Llegar tan pronto fue una ventaja puesto que me permitía aprovechar toda la tarde por lo tanto al salir de la estación de ferrocarril me encamine hacia el hotel, afortunadamente había leído que desde hacía unos años se había construido en Toledo unas escaleras mecánicas que facilitaban el acceso al casco histórico no obstante por desconocimiento del lugar me equivoque y en lugar de cruzar el Tajo por el puente de Azarquiel lo hice por el puente de Alcántara, me desvié por el paseo de la rosa.
La ventaja es que pude disfrutar de las preciosas vistas desde el puente al Alcázar así como del mismo puente y de la puerta que lleva el mismo nombre, el inconveniente menor es que tuve que subir una calle hasta alcanzar un acceso a la mitad de las escaleras mecánicas no obstante al llevar la maleta se agradeció. Para vuestra información el inicio de las escaleras mecánicas esta en un parking cerca de la rotonda nada más pasar el puente de Azarquiel. Arriba en el mirador estuve unos 5 minutos andando hacia el hotel pasando por la plaza Zocodover, registrarme, deshacer la maleta y ya estaba de nuevo en la calle cámara en mano. Estuve callejeando por la plaza Zocodover, la calle del comercio (es la calle con la mayor cantidad de tiendas del casco antiguo de Toledo) di una vuelta alrededor de la Catedral y llegue a la plaza del ayuntamiento. La verdad no me esforcé mucho porque seguí lo que sería la marea de turistas, volví sobre mis pasos para almorzar cerca de la plaza Zocodover y tras acabar como aun me quedaba tiempo hasta las 17:00 baje hasta el mirador de las escaleras mecánicas para contemplar el nuevo Toledo, de allí pase bajo la puerta del sol y volví pasando junto a la mezquita del Cristo de la luz. Monumentos que en ese mismo momentos no me decían nada, no queriendo arriesgarme a perderme por callejear demasiado tome la decisión de volver a la plaza Zocodover, punto de salida de todos los Tours.
Es divertido ver como se llena la plaza en determinadas horas de paraguas de distintos colores, en el caso de la empresa Cuéntame Toledo el color del suyo es amarillo y tras identificarme a la guía Marina estuve esperando un rato hasta que todos los componentes del grupo estuvieran presente. Empezamos el recorrido en la misma plaza con una explicación histórica del lugar: De esa forma supimos que el nombre de la plaza es de origen musulmán Suk-al-dawab y que era inicialmente un mercado de bestias, en la época cristiana fue lugar de mercado o zoco donde igualmente se celebraron todo tipo de acontecimientos como corridas de toros o autos de fe de la inquisición, a pesar de su importancia no es la plaza principal de Toledo.
Pasamos debajo del cercano arco de la sangre donde al final de sus escaleras se encuentra ubicada una estatua de Miguel de Cervantes. No hay que olvidarse que Cervantes situó su obra "la ilustre fregona" en esa misma ciudad, la cual también es nombrada en "el Quijote" y su esposa Dª Catalina de Palacios y Salazar disponía de una casa en la villa.
Justo al lado otra parada frente al hospital de Santa Cruz (hoy día museo) para admirar su impresionante portada y los boquetes de balas en su fachada fruto del asedio al Alcázar durante la guerra civil. Una nueva Pausa en las escaleras de la puerta de entrada al museo del Ejercito situado en el edificio del Alcázar, el cual fue casi totalmente destruido durante su sitio y reconstruido posteriormente para albergar el museo del asedio, siendo hoy día el museo del Ejercito tras trasladarlo desde Madrid. Desde allí nos desplazamos a la plaza magdalena para descubrir con la ayuda de nuestra guía un trampantojo, una técnica utilizada en varios edificios de la ciudad.
Otro recorrido corto hasta la plaza mayor donde se ubica el teatro de rojas construido sobre el antiguo corral de comedias y llamado así en honor del dramaturgo toledano Francisco de Rojas. La catedral de Toledo tiene una esquina que da a esa plaza y en esa parte pudimos apreciar grafitis antiguos de estudiantes realizados en sus paredes. Rodeamos la catedral pasando delante de la puerta de los leones y de la puerta llana para acabar en la plaza del ayuntamiento donde además de encontrarse dicho edificio esta también los juzgados, el palacio arzobispal y la catedral con su impresionante portada de tres puertas, lo curioso de la catedral es que solo tiene una torre por lo visto se desistió construir otra por el tema de la cimentación.
Nos adentramos en el antiguo barrio judío acabando la ruta en el mirador del paseo de San Cristóbal con una explicación sobre la judería en la época medieval. El tour que dura de hora y media a dos horas fue para mí una buena introducción a la ciudad de Toledo.
Como no tenía el siguiente tour hasta las 22.00 decidí seguir callejeando por mi cuenta. La verdad lo de caminar por Toledo es una gozada porque muchas calles son tan estrechas que no pueden ser recorridas por los coches y eso permite apreciar la arquitectura de las distintas casas lo malo son las numerosas subidas y bajadas como me dijo un guía en el caso viejo de Toledo no hay ningún gimnasio porque sus habitantes no lo necesitan. Me apetecía ver la muralla de Toledo por lo tanto me dirigí hacia el norte pasando cerca del monasterio de San Juan de los reyes pensando que era otra iglesia mas, puesto que Toledo tiene muchos templos para la superficie que posee la ciudad histórica y llego a tener muchos más me dijeron. Alcance la puerta del Cambrón, desafortunadamente estaba tapada por unos andamios supongo que la estaban restaurando por lo tanto seguí la muralla hacia el este, pase delante de la puerta de Alfonso VI o puerta de bisagra vieja, entrada principal a la ciudad durante la época musulmana.
