Hemos hecho el circuito de Condor salida el 15 de julio "Gran tour de Suiza" 1.150euros por persona precio base + 110euros por ser temporada alta + 80euros tasas de aeropuertos + 35euros por salir a partir del 15 de julio.
Condor:
Lo mejor; bien organizado, buenos hoteles, las comidas están bien, suficiente tiempo libre, nuestra guía acompañante (Gloria) muy profesional y muy documentada. La verdad es que nos quedamos bastante satisfechos con este tour.
Lo peor; demasiada gente, no sobraba ni un asiento (es normal en esta época, quizás se puede evitar haciendo este circuito en temporada baja), no se puede cambiar el menú (si no te lo puedes comer es lo que hay).
La moneda: el franco suizo. Es más fácil pasarlo a pesetas para saber la carestía de las cosas. Pj: a la unidad se le añade dos ceros y lo tenemos en pesetas: 1fr.= 100pts. Los precios con céntimos le quitamos la coma y lo convertimos en pesetas: 3'50fr. = 350pts.
Domingo, 15 de julio, Madrid-Ginebra:
Vamos con Iberia desde Madrid con retraso de casi 2 horas, pero el vuelo fue muy tranquilo y no nos perdieron las maletas (T4) :)) . La duración del vuelo es de 1'30h.
Llegando a Ginebra una preciosa postal nos dio la bienvenida, el Mont Blanc, un cielo azul de fondo, el lago Lemán con su chorro, un valle verde y 32 grados.
Estamos en la Suiza de habla francesa. Unos dos millones de habitantes. Como llegamos pronto y la comida no estaba incluida, nos fuimos desde el hotel (
www.hotel-les-nations.com) en el autobús nº 8 al centro hasta la parada "Pont du Mont-Blanc". El hotel nos da un ticket de autobús y un barco amarillo que va por el lago, nos sirve para los dos días.
Buscamos un restaurante donde comimos una ensalada (20fr.), una pizza (22fr.), una cerveza (5fr.). Nada del otro mundo. Tomamos un cortado en otro sitio (3'50fr).
Unos compañeros del grupo nos contaron que habían comido en el restaurante "La bodega" en la calle "rue de l´eau", hace esquina, cerca del chorro. Unos (50fr.) , hablan español, y la comida muy buena.
Regresamos al hotel a las 4'30h. Para hacer la excursión panorámica de la ciudad, aprox. 1h.30', una parte en el autobús y otra a pie. En el autobús vemos algunos de los edificios de organizaciones diplomáticas e internacionales, el lago con su famosa fuente Jet d-Eau, el reloj; a pie visitamos el casco antiguo con la Catedral de San Pedro de 850 años de antigüedad, el Monumento de la Reforma, en el que están representados los principales personajes de ese movimiento político-religioso, interesantes callejones...Nos encontramos con numerosos parques y zonas ajardinadas. Terminamos sobre las 6'00h. Y nos quedamos paseando por la orilla del lago y sus alrededores. Hay muchos negocios de joyas, relojes, ropa de diseñadores famosos. Es domingo y pasea mucha gente de lo más variopinta, muchos de sus habitantes son de origen extranjero. Hay una parte que la llaman la playa de Ginebra, un espacio muy reducido para satisfacer a los acalorados ginebrinos. No es usual que haga esta temperatura, pero de vez en cuando tienen olas de calor muy desagradables para ellos y para nosotros los turistas, ya que no están preparados. La mayoría de los sitios no tienen aire acondicionado, a nuestro autobús le costó muchísimo aclimatarse, estuvimos un rato largo sudando como pollos.
Por la noche tuvimos la cena en un restaurante italiano a 10' andando desde el hotel (pasta, unos macarrones con tomate malísimos; y strogonof).
Lunes, 16 de Julio:
Excursión al Mont Blanc, 128€ por persona. Nos desayunamos a las 7'00h para salir a las 7'30h. Nos espera 1h.30' de trayecto, pero el paisaje es entretenido y no se nota. Llegamos al pueblo de Chamonix 1035m. De altitud, donde cogemos el teleférico (tenemos tiempo libre hasta la 1'00h). En la cabina cabe unas 60 personas, vamos un poco apretujados y pasamos un poco de calor. Apenas tienen ventanas y aunque era temprano (9'00h) el día estaba completamente despejado y hacía rato que lucía el sol; lo que agradecimos enormemente porque las vistas fueron impresionantes. La subida del teleférico es una aventura va rápido pero no se nota, sólo cuando te cruzas con el que baja te das cuenta de la velocidad que lleva. Se mueve un poco al pasar por las torres. Nos subimos a un segundo teleférico. Cuando va llegando a la plataforma se para un rato para no entrar penduleando (o eso es lo que quiero pensar). En este rato podemos observar las grietas y agujeros del hielo que tenemos debajo.
