Día 6 - Angkor (circuito largo) ✏️ Diarios de Viajes de Asia Sudeste

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Día 6 - Angkor (circuito largo)

El precio acordado para este día con Mr. Kimsan fue: Angkor circuito largo (Banteay Samrae, Pre Rup, East Mebon, Ta Som, Neak Pean, Preah Khan) + Banteay Srey + Sunset (atardecer) en Phnom Bakheng = 30 dólares.

Hoy no madrugamos tanto (nos lo hemos ganado). Desayunamos fuerte en el hotel que hoy va a ser un día largo. Tomamos unos Pancakes, cereales, fruta del lugar unos zumos y café.

Mr. Kimsan viene a recogernos al hotel a las 8 de la mañana. Ponemos Rumbo a Angkor que hoy nos toca hacer el circuito largo. Pasamos al lado del Bayon y cruzamos la puerta Norte.


La ciudad de Angkor Thom tenía originariamente cuatro entradas (norte, sur, este y oeste). Esta es una de ellas.

Seguimos avanzando y nos encontramos con nuestra primera parada, el Preah Khan. Un precioso y gran templo rodeado entero por agua (aunque en esta época del año no tenía su máximo nivel).




Dado su gran tamaño, dedicamos un par de horas a disfrutar con este maravilloso lugar.

Seguimos avanzando y llegamos a nuestro siguiente objetivo el Neak Pean.

Nada más entrar al recinto hay que cruzar por una larguísima pasarela rodeada de agua.


Este pequeño e inaccesible templo se encuentra al final del camino (Decepciona un poco, ya que el paseo hasta llegar allí es precioso)


Vuelta por la pasarela, llegada al Tuc Tuc y a continuar. El siguiente destino El Ta Som

Nada más bajarnos del Tuc Tuc unos letreros nos advierten: "No deis dinero a los niños". Ya habíamos leído antes de venir la advertencia dada por el gobierno de Camboya en la cual quieren acabar con esta práctica (adultos o mafias que utilizan a niños para su propio beneficio)

No habíamos andado ni 3 pasos y automáticamente 2 niñas vienen desde lejos y nos preguntan en inglés que de donde eramos, les decimos que españoles y comienzan a hablar en un perfecto español: Hola como estás? Hola María que tal? Cómprame algo a mi pero no a ella (señalando a su compañera) seguro que solo saben unas cuantas palabras de cada idioma, pero como bien dice el refrán: el hambre agudiza el ingenio.


Hacemos caso de los carteles y seguimos nuestro camino. Lo más famoso de aquí es la "puerta trasera"


El siguiente es el East Mebon



Seguimos hasta llegar al Banteay Samrae, (uno de los mejores conservados junto al Angkor wat)




Mr. Kimsan nos pregunta si queremos comer algo, que en este lugar hay varios sitios. No teníamos mucha hambre debido al gran desayuno que habíamos tomado

Dicho esto ponemos dirección al Banteai Srei. Este templo se encuentra a unos 30 kilómetros desde nuestra ubicación actual. Es el único templo de Camboya construido única y exclusivamente por mujeres allá por el siglo X.

1 hora de Tuc Tuc y nada más llegar, salta a la vista la gran diferencia con los demás. Son miniaturas de los demás templos de Angkor pero dada su construcción con arenisca roja, tiene muchísimos detalles tallados en todos los muros. En mi opinión, uno de los más bonitos que vimos.
La entrada está incluida dentro del pase general de Angkor




Tras un bonito, pero caluroso paseo, buscamos a Mr. Kimsan y rumbo de nuevo a Angkor, concretamente a nuestro último destino: Pre Rup. Subimos hasta arriba del todo y nos encontramos unas vistas maravillosas, donde pudimos apreciar el espesor de la selva camboyana.



A estas horas ya estabamos un poco cansados y hacía muchísima calor, así que nos fuimos a Pub Street a comer algo y quedamos con Mr. Kimsan sobre las 5 para llevarnos a ver el atardecer de nuevo a Angkor.
Después de comer descubrimos un local llamado "The Blue Pumpkin", una cafetería con todo tipo de repostería, pero lo mejor de todo es la planta de arriba donde hay wifi, aire acondicionado y unos sofás muy muy cómodos.


Nos pedimos un helado, un café y un donut de chocolate, todo por 4 dólares.

A las 5 y muy puntual teníamos al señor Kimsan allí esperando.

Ponemos dirección a Phnom Bakheng. Este templo está construido en lo alto de una montaña y es famosos por tener el mejor atardecer de toda la zona.


Estuvimos alrededor de media hora subiendo un camino con una buena pendiente, hasta llegar a la cima donde se encontraba este templo. Al llegar nos llevamos una buena decepción en forma de cola (alrededor de 200 personas calculaba que había en ella). Nos pusimos los últimos de la fila y matamos el tiempo hablando con un guardia de seguridad camboyano (muy majo el muchacho por cierto), el cual nos daba pocas esperanzas de entrar al templo antes de que terminarse el atardecer. Aún así, muy insistentes nosotros, decidimos quedarnos a probar suerte.
Por lo que pudimos apreciar, la última planta del templo no era muy grande y solo dejaban estar en ella a unas 100 personas. Estaba llena, ya que había gente que llevaba allí horas con el trípode colocado para poder capturar el atardecer. Esto quiere decir, que para que subiera una persona, otra tenía que bajar y los que estaban allí arriba no estaban por la labor

1 hora y media después, nos tocó subir y tal y como había dicho el guardia de seguridad, llegamos tarde de nuevo (ni el sunrise ni el sunset, snif snif )

Aun así, conseguí sacar alguna instantánea que merecía la pena.



Cuando salimos de allí ya era completamente de noche, así que pusimos las linternas del móvil y nos dirigimos montaña abajo. Al llegar a la base había cientos de Tuc Tuc, pero no hizo falta buscar. Mr. Kimsan (no me preguntéis como nos vio) nos hizo gestos con la mano desde un mar de Tuc Tuc y vuelta para el hotel.

Nos dimos una ducha y al salir descubrimos que estaba lloviendo bastante fuerte. Como el día había sido muy completo, nos fuimos a un pequeño restaurante camboyano que había justo enfrente del hotel (cuando digo restaurante quiero decir: unas tapias de ladrillo, unas mesas y sillas de plástico y una cocina al aire libre detrás de una pequeña e improvisada barra. Al menos tenía unas laminas de plástico que hacían de techo para no mojarse) Comimos arroz frito con verduras y unas gambas cocidas, una cerveza y un refresco por 8 dólares.

Vuelta al hotel y a dormir.

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