crisfranval Escribió:
Hola,
Me han regalado unos billetes de avión a Tahiti para julio del año que viene. Nosotors somos muy viajeros , siempre por nuestra cuenta, ya hemos estado en Sudárica, Chile/Argentina, Kirgizstán, por Europa...
Lo que pasa es que vamos a tener un bebé y no sé si hacer un viaje tan largo con un bebé (de 8 meses)....
Alguna/o habéis estado por Polinesia con un bebé?
Las infraestructuras están bien?
Me podéis dar algún consejo?
Hola crisfranval.
Respecto de las infraestructuras hoteleras de Polinesia, comentar que son de las mejores del mundo. Hoteles de todo tipo, precio y calidad, eso sí, más caros que en otros lugares, ya que la exclusividad tiene su precio.
Para continuar tu consulta, en principio y pese a la bondad del clima polinesio, viajar hasta allí con una criatura de tan corta edad, a mi juicio, no me parece lo más idóneo, fundamentalmente por tres razones:
Por la duración del viaje. Si este viaje, de una duración total de más de 30 horas, de por sí ya es un palizón tremendo para una persona adulta, imagina para un niño de tan pequeño.
El segundo inconveniente que observo es que a edad tan corta, y que conste que no soy pediatra, el sistema inmunológico del bebé no tiene la suficiente fortaleza como la de un adulto y está mucho más expuesto a contraer alguna enfermedad de tipo vírico o bacteriano, muy frecuente en niños de esa edad. No obstante, y aunque lo más probable es que no se ponga enfermo, si sucede alguna de las vicisitudes mencionadas, en Tahiti hay muy buenos medios sanitarios, pero no son comparables a los que tenemos en España. Es más, si estás en alguna isla alejada de Tahiti solo podrás contar con algún ambulatorio para hacer frente a alguna emergencia de manera ligera. Solo en Tahiti hay infraestructuras hospitalarias de primer nivel y en menor medida en Raiatea.
Al hilo de esta cuestión mencionar que uno de los hijos de Julio Iglesias, estando en Bora Bora, sufrió una apendicitis y siendo una operación bastante sencilla, no pudieron operarle en la isla, por lo que tuvieron que llevarlo en helicóptero a Tahití para poder intervenirle.
También mencionar que en el año 2008, en el ambulatorio de Bora Bora, había una doctora española. Hoy día no se si seguirá prestando allí sus servicios.
Por último, viajando con un bebé, no vais a disfrutar de las bondades de esa tierra todo lo que se podría esperar ya que siempre habrá que estar alerta, e incluso uno de los dos, padre o madre, tendrá que cuidar del niño cuando vayáis a hacer alguna excursión ya que no se le puede dejar solo en ningún momento.
Recuerdo que cuando estuvimos en Bora Bora, haciendo la excursión del Lagoonarium, coincidimos con un matrimonio francés que iba con un niño de alrededor de 2 años y el chiquillo iba tan contento, pero el padre del pequeño no pudo hacer apnea en el jardín de coral y tampoco pudo echarse al agua para ver a las rayas y tiburones teniendo que quedarse en la lancha con él mientras la madre del pequeño sí que pudo disfrutar de esas actividades.
Mi esposa y yo tenemos la firme intención de volver a Polinesia allá para el mes de agosto de 2013. De hecho, hace ya tiempo que contamos con un presupuesto superior a los 20.000 euros para efectuar el viaje, pero tenemos una niña con 5 años recién cumplidos y hemos decidido que al menos hasta que no tenga 8 ó 9 años no iremos. ¿Los motivos? los expuestos anteriormente: esperar que el sistema inmunológico de la niña se desarrolle lo suficiente como para no coger tantas enfermedades como tienen con edad tan corta; también porque como aquello es tan hermoso, queremos que la niña sea consciente de donde está y lo que ve y además que sepa nadar y bucear con cierta soltura; y para finalizar, porque si el viaje en sí ya es muy cansado para un adulto, imagina para una criatura de tan corta edad.
En principio, como ya he comentado, no tiene porqué suceder nada y la decisión de hacer el viaje depende de cada persona, ya que cada uno entiende la prudencia de diferente forma, pero mi consejo sería esperar algo de tiempo, un par de años o incluso más, ya que aunque perdáis los billetes, Polinesia seguirá estando ahí y no va a salir corriendo.
No obstante, entiendo que haya quien crea erróneos estos argumentos porque, como ya he comentado, cada uno entiende la prudencia de manera distinta, es por ello que la decisión final os corresponderá tomarla a vosotros.
En el caso de que finalmente os animéis a realizar el viaje, desearos una feliz estancia en el paraíso.
Saludos,