Los turistas chinos se han marchado de Alona y nosotros también, vamos en ferry a una isla más pequeña (tamaño Ibiza) que está a unas 2 horas al sur de Bohol. Al acercarnos a la isla lo que primero nos llamó la atención fue el azul turquesa del mar y lo salvaje que parecía, ninguna construcción grande, solo cabañas y un montón de palmeras y plataneras.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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En el muelle, nada más bajarnos, alquilamos una moto para los próximos 3 dias por 870 pesos (17€) después de bastante negociación por supuesto, y nos fuimos directos a buscar alojamiento a la zona de San Juan beach. Después de parar a ver dos o tres sitios encontramos el que sería el mejor alojamiento que hemos tenido en todo el viaje, una casita en el patio trasero de una familia filipina, habitación con baño, cocina con todos los cacharros, una terraza grande y justo enfrente de una playa para nosotros solos y por 16 € la noche (como siempre después de un buen regateo), no nos lo creíamos!! Soltamos las mochilas y nos pegamos un chapuzón, estábamos entusiasmados xD.
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Al día siguiente nos levantamos a las 06:00, como durante todo el viaje, desayunamos en la terraza y nos fuimos a buscar una playa llamada Paliton beach, donde hicimos snorkel y nos relajamos tumbados al sol.
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Después compramos pescado y calamares en el pueblo de San Juan a unos pesacadores que lo vendían en unos puestecitos de bambú y nos pegamos una comilona en la terraza de nuestro alojamiento. Los pescados, los calamares y los huevos nos costaron solo 100 php todo! (2€)
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Por la tarde fuimos a las Cambugahay Falls, unas cascadas muy bonitas donde darse un baño muy agradable y después pasamos el atardecer en nuestra playa con unas cervecitas y viendo una increíble puesta de sol, acompañados solamente por las golondrinas y algunos pescadores que se alejaban en la oscuridad para pescar, más auténtico imposible. Esta isla está superando todas nuestras expectativas, muy poco turismo y muy salvaje, todo el mundo nos saluda y hasta quieren hablar con nosotros, ni que fuéramos famosos jajaja.
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Esta mañana también desayunamos en la terraza y nos fuimos a recorrer el perímetro de la isla, parando de playa en playa, flipando con los paisajes y con la gente superamable, es una pasada poder ver un lugar tan paradisiaco sin que se lo haya comido el turismo y los resorts de lujo.
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La isla tiene unos 100 km de perímetro, el cual se puede recorrer en una mañana sin problemas, además las carreteras están bien asfaltadas y sin apenas coches, un placer para los sentidos.
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Al día siguiente nos levantamos con pena ya que nos hubiera gustado quedarnos más días en Siquijor, pero aun nos quedaban 6 horas hasta que saliera el barco con destino a Dumaguete, así que aprovechamos para ir de nuevo a Paliton Beach, pero esta vez a la playa de al lado que no tiene fácil acceso y que habíamos visto desde el mar cuando hicimos snorkel. Tenemos que decir que es una de las playas más bonita que hemos estado, completamente solos durante más de dos horas (como en casi todas las playas de esta isla) y aprovechando para bañarnos, dar un paseo por su arena sin pisar y sacar algunas fotos.
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También fuimos con la moto hasta el Balete tree, un arbol milenario que se encuentra muy cerquita de la carretera principal al sur de la isla, donde tambien puedes "limpiarte" los pies de una manera muy curiosa
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Ohhh, y terminó nuestra estancia en esta maravillosa isla donde nos encontramos como en casa, nos hubiéramos quedado al menos un par de días más, pero ya teníamos un vuelo para dentro de 4 días, por eso siempre decimos que es mejor dejar el viaje más abierto aún y no coger vuelos con antelación (cogerlos con una semana o menos) o dejar un par de días sin nada que hacer por si queremos alargar nuestra estancia en alguno de los destinos, aún así nos vamos felices porque todavía nos quedaban más aventuras como bucear con tortugas gigantes en Apo Island o con el Tiburón Ballena en Oslob, allá vamos!
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