Otro día, pero no otro día cualquiera. Otro día en el mismísimo paraíso! Esto es despertar! Nada más abrir los ojos teníamos el mar a la vista. Casi podíamos tocarlo. Pusimos música a buen volumen. Se escucha muy bien. Desde casa trajimos una USB con música y nos vino genial porque le dio otro toque a la estancia. ¡Esto es vida! Nos decíamos. Esto es vida! Cada canción que escuchábamos allí ahora nos traslada a aquel paraje idílico.
Esto fue la tónica que hicimos los días siguientes hasta dejar la isla.
Desayunamos fuerte y nos preparamos luego para tomar un baño.
No nos cansábamos de ver la imagen postal de la isla desde la pasarela del agua
Esta foto está tomada desde las casetas donde se dan masajes. Está justo al inicio de la pasarela de madera. Nosotros tuvimos 15 minutos de masaje gratis por nuestra reserva. Recomiendo pasar por allí; sus manos te dejan como nuevo
Qué color!! Es increible como en un día la isla adquiere diferentes tonos de colores. Según esté pegando el sol, según la hora del día, si hay nubes...
Qué risas nos echamos intentando hacer esta foto (sacamos unas 7 pero no coincidíamos en el salto jaja
Por las mañanas encontrábamos al personal barriendo las hojas caídas. Hay que decir que siempre dejan la isla impoluta.
En la zona de Asian Wok (zona Beach Villa) se está genial. Una gran playa para disfrutar. Además hay una bonita hamaca colgada de la palmera.
Queríamos llevar la fina arena de Maldivas de recuerdo a casa. Pues llevamos una botella de 1.5 litros llena de arena y otras piedrecillas de coral que arrastraba el mar a la orilla. En casa las hemos puesto en una cajita de cristal para decoración. Queda muy bien. Os recomiendo. Aquí aparezco yo en acción:
Paseamos y paseamos por los bellos rincones que tiene la isla
Como he dicho antes la mejor playa de la isla está situada en la zona de adultos
Qué vida más dura jaja
En cualquier momento nos metíamos en el agua para explorar el reef
Después paseíto y a disfrutar. No hacíamos mucho más pero éramos felices sin hacer nada.
Esta foto nos encanta. La palmera la había visto antes de reservar esta isla en los videos de youtube y blogs. Es uno de los detalles que estábamos buscando a la hora de elegir isla jaja. Recuerdo que al lado había una señora que no dejaba de sonreír… porque hicimos 2-3 intentos…y yo iba y volvía a trepar la palmera y luego otra vez a la cámara a cambiar los ajustes…
Queríamos una foto típica del paraíso con su palmera. Pusimos el trípode, el autodisparador de 30 segundos y a disfrazarse de Tarzán! Jaja. Fue un momentazo. Lo pasamos genial!
Al mediodía íbamos a cambiarnos de ropa a la habitación. En la entrada y por el camino a las Water Villa hay cuencos llenos de agua que se utilizan para quitar la arena de los pies o simplemente refrescar las piernas por que como antes he dicho, al mediodía está muy caliente la pasarela de madera jeje
Por la isla siempre andábamos descalzos. No hay problema para ello. Incluso el suelo de los bares y restaurantes está de arena.
Por la tarde nos íbamos a hacer snorkel o a la piscina a relajarnos
El tiempo pasaba volando entre pasear, meterte un chapuzón, coger un poco de sol, los baby sharks… disfrutamos como nunca. Quien nos diría a nosotros que terminaríamos haciendo realidad este sueño? Ni nosotros mismos creíamos que era real. Demasiado perfecto para ser real
Aiiiiii!!!! Os recomiendo de veras. Esto es un sueño…
Por la tarde noche nos íbamos a al Sunset Bar para tomar algo para ver desde ahí el atardecer. Es un lujo presenciar las últimas luces del día
Con el paso de los minutos el cielo toma diferentes tonos
Mi novia se metió en el agua e intenté hacer una foto decente jugando con su sombra
Con esta imagen paradisíaca terminamos nuestro último día. Al día siguiente estaríamos en la isla hasta las 16:00 porque luego dormiríamos en Male. Si nuestro vuelo internacional saliese el mismo día de la salida del hotel nos habrían llevado por la mañana pero no era el caso. Por lo que el último día casi lo disfrutamos al completo.
Por la tarde hicimos el check out y tras coger el hidroavión vimos una última vez nuestra querida Vilamendhoo; otra isla maravillosa de Maldivas. Estábamos un poco apenados pero bueno, ya habíamos tenido tiempo para disfrutar a tope! Por lo menos eso intentamos.
El vuelo tardó 30-45 minutos en llegar a Male. Nos dejaron en el aeropuerto y acto seguido cogimos un bus regular para ir a un hotel de Hulhumale, el Coral Queen Inn, donde pasamos la noche.
www.booking.com/ ...es.es.html
Al día siguiente, muy temprano nos trasladamos en 5 minutos al aeropuerto donde cogimos nuestro avión internacional hacia nuestra casa. De esta forma dimos por finalizada nuestras vacaciones fantásticas