Como no tenía el siguiente tour hasta las 22.00 decidí seguir callejeando por mi cuenta. La verdad lo de caminar por Toledo es una gozada porque muchas calles son tan estrechas que no pueden ser recorridas por los coches y eso permite apreciar la arquitectura de las distintas casas lo malo son las numerosas subidas y bajadas como me dijo un guía en el caso viejo de Toledo no hay ningún gimnasio porque sus habitantes no lo necesitan. Me apetecía ver la muralla de Toledo por lo tanto me dirigí hacia el norte pasando cerca del monasterio de San Juan de los reyes pensando que era otra iglesia mas, puesto que Toledo tiene muchos templos para la superficie que posee la ciudad histórica y llego a tener muchos más me dijeron. Alcance la puerta del Cambrón, desafortunadamente estaba tapada por unos andamios supongo que la estaban restaurando por lo tanto seguí la muralla hacia el este, pase delante de la puerta de Alfonso VI o puerta de bisagra vieja, entrada principal a la ciudad durante la época musulmana.
Llegando a la monumental puerta nueva de bisagra, la cual está formada por dos cuerpos independientes con dos altos muros almenados que los unen, formando un patio entre ellos, en cuyo interior se halla una estatua de Carlos V.
A ambos lado de la puerta hay dos entradas para vehículos que se han hecho en la muralla que desgraciadamente le quitan "rigor histórico". Desde allí ascender por la calle real del arrabal pasando bajo la puerta del sol y la puerta de Alarcones hasta llegar a la plaza Zocodover y buscar un sitio donde cenar y descansar.
Algo antes de las 22.00 toco estar de nuevo presente en la plaza Zocodover para presentarse ante el guía. Por lo que vi tenían un listado con la gente apuntada, por mi parte como hice la reserva por email estaba apuntado en todos los tours pero me consta que gente que no tenían reservado el tour e intentaron unirse a última hora se vieron rechazados, lo que no está mal porque aunque los grupos eran numerosos el límite de personas era tal que el guía podía abarcar a todos, lo divertido es que coincidí en varios tours con las mismas personas. De hecho en un par de tours nocturnos hubo dos grupos montados desde el inicio. Para el tour sobre templarios y Leyendas nos toco como guía a Samuel, el cual empezó con una introducción sobre el tour en la misma plaza Zocodover, a continuación nos trasladamos al mirador del Alcázar ubicado frente a la academia militar de infantería, de hecho Samuel vio interrumpida brevemente su explicación por el toque de retreta. Las siguientes etapas del recorrido fueron la parroquia de San Miguel, plaza del seco, el callejón del toro y acabamos cerca de las doce de la noche en la plaza del ayuntamiento.
Algo antes de las 22.00 toco estar de nuevo presente en la plaza Zocodover para presentarse ante el guía. Por lo que vi tenían un listado con la gente apuntada, por mi parte como hice la reserva por email estaba apuntado en todos los tours pero me consta que gente que no tenían reservado el tour e intentaron unirse a última hora se vieron rechazados, lo que no está mal porque aunque los grupos eran numerosos el límite de personas era tal que el guía podía abarcar a todos, lo divertido es que coincidí en varios tours con las mismas personas. De hecho en un par de tours nocturnos hubo dos grupos montados desde el inicio. Para el tour sobre templarios y Leyendas nos toco como guía a Samuel, el cual empezó con una introducción sobre el tour en la misma plaza Zocodover, a continuación nos trasladamos al mirador del Alcázar ubicado frente a la academia militar de infantería, de hecho Samuel vio interrumpida brevemente su explicación por el toque de retreta. Las siguientes etapas del recorrido fueron la parroquia de San Miguel, plaza del seco, el callejón del toro y acabamos cerca de las doce de la noche en la plaza del ayuntamiento.
El barrio de San Miguel no es que digamos muy turístico y a esas horas no había nadie por la calle, realmente Toledo por la noche parece otra ciudad puesto que muchas turistas no pernotan y es un ambiente muy distinto, le comentaba a un guía que con sus calles estrechas y desiertas parecería que estábamos en cualquier pueblo de España. En cuanto al tour fue interesante con el tema de los Templarios involucrados en España por el tema de la guerra contra los musulmanes y como se fueron instalando en Toledo, por el lado de las leyendas Samuel nos resumió el Cristo de la calavera de Gustavo Adolfo Bécquer, el Cristo de las cuchilladas, el pozo amargo, el origen de la expresión "noche Toledana" y muchas más. Los fines de semana me parece que esta ruta es teatralizada e incluso se asiste a un simulacro de un duelo.
Cuando se disolvió el grupo cerca de la catedral volví al hotel y caminando a tal altas horas de la noche, solo por esas calles estrechas tuve la extraña sensación que en cualquier esquina podía aparecer un espadachín del siglo XVI o XVII dispuesto a retarme.