Visita de un día al Parador de Lorca
Ubicado en el recinto del Castillo de Lorca, a las afueras de la ciudad, sobre una colina
Bajo el parador hay un yacimiento arqueológico
Lláma la atención lo bien que se ha integrado la construcción de un edificio moderno, con los elementos del entorno. Tanto en materiales, como en diseño
Las vistas desde el parador a la ciudad y la sierra son una maravilla
Una vez dentro, el acceso a la recepción es amplio, con techo alto dejando libre la vista, de las plantas superiores
La decoración moderna, con muebles de diseño. Salones muy amplios
Nos ofrece en recepción una suite, que nos cogimos. En paradores últimamente, todo es facturar más..
La cafetería con mesitas y sillones, muy agradable
El Parador tiene spa, con cargo extra. Nosotros sólo usamos la piscina cubierta, que es de acceso gratuito. Está muy bien, con unas vistas preciosas. Tiene zona de solarium con hamacas. La pega es que por la mañana entre semana está cerrada
El restaurante con vistas de la ciudad
Muy espacioso y bien decorado
La carta corta, pero suficiente
Tomamos jamón ibérico, una parrillada de verduras de la huerta murciana
Lomo de ternera, y mi marido chuleta de chato (cerdo de la región murciana)
De postre una mouse de chocolate con almendras, muy fina. Y la tarta típica de lorca con helado de limón, que es muy empalagosa
Muy buenas raciones, materia prima y elaboración en todo
El servicio en todos los departamentos es muy bueno
Nuestra habitación standard. Con vistas a la ciudad. Muy grande. Cama de matrimonio enorme. Con todo el mobiliario necesario. Mesa auxiliar, sofá cama, escritorio
Armario grande, caja fuerte, minibar, ect..
Baño con bañera. Dos lavabos. En mármol rojo
Si nos ha parecido que pese a ser un parador bastante nuevo. Le falta confort en los elementos
Los desayunos a la altura de paradores. Con todo lo que te pueda apetecer. Incluso vino de Rioja, que alguno vi que se atrevió a las 9 de la mañana… Buenos embutidos. Quesos, dulces, frutas. Calientes a la carta. Todo de mucha calidad y bien presentado
Cortesía tarjeta círculo unas pastas, regañas y agua
Albornoz y zapatillas
Desde el parador fuimos caminando hasta Lorca. En su casco histórico hay dos calles que merece la pena un paseo. Edificios con escudos y alguna plaza. La colegiata de San Patricio y algún museo
Cuenta con comercios de todo tipo