Decimos adiós a la zona de Puerto Viejo y nos dirigimos a Tortuguero, para ello tuvimos que dejar el coche aparcado en el embarcadero de La Pavona y coger un barco que te lleva a Tortuguero, dado que al ