El día entero lo íbamos a dedicar a Bilbao. Hay tantos tópicos sobre esta ciudad que no tenía muy claro lo que me iba a encontrar pues en los foros había leído mucho sobre la transformación y modernización de Bilbao, pero gente con la que hablaba y que no hacía mucho tiempo que había estado por allí me decía lo contrario: que era una ciudad gris, sucia, industrial y muy muy fea. Bueno pues para nada. Está claro que no todo el mundo ha nacido para tener una opinión propia y que sigue pesando mucho en este país lo que oímos a los demás. Cuánto discapacitado artístico hay por el mundo!!!
Para empezar, me pareció una ciudad orgullosa de su ría a la que le han sacado mucho partido turístico. Me recuerda un poco a Zaragoza, que ha vivido siempre de espaldas al Ebro y que con la Expo de 2008 descubrimos el gran potencial de éste, sus riberas y sus parques, y ahora estamos orgullosos de lo bonito que lo han dejado, con esos paseos por las riberas antes impensables, e incluso los intentos de navegarlo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Algo así me dió la impresión en Bilbao. Una ciudad que ha hecho un esfuerzo enorme por modernizarse y quitarse de encima tópicos tan arraigados, que con el Guggenheim, al que ha convertido en símbolo de la ciudad, ha dado un paso de gigante hacia el siglo XXI, despojándose de los elementos grises e industriales para dar paso al modernismo de los edificos nuevos y modernos pero también al esplendor orgulloso de sus edificios de siempre.
Y también me sorprendió la gente!!! Mucha!!! Por todas partes. Es una ciudad que sale muchísimo a la calle.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Que conste que todo esto es mi opinión, eh?? no quisiera ofender a nadie, lo que pasa es que a mí Bilbao me sorprendió muy gratamente. Es una ciudad pequeña, que se visita tan pronto como quieras (odio eso de "se ve enseguida..." porque cada persona le saca el partido que quiere a los sitios). Nosotros pensábamos que no veríamos demasiado pues queríamos visitar el Guggenheim y el Bellas Artes, y así fue. Nos dejamos de ver muchas cosas que habríamos querido ver: la Basílica de Begoña,
la catedral de Santiago o subir al Artxanda, por ejemplo.
A cambio elegimos los museos que nos encantan y que nos dejaron impresiones contrarias que luego os cuento.
Madrugamos demasiado al parecer y nos encontramos el Bellas Artes cerrado todavía. Así que por hacer tiempo nos fuimos al Guggenheim (están a 5 minutos uno de otro) y aprovechamos a que fuera la hora de apertura sacando fotos del imponente exterior. Algunas de ellas:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Y esta foto que me encanta, con el perrito que me enamoró, jajaja:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Los alrededores "grises y sucios" del museo:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Compramos la entrada combinada con el Bellas Artes (13,50) y nos adentramos en otro mundo. He de decir que el interior del museo arquitectónicamente hablando es una pasada, al igual que el exterior y gracias a la audioguía que recomiendo sin dudarlo (con la entrada combinada no está incluida así que pagamos 2,00 euros por ella), nos enteramos de cosas curiosas y de la simbiosis deseada por el arquitecto (Gehry) cuando lo construyó con la ría y con el pueblo de Bilbao, incorporando el puente de la Salve a la construcción del museo:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
No tiene ni una sola línea plana, el exterior está recubierto por placas de titanio que asemejan las escamas de un pez y el vestíbulo central es completamente diáfano, por lo que desde abajo se contemplan los 50 metros de altura con planta en forma de flor (se aprecia mejor desde arriba).
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Respecto a los fondos del museo pues ni fu ni fa. La colección permanente es escasa y personalmente no me dice mucho. Al parecer lo que merece la pena son las exposiciones temporales. Tuvimos suerte y nos encontramos con una de pintura flamenca que era lo mejor del museo en cuanto a contenido. Por que os hagáis una idea, lo digo. Porque a quien no le interese mucho el arte pues con ver el impresionante edificio por fuera, suficiente, y así se puede dedicar tiempo a ver otras cosas que a nosotros no nos dio tiempo. Así y todo tenía algunas cosas curiosas:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tampoco me gustó que el museo está concebido entorno al distribuidor central en todas las plantas, por lo que cuando terminas de visitar una sala, tienes que volver al distribuidor para acceder a otra, así que al final haces un montón de kilómetros y acabas agotado, que es lo que nos pasó a nosotros. Y todo, ya os digo para casi nada, porque en mi opinión, no merece mucho la pena el contenido. Pero ahhh!!!! el continente, qué maravillaaaaa!!!!