Estamos arriba donde tenemos varias terrazas para admirar el paisaje, un ascensor que nos sube a la más alta, una cafetería y los servicios más altos de Europa . Aquí arriba a 3.842m. De altitud el esfuerzo es tres veces superior por la falta de oxigeno, tenemos que recuperar el aliento en cada tramo de escalones.
Después de 2 horas nos bajamos a pasear al pueblo de Chamonix, además de ser muy pintoresco está lleno de tiendas especializadas en alta montaña. Como nos quedaba tiempo libre hasta la 1'00h. Nos dedicamos a callejear y hacer algunas compras, estaban en rebajas.
Nos reunimos para comer en un restaurante del mismo pueblo, una ensalada, papas en salsa de queso y ternera, de postre fruta.
Llegamos a Ginebra sobre las 3'30h. Tenemos toda la tarde libre. Callejeamos por los lugares principales viendo las tiendas de marca, donde la gente muy rica gasta mucho, mucho dinero. Nos tomamos en una terraza normalita unos helados de cucurucho con dos bolas (6fr.cada uno). A las 8'00h. quedamos en la recepción para cenar en otro restaurante a unos 10' andando. Cenamos en pizzería La Romana, ¡Qué calor!, las temperaturas siguen siendo altas y no tienen aire acondicionado. Nuestro menú: ensalada, tallarines y pechuga con champiñones, de postre un flan. Caña de 25cc. (3´5fr), café (3'5fr.).
Martes, 17 de julio:
Nos llaman a las 6'15h. Para salir a las 7'30h. Dirección Lusiane unos 45' de recorrido hasta llegar a esta ciudad. Hacemos una parada de 1h. Tiempo suficiente para ver el Palacio Rosini, la Catedral de estilo gótico de los siglos XII y XIII, además tenemos un mirador donde podemos contemplar las vistas de esta ciudad con el lago Lemán desde la parte de atrás de la Catedral. El autobús nos deja delante del palacio Rosini (la entrada es por detrás), tiene un pequeño museo de animales disecados, subimos al 2º piso y desde allí tenemos un paso (un puente de hierro) que nos permite llegar a la catedral.
Nos queda un recorrido de 2h y 30' vamos en dirección del gran San Bernardo. Al poco de salir de esta ciudad contemplamos el lago Lemán, su preciosa rivera llena de viñas perfectamente alineadas y el castillo de Chillon en la orilla (sólo lo vemos desde el autobús). Continuamos hacia el Valle del Ródano (paisaje de valle entre montañas) y seguimos hasta Täsh donde tenemos el hotel (Monte Rosa) . Estamos a más altitud se nota, la temperatura es más agradable después del calor que hemos pasado, se agradece.
Nada más llegar comemos. Ensalada de lechuga, brocheta de carne con arroz blanco y salsa, de postre helado, cerveza (4 fr.), cocacola (3'50fr), agua mineral(3'50fr). También tomamos café-cortado muy bueno, de los pocos sitios donde me ha gustado el café, (3'40fr).
A continuación cogemos un tren desde Täsch (incluido) que nos lleva a Zermat (centro internacional de esquí). En esta ciudad no están permitidos los coches que contaminen. Tenemos tiempo libre. Desde aquí cogemos un tren de cremallera (no incluido 65fr. Si nos juntamos un grupo), subimos a Gornergrat (unos 45') (necesitamos algo de abrigo arriba), para contemplar el Cervino o Matterhorn 4.478m. (el que sale en el toblerone). A medida que subimos las vistas se hacen más impresionantes. En esta época todavía hay bastante nieve lo cual le da un encanto especial, merece la pena. Bajamos de nuevo al pueblo de Zermat, tiene una calle principal con mucho ambiente, tiendas de deporte de alta montaña, restaurantes, souvenir,etc...los balcones muy adornados, coches de caballo, muchos hoteles en su estilo... Nos sentamos en una terraza (un cortado (3'7fr.) Un trozo de tarta (4'50fr.). La cena la tenemos a las 7’30h.
Miércoles, 17 de julio:
Nos levantan a las 7'00h. Para salir a las 8'00h. Regresamos por el mismo camino, el valle del Ródano, el lago Lemán y continuamos a Gruyère, pequeña ciudad medieval fortificada, (tardamos 2h. 40') tenemos tiempo libre 1h.15', suficiente para ver el pueblito (idioma francés). Visitamos el bar Giger propiedad del artista inventor de las criaturas de Aliens, la decoración es inspirada en esta película. Nos tomamos un café expreso (3'60fr), café con leche (4fr.).
