15-02-2016 Jaisalmer
Nos pusimos a las nueve en ruta, este día teníamos poco más de 300 kilómetros, tanto Bikaner como Jaisalmer son ciudades que están en el desierto de Thar, no es una zona como imaginamos un desierto de arena fina y blanca, son zonas pedregosas con escasa vegetación de una tierra rojiza, de vez en cuando ves grupos de camellos comer hojas de pequeños arbustos y poca cosa más a nivel de paisaje.
En la zona de Phalodi hicimos una breve parada, para ver unas charcas llenas de grullas siberianas de color gris, que hacen el invernaje en esta zona.
Cerca de Jaisalmer hay un campamento militar, ¡¡enorme¡¡, cercado durante kilómetros con una alambrada en otras zonas con una tapia de tres metros de alto, se nota que la frontera de Paquistán está muy cerca, ahora han construido dentro del campamento un museo para honrar a sus muertos e exhibir los tanques y aviones derribados.
La fortaleza de Jaisalmer se ve a mucha distancia, aunque se confunde por su color amarillo con la colina sobre la que esta, su nombre original es “La colina fortificada de Jaisal”. El fuerte tiene una muralla de más de 30 metros de altura y tiene cerca de 99 torreones, hay cuatro puertas de acceso todas con una empinada rampa en curva para impedir el embate de los elefantes, dentro de la fortaleza no pueden circular coches, con lo cual fuimos en tuk-tuk hasta nuestro hotel Shahi Garh, muy cerquita del palacio y dándonos prisa fuimos a visitarlo porque cierra a las seis de la tarde.
En una de sus fachadas hay unas escaleras en lo alto un trono de piedra para audiencias públicas del maharajá o presenciar desfile de tropas.
La fortaleza es un lugar tranquilo pues prácticamente no circulan ni motos ni tuk-tuk, con lo cual puedes pasear disfrutando del laberinto de su estrechas callejuelas, que siempre te encontraras con una vaca que a mayor estrechez más grande son sus cuernos.
Alojarse dentro de la fortaleza tiene la ventaja que según va cayendo la tarde menos actividad hay, con lo cual más disfrutas descubriendo sus palacetes y templos de ese color único de jaisalmer amarillo miel, descubriendo esos comercios artesanales ya inesistentes en occidente miniaturistas, perfumistas, uno de los mejores recuerdos de nuestro viaje.
16-02-2016 Bien tempranito visitamos algunos de sus templos
Hay templos jaimistas y el hinduista de Laxminath, este dedicado a la diosa Lakshmi diosa de la riqueza y fortuna, donde dicen que dando una vuelta de izquierda a derecha alrededor la diosa te concederá fortuna. Después de esta visita habíamos quedado con Vijay fuera de la fortaleza para visitar otras havelis interesantes de la ciudad.
La “Patwon Ki haveli” Este es el conjunto de cinco havelis que Guman Chand Patwa un rico comerciante de brocados de oro y plata para bordados de los saris, aunque se sospecha que también comercio con opio, construyo para él y sus cinco hijos la construcción duro 50 años empezando en 1805.
El conjunto de las casas unas al lado de otras formando una calle de edificios color miel, es realmente monumental e impresionante,
Dentro también hay una tienda de venta de telas, saris, pashminas. Nosotros compramos pequeños regalos a los vendedores ambulantes que están delante de sus fachadas.
Llegada la hora de la comida le pedimos a Vihay que nos llevara a comer a un restaurante local.
Vihay nos acompañó, nos ayudó elegir platos, desde ese día se terminó en comer en restaurantes turísticos y aun teniéndole de invitado las facturas se redujeron a la mitad, durante la comida nos sugirió visitar el desierto, nosotros en anteriores viajes ya habíamos montado en camello y visitado dunas al tentarnos con el precio dijimos que sí, de esta manera tendríamos una experiencia nueva.
Terminada la comida visitamos el Lago Gadsisar, es un embalse para el suministro de agua a la ciudad construido en 1400,
La entrada es una gran puerta con un arco de grandes pilares, dicen que recuerdan a unas piernas..? hay una leyenda con dos versiones una que lo mando construir una prostituta, para que las mujeres decentes pasaran por debajo de ellas y otra que la despechada prostituta lo construyo para que el maharajá al ir al lago recordara las veces que había estado entre sus piernas, para asegurarse que no la derribaran mando construir encima un templo en honor de Krishna .
Dentro del lago hay dos cenotafios dando una imagen muy romántica al lago, se puede llegar hasta ellos en pequeñas barcas que alquilan.
Dejamos la ciudad y fuimos a un campamento en la zona de Khri a 50 kilómetros de Jaisalmer en esta zona hay unas lenguas de dunas de arena blanca y fina, todos los campamentos son muy básicos nosotros estuvimos en el llamado Mangalam.
Donde había unas habitaciones bungalows ambientados con techo de paja dentro de ellos están tapizados para dar el aspecto de tienda y tienen baño incluido, como no nos dieron muchas garantías la limpieza de las sabanas, dormimos en un saco sabana con el que viajábamos por si acaso.
Todos están distribuidos alrededor de una plazoleta donde se haría un fuego de campamento.
Al atardecer fuimos montados en camello hacia las dunas, lo mejor encontrar un grupo de mujeres con sus saris de colores, que con cantaros en la cabeza venían de un pozo cercano, otras traían manojos de leña una imagen realmente preciosa y exótica a la caída de la tarde,
De vuelta en el campamento junto al fuego había un grupo de músicos y una bailarina, que nos amenizaron hasta la hora de la cena con su música y bailes
Me imagino que con nosotros estas pobres gentes tienen ingresos, detrás del campamento vimos unas viviendas muy humildes, algunos hombres sentados en el suelo con máquinas de coser en su puerta, no pude ver como cosían con la maquina a ras del suelo.