Llegamos a la otra joya de la corona de Palau: el atolón Kayangel. No muchos turistas llegan hasta aquí porque solo hay dos empresas de tours que organizan el tour diario. Nosotros pillamos el tour diario, nos quedamos ahí dos noches, y volvimos con la barca del tour del día de vuelta. En total pagamos (con comida incluida los 3 días) 550$ los dos.
Kayangel nos impresionó. Un atolón de coral en el medio del Pacífico donde no viven más de 50 personas, que comen de lo que pescan en el día, y tienen poco más que hacer. Un tifón se llevó casi todo por delante hace 4-5 años, y los isleños no quisieron evacuar su isla de ninguna forma.
Estuvimos 2 noches y 3 días en total, en casa de Lazarus, uno de los rangers que protegen la vida marina y la naturaleza del atolón que está en aguas protegidas. Nos contó mil historias de cazadores furtivos y demás, y su mujer cocinó para nosotros también arroz y pescado.
Hicimos la isla/atolón a pie entera, y en un lado, íbamos por la playa, pies en el mar, cuando vimos pasar tiburones bebé a tope por nuestro lado

El AZUL:


















