Dias antes, habíamos apalabrado un coche privado para transportarnos desde Agra hasta Jaipur. Pero antes, madrugamos, y sin más miramientos, nos vamos andando a ver el Taj Mahal.
EL paseo desde el hotel hasta el taj mahal son unos 20 minutos, y ya en la puerta te dejas llevar y acabas entrando sin problemas. EN nuestro caso a las 6:10 de la mañana, sin gente, ni colas, ni nada.
Habíamos comprado 2 entradas (los de 14 años y menores no pagan) a través de la web oficial y accedimos sin problemas con el pdf.
Ya una vez dentro, pues toca lo que toca. Festival de fotos y poco más que comentar. Diría que es más grande de lejos y se reduce cuando te acercas, y que la perfección y simetría te deja sin palabras.
De vuelta al hotel, desayuno, y nos espera el chófer para las dos paradas apalabradas.
La primera parada es el Fatehpur Sikri. Es un sitio increible. La visita es "compleja" pero la explico.
EL chofer te deja en un parking. Pagas las antradas, te suben en coche eléctrico y tiene dos partes. La de pago es una palacio de arquitectura mongol muy bello. La gratuita es aún más impresionante con la puerta a la ciudad más grande del mundo. Una vez arriba, ambas están cerca del parking donde te deja el coche electrico. La visita dura unas dos horas. Luego te bajan en coche eléctrico otra vez y continúas tu viaje. Comentar que es imperativo cubrir bien hombros y piernas para poder acceder al recinto grauito. Aún así, os van a obligar a alquilar trapos y te van a acosar 200 artistas. no son guias, y no cobran. són solo artistas que te quieran acompañar todo el viaje, y hay que decir no de manera educada, pero firme. a veces, demasiado firme.
Tras una parada a comer en un sitio de carretera, luego visitamos el Chand Baori. La típica cisterna India, con tropecientas escaleras. Cada tiene su opinión, pero para mi fui lo mejor que vi en la india. 30-45 minutos de visita es sifuciente.
Luego el chofer nos acercó a ver el templo de los monos de Jaipur. Nos dijo que no dijéramos nada en el hotel, porque sino nos cobran de más por la parada extra, y es mejor darle una propina que decir eso en el hotel.
El templo de los monos en una visita curiosa, con muchos monos.
Al hotel, chaparrón de medio metro de agua. Nos buscaron en tuktuk los del hotel, porque con medio metro de agoa era complicado llegar al hotel andando, en un callejón con ratas y vacas. Pero luego el hotel dentro una pasada.
EL hotel elegido es el Jaipur Haveli. Construido sobre un antiguo palacete, sin ancensor. Muy familiar (la familia vive allí) Es una auténtica pasada. 79€ por dos noches. Cenamos allí, ya que en la zona no había muchos restaurantes para elegir. Comida picante, nuevamente.