Una sala desde arriba que dice algo, porque lo que es desde abajo...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Desde el exterior del museo, vistas preciosas de la ria y del edificio en sí, con la gigantesca araña "Mamá":
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En fin, que agotados como estábamos (y tras recibir nuestra pulserita por si queríamos volver a entrar) nos fuimos a visitar la tienda del museo y a tomar un café para estar sentados un ratito. Compramos un precioso llavero de Puppy y mientras nos recuperábamos decidimos aprovechar para descansar dando un paseo en barco por la ría.
Así que salimos del museo y por la ribera de este lado, nos acercamos al embarcadero que está frente al ayuntamiento. Costaba 10,00 euros más otro de la audioguía.
Sacamos un montón de fotos!! Y disfrutamos de un precioso paseo por la ria. El único fallo que le vimos: que la audioguía es parca en palabras, jeje. Nos quedamos con las ganas de que nos contara más cosas para hacerlo un poco más entretenido pues al final se hacía un poquín pesado.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un pedazo de tigre en lo alto de un edificio (flipa con estos vascos, jajaja)
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En la desembocadura de la ría algunos restos del pasado bilbaíno que muestran orgullosos
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El Guggenheim desde el agua, recuerda la forma de un barco:
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La impronta de Calatrava en Bilbao (personalmente no me gusta nada este tipo, todo lo que hace me parece igual)
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Y otro ejemplo de integración de los antiguos edificios, a éste le han conservado la fachada
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Después del merecido descanso, nos acercamos paseando hacia el casco viejo, sabéis para qué???? Correcto!!! Jajajaja, para ir de pinchos!!!! Por el camino nos encontramos una feria en la calle y se nos fue despertando el apetito (tampoco hace falta mucho) con lo que picamos por allí
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Y así llegamos a la Plaza Nueva, donde comenzamos una ronda de bares de los que habíamos sacado de los foros, qué gran invento esto del foro y qué grandes aportaciones se hacen!!!!
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Primera parada, Café Bilbao (los camareros majísimos y los pinchos también, el local con mucho encanto), después el Victor Montes (precioso lugar y estupenda gente), una visita al Gatz (a por la tortilla de morcilla, exquisita) y por último el Txiriboga (pretendíamos probar las croquetas pero no "tenían", nos mintieron y no fueron muy amables. El único sabor agridulce de Bilbao). Ya se me subía un poco el txacolí así que decidimos dejarlo ahí y dimos un paseo por las callejuelas.
Encontramos la hucha de los txikiteros (aquí echan la calderilla sobrante en sus rondas de vinos y la recaudación se destina a la beneficiencia)
*** Imagen borrada de Tinypic ***
y la baldosa desde la que se ven las torres de la Basílica de Begoña (único lugar de todo el Casco, frente al edificio de la Bolsa, en la confluencia de calle del Perro y Santa María).
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El edificio de la Bolsa (Palacio de John) me encantó. Lo habían restaurado y estaba precioso. Pregunté si podía visitar el edificio y el guarda de la entrada me dijo que sí así que pa´dentro. Tenía carteles informativos de su pasado y me gustó el resultado final con restos de la muralla histórica a buen resguardo. Mirad que bonito
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos sentamos a que nos diera un poquito el aire en la plaza Santiago junto a la iglesia que no pudimos ver y después tomamos un café en el El Boulevard, frente al Teatro Arteaga, de estilo Art Decó. Yo me caía de sueño así que nos fuimos al hotel a descansar un poquín porque por la tarde nos esperaba el Bellas Artes.
El Bellas Artes nos gustó muchísimo. Ni punto de comparación con los fondos del Guggenheim. La colección es impresionante y descubrimos a un pintor vasco que exponía allí temporalmente y del que compramos el catálogo (porque era lo único que nos podíamos permitir que si no, nos llevamos a casa un cuadro seguro!!). Se llama Jesus Mari Lazkano y nos encantó su realismo casi fotográfico. También compramos el catálogo del museo (para una vez que viajábamos en coche y no teníamos que preocuparnos de límite de peso en la maleta....).
A la salida, ya de noche, pasamos un cuarto de hora intentando sacarle a Antonio una foto que le gustara con la estatuta de Tonetti, que le recordaba su infancia, dedicada a los Hermanos Tonetti por lo niños de Bilbao. Os pongo esta de la estatuta sola, que Antonio no quiere salir, jejeje
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Como estábamos por allí nos dirigimos hacia El Globo para probar el tan recomendado gratinado de Txangurro, pero para nuestra desgracia se habían ido de puente y estaba cerrado, según nos dijo un bilbaíno al que le preguntamos (todavía me estoy preguntando si no sería Mogutu