A las 12'00h. Seguimos en dirección a Berna, capital de Suiza con unos 140.000 habitantes. Tardamos 1h. En llegar. Tenemos 27 grados, ¡Qué calor!. Nos bajamos cerca de la oficina de turismo, cogemos un plano y esperamos en el puente (Nydeggbrücke) para seguir juntos al restaurante “Zunft zu Webern” en la calle Gerechtigkeitsgasse, es la calle principal. Ensalada, papas escachadas-rehogadas y pechuga con champiñones, de postre bufett. A continuación tenemos tiempo libre para disfrutar de la ciudad, unas 3 horas. Su casco antiguo es Patrimonio Histórico por la Unesco. Lo mejor: el Ayuntamiento, el Reloj y la Catedral. Se puede subir a la torre de la Catedral para ver la ciudad y los Alpes(cierran a las 4'30h.) y la Catedral (cierran a las 5'00h.). Paramos en una terraza para descansar cerca del teatro y tomamos un expreso (4fr.), café freddo (4'70fr.), café con leche (4'70fr.)
A las 5'30h. Regresamos al autobús y salimos a Soloturm, preciosa ciudad junto al río, tardamos unos 35', tenemos unas 2h. Hasta la cena, a las 8'30h.
Dejamos las maletas y salimos a ver la parte antigua, una pequeña ciudad fortificada que se recorre tranquilamente en menos de una hora. Destaca su Catedral, el reloj y las puertas de su antigua muralla.
El hotel (
www.ramada-treff.ch) está situado frente a la parte antigua de la ciudad, sólo hay que cruzar el puente que los separa. Es muy moderno y las habitaciones son muy cómodas, televisión pantalla plana con altavoces en el baño. Aquí dormimos 2 días. La cena es tipo bufett un poco incómoda por la mala colocación de éste, en un rincón, con lo cual tenemos que hacer una cola enorme hasta poder servirnos, en vez de estar en el medio para movernos alrededor de él. A pesar de todo la comida es muy buena.
Jueves 18 de julio:
Nos levantamos a las 7'30 para salir a las 8'30. Tenemos casi 2 horas de camino hasta las cataratas de Trumelbach. A la hora de camino nos encontramos con el lago Thun, que visitaremos más tarde, el paisaje empieza a ser más interesante, es de cuento.
Llegamos a las cataratas, tenemos algo más de una hora de tiempo libre, hasta las 11'30h. Están situadas en el interior de la montaña. Subimos en un ascensor grande tipo mina y luego escaleras, muchas escaleras. Es conveniente llevar un chubasquero por la fina lluvia que desprende la cascada y calzado que no resbale. Es impresionante la fuerza del agua y el ruido es ensordecedor. La bajada es por el exterior, todo escaleras, ya que hay más cascadas por fuera. Como nos queda tiempo y para descansar las piernas que se nos quedan temblando, nos tomamos en la cafetería de la entrada unos capuchinos 3'80fr., tarta de manzana 5'80fr., un santwich de jamón y vegetales 6'80fr.
Continuamos hacia Interlaken, esta ciudad está rodeada de los lagos Thun y Brienz, de hecho “Interlaken” significa “entre lagos” y además de los picos Jungfrau, Mönch y Eiger. Tardamos en llegar 30'. Disponemos de 1h. De tiempo libre hasta la comida, a la 1'00h. En un restaurante justo al lado del campo de aterrizaje de parapentes. Mientras comíamos disfrutábamos del espectáculo de los parapentes. Se puede contratar un biplaza (150fr. Por 20' de vuelo sobre Interlaken), hay tiempo suficiente hasta las 4'00h. (unas 3h.). La ciudad se puede visitar tranquilamente, no es muy grande y es muy bonita. Tuvimos un día despejado que nos permitió ver la Jungfrau, contrastaba su manto blanco con las demás montañas de un verde intenso. Nos sentamos en una terraza en el Café de París para descansar y tomarnos un café malísimo que nos costó 3'60fr. Cada uno.
Los hoteles que tiene esta ciudad son muy elegantes parecen hoteles-balneario, en especial el hotel Victoria con unos salones originales, los podemos visitar.
Salimos hacia Spiez, a orillas del lago Thun. Tardamos unos 30' en llegar. Nos sorprende una tormenta que se forma por el calor, con sus truenos y relámpagos. Tenemos 1h. De tiempo libre. Nos acercamos al castillo de Spiez. Para subir hasta la torre hay que pagar 7fr. Pasamos por distintos pisos visitando sus estancias y salones que tienen muy bien cuidados, prácticamente gastamos nuestro tiempo en el castillo era lo más cómodo por la tormenta y se podía ver esta pequeña ciudad con su puerto desde allí.
Continuamos hacia Soloturm, algo más de una hora. La cena es a las 8'00.
