas de Hocinos, Monasterio de Rioseco y el pueblo de Puentedey.
Para llegar a las pasarelas, desde Cilleruelo están a 20 minutos pasando por Incinillas hasta llegar al Puente del Aire donde hay un merendero donde se puede aparcar.
La ruta de las Pasarelas de Hocinos está en las Merindades de Burgos, Valdenoceda. La ruta es de 7 km ida y vuelta con dos pasarelas por encima del río Ebro. La ruta es la Blanca-Roja GR Río Ebro.
Nosotros llegamos hasta el cruce de caminos que es como una hora y nos hemos dado la vuelta.
Es camino llano entre arboleda y al lado del río con un par de pasarelas, es una ruta amena y bonita que se hace muy fácil.
Ahora vamos al Monasterio de SªMª Rioseco dirección Valle Manzanedo y cuando se llega al cruce de San Martín del Rojo está la pista forestal y se aparca.
El monasterio lo están restaurando poco a poco poniendo tejados y varios miradores, es un entorno precioso y misterioso. Muy recomendable venir a verlo y volver en un tiempo para ver la evolución.
Nos vamos a comer a Puentedey que está a 20 minutos, este pueblo está catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España, a su entrada está la escultura de Ventanas del Mundo de Carlos Armio, desde donde salen unas fotos muy bonitas con el pueblo encuadrado en la escultura, muy original.
Un pueblo curioso con sus casas enclavadas encima del puente natural de piedra. No te olvides de subir al mirador San Andrés para ver una buena panorámica del pueblo.
Comemos en el restaurante La Cucaña, paseamos por el pueblo pasando por debajo del puente de piedra para llegar hasta el mirador.
Nos gusta mucho el pueblo, es muy peculiar y muy recomendable su visita.
Hoy tenemos entradas para ver la Ermita de San Bernabé en Ojo Guareña a la 13:30 y luego la visita a la cueva a las 16:30, no había otros horarios para hacerlo seguido, así que se nos parte un poquito pero iremos primero a hacer la ruta del Ventanón y luego como llevamos nuestro pucherito para calentar comida y unos buenos garbanzos, ya haremos tiempo al salir de la visita de la Ermita hasta la visita de la cueva.
Así que si queréis visitar estas dos cosas, la cueva es muy recomendable, entréis con antelación a su página web oficial para ver los horarios disponibles.
La entrada a la Ermita cuesta 4'50€ y la ruta a la cueva 17€ con dos opciones de ruta, una de 2'5 horas con visita a la Cueva Palomera y la Sima Dolencias y otra de 4 horas (23€) con acceso además a la Sala Cacique y la visita al Museo de Cera.
Mucha gente iba sin reserva con la esperanza de poder hacer la visita y evidentemente se quedaron sin poder entrar. Avisados estáis jejejeje
El coche se deja en el aparcamiento del Alto de la Concha, que está a unos 200 metros de la entrada a la Ermita, es bastante amplio.
Primero vamos a la ruta del Ventanón que hay dos opciones, una ruta circular de 2'5 horas que parte desde Ojo Guareña ó acceder desde el pueblo Villamartín de Sotoscueva y la i/v es 1'20 horas, está marcado con los colores blanco y amarillo.
Nosotros vamos desde el pueblo y miramos la ruta con la app maps y nos pone que tardamos más tiempo que la hora y 20 minutos.... así que nos descuadra el tiempo para llegar con tiempo a la visita de la Ermita, así que nos disponemos a paso rápido a empezar a subir y mientras subimos ya el tiempo nos va cuadrando. Así que las apps hay que dejarlas situarse un tramo jejejeje
Pero aún así seguimos paso rápido, el camino es bastante fácil sin complicaciones, es subida pero se lleva muy bien hasta que llegas a una explanada que te lleva al ventanón.
Bajamos a paso ligerito, como todo es bajada ni tan mal y llegamos a la visita a buena hora.
A la visita de la Ermita se llega un poco antes de tu hora para que te den un casco y te den unas explicaciones, vas con un guía en todo momento y es muy curioso entrar a la ermita con sus cuevas.
Comemos nuestro pucherito de garbanzos en el parking y volvemos a la entrada del ojo Guareña donde nos dan explicaciones de toda la actividad de la cueva.
Vamos andando por una pequeña ruta hasta la entrada de la cueva, y una vez dentro la ruta es muy amena con sus explicaciones, sus salas, y en un momento nos deja a oscuras para disfrutar de las sensaciones de la oscuridad total. Seguimos hasta la sima dolencias que cuando llueve suele tener una cascada de agua pero si llueve mucho no se puede hacer la actividad por posible inundación, recordar que en esta cueva entra el agua y de hecho los niveles inferiores tienen agua y son los que hacen los huecos de la cueva.
Es una experiencia maravillosa y si no os atrevéis mucho para hacer el de 4 horas, podéis hacer como nosotros la de dos horas que es más que suficiente y bien bonita.
Hoy vamos a Tobera y a Frías.
Tobera tiene una ruta de unas cascadas, es una caminata circular de 1 km, conocido también como Paseo del río Molinar. Pasando Tobera hay un parking donde la Ermita de Santa María de la Hoz, que su visita es un imprescindible.
Desde la Ermita ya empieza la ruta que baja junto al río hasta el pueblo Tobera con varios miradores y cascadas, es bastante entretenido el paseo, muy fácil y si vas con niños se lo pasarán en grande.
De aquí nos vamos a frías que al ser festivo se nota que la gente se acerca en el día por esta zona y está todo bastante saturado, el pueblo está muy chulo para pasear y verlo desde fuera para ver sus casas colgadas.
Es la ciudad más pequeña de España con un casco histórico medieval dominado por su Castillo de los Velasco. Desde el Castillo tienes unas vistas privilegiadas del casco histórico con sus casas colgadas, la Torre del Reloj y el campanario de la Iglesia de San Vicente Mártir.
Nosotros queríamos entrar al Castillo pero justo llegamos cuando queda media hora para cerrar, luego lo vuelven a abrir por la tarde pero ya no nos viene bien.
Queremos comer por aquí pero está todo saturado así que picoteamos algo y ya nos volvemos a casa.
Ha sido una escapada muy interesante y para repetir, a veces las zonas que tenemos más cerca las vamos dejando para alguna ocasión y las tenemos en reserva cuando merecen bastante la pena.
FIN