Primero fueron los restaurantes, y ahora le toca el turno a las heladerías:
- San Crispino, no tienen mucha variedad de sabores, pero los que tienen, son espectaculares, es algo más caro que el resto y no son especialmente grandes, pero son muy cremosos y están muy buenos. Para mi quizás haya sido el mejor. De hecho repetí, y no tripití porque un día pasamos de noche y ya estaba cerrado.
- Giolitti, otro de los famosos, muy buenos también, sabores más clásicos pero no por ello no menos buenos, como curiosidad, hay que sacar un ticket a la entrada a mano derecha que luego se canjea al heladero.
- Da Quinto, sitio que debe ser famoso a raíz de la cantidad de fotos de actores, etc., que tienen en sus paredes, es muy pequeño, pero tienen unos helados muy buenos y aquí si son grandes.
- Frigidarium, fuimos porque lo ponía de los primeros en tripadvisor, muy bien también, helados grandes, tienen uno que se llama Mozart que está muy bueno.
- Blue Ice, estos deben ser una cadena porque hay varios por toda la ciudad, aquí ya tienen sabores más "guarretes" como helado de ferrero rocher y alguno más, la presentación de los mismos es muy buena. Aquí repetí porque hay uno al lado de Trevi y claro, no se puede estar en la fuente y no comer un helado, aunque sea enero
- Della Palma, pasé por delante de ella pero ese día ya había cubierto mi cupo de helados, eso sí, entré dentro porque me llamó la atención el cartel de los 150 helados, pero no pude catar ninguno, aunque pinta buena la tenían todos
El precio de un helado normal de 2 bolas, suele ser de 2,50, salvo en Crispino que el helado de 2,5 es un cucurucho mínimo o una tarrina muy pequeña, por lo que un tamaño similar al del resto de 2,50 ya te sube 1 euro más caro.
También suelen tener en algunos sitios, uno conos de cucurucho, pero mucho más grandes, que parecen más artesanales, pero creo que costaban 6 euros, también es cierto, que hay mínimo tienen que entrar 3 helados.