Viernes 19 de julio:
Nos levantan a las 6'30h. Para salir a las 7'30h.
Llegamos a las 9'00h a Lucerna, ciudad a orillas del lago de los 4 cantones de estilo medieval con fachadas de mucho colorido y sus preciosos puentes cubiertos que cruzan el río Reuss (Kapellbrüke y Spreuerbrüke). Hoy tenemos máximas de 29 grados, en la sombra se está bien. Tiempo libre hasta las 10'20h. Que sale el barco (excursión opcional 83 euros). Los que no la hacen tienen tiempo libre hasta las 5'00h.
El paseo en barco tarda una hora. Es muy agradable con unas vistas estupendas de Lucerna. El barco tiene 1ª y 2ª clase, nuestro ticket es de 1ª que permite estar en el 2º piso del barco. También tiene cafetería... Luego cogemos el tren de cremallera (20'), para subir al monte Rigi, las vistas son preciosas. Llegamos a las 12'00h, media hora libre, no hay buenas vistas desde aquí arriba por los árboles, a continuación comemos platos típicos, la fondue de queso con trocitos de pan, una salchicha con una especie de torta de papas y helado. Para beber no aconsejan cerveza, porque con el queso puede fermentar y sentar pesada la comida. Vino blanco 50cc. 13fr., cerveza 4fr.
Bajamos en el funicular a las 2'15h., unos 10', aquí colgados sí tenemos paisaje para foto. Continuamos en autobús hacia Lucerna, tardamos unos 50' la entrada fue un poco lenta por el tráfico. Tiempo libre hasta las 5'00h. Perderte por las calles de esta ciudad es un sueño, sus edificios cuidados con mimo, los colores, dibujos en las fachadas...
Nos tomamos unos cortados en la "cafetería Emilio", calle Grendel 9. Casi al final del viaje descubrí que lo más parecido a nuestro cortado es el café expreso, ya que te lo acompañan con un poco de leche aparte o una porción de nata líquida, 4fr.
Continuamos hacia Zurich, 1h.30', tiempo libre hasta las 8'00h. Que tenemos la cena. El hotel Senator. (
www.senator.ch)
Sábado 20 de julio:
Nos levantan a las 7'30h. para salir a las 8'30h.
Tardamos 45' en llegar a las cataratas del Rhin. Aquí tenemos 1hora de tiempo libre. De los sitios que hemos visitado hasta ahora, es aquí donde tienen el souvenir más barato. Preparados para muchas escaleras. Comenzamos a bajar, a mitad de camino hay una cueva, pasamos por ella para llegar a un balcón donde sacamos una bonita foto. Seguimos bajando hasta llegar a una pequeña plataforma, aquí podemos apreciar la fuerza del agua.
Continuamos hacia Friburgo pasando la frontera por Badenbutenberg. Tardamos unas 2 horas, vamos por una carretera alternativa para poder apreciar mejor la selva negra pasando por el salto del ciervo. Llegamos a Friburgo, tiempo libre hasta la 1'00h. Que tenemos la comida. Luego tiempo libre otra vez hasta las 4'00h. Es sábado y hay mercado en la plaza de la Catedral con mucho ambiente. Callejeamos por los alrededores, el gentío es impresionante por cualquier calle que vayas. Destacamos el Ayuntamiento, la Puerta de San Martín, el Edificio de los Curtidores...
Regresamos a Zurich por autopista, llegamos a las 6'15h. Al centro de Zurich, tiempo libre hasta las 7’00h. La cena a las 8’00h.
Domingo 22 de julio:
Fin del viaje. Nos recogen a las 5'30 de la tarde. Tenemos toda la mañana para patear el centro. Tomamos el tranvía nº13 ó 4 para llegar a la parte vieja de la ciudad, situada en las dos riberas del río Limmat. Importante la calle Bahnhofstrasse, donde se guarda las fortunas de muchas familias y el oro de algún país (Suiza es la ciudad mejor protegida del mundo, su ejercito es capaz de estar activo en 24 horas). Llegamos sobre las 10'00h. Es domingo, está todo cerrado, apenas hay gente, sólo un par de turistas. A medida que transcurre la mañana se empieza a animar la cosa, comienzan a aparecer grupos de turistas y a partir del mediodía los locales. Hay una feria montada donde aprovechamos y comemos en uno de sus puestos, un plato tailandés con arroz (20fr.). Nos subimos en la noria para contemplar la ciudad desde las alturas (8fr. Cuatro vueltas). Nos vamos a tomar un capuchino (6fr.). Continuamos paseando, como el día era espléndido se fue animando la cosa y las calles y parques comenzaban a abarrotarse de locales con sus familias. Regresamos al hotel donde nos recogerían para trasladarnos al aeropuerto.
Un saludo de viajero a viajero.[align=justify]