Hoy en el desayuno, volvemos a ver a los chicos españoles y decidimos coger un coche entre los 4 para visitar la isla. Hablamos con la chica del mostrador de excursiones y nos lo alquiló con Avis. Le dices a la hora que lo quieres y por cuanto tiempo. La verdad es que con 2 horas tienes de sobra para visitar la isla, pero nosotros lo habíamos alquilado para cuatro. Cogimos el barco del hotel y nada más llegar, llegó una furgoneta de avis para llevarnos a Vaitape a la oficina a recoger el coche. Nos costó 100 euros las 4 horas, un poco caro pero estamos en polinesia! Recorrimos tranquilamente la isla parando donde queríamos.
Incluso paramos en un sitio donde estaban haciendo pareos, y como no, acabamos pillando, me costó un pareo 1000 francos y también nos regaló un bolsito echo con hojas de palmera y unas conchas.
Pero hacia el final de la tarde como mi marido es imposible tenerle quieto, nos fuimos con los chicos que habíamos conocido hacia la parte posterior del hotel, donde pega al océano. Por un lado hay un caminito que llega hasta allí.
Por un camino se puede pasar al otro motu que está desierto y no hay nada, nada más que palmeras y cocos. Y como a mi marido lo que se le mete entre ceja y ceja, lo tiene que acabar haciendo, se empeñó en abrir un coco y al final lo consiguió,
De postre la trilogía de cream brullé, y el volcán de chocolate.