Nos levantamos tranquilamente, sin prisas. El avión salía a las 15h, y a las 13h, habíamos quedado con los del alquiler del coche en el aeropuerto, así que teníamos unas cuantas horas por delante. Preguntamos a la recepcionista del hotel, desde dónde tendríamos mejores vistas de la ciudad desde el Monte Vithosa, la cual, nos comentó que podíamos subir a ver el Monasterio de Draglevtsi. Y así lo hicimos. Dicho monasterio, está en una ladera del Monte Vithosa, escondido en la frondosa vegetación
Cuando bajamos, nos paramos para contemplar la ciudad de Sofia,
y rápidamente, nos dirigimos al aeropuerto para dar por finalizada nuestra semana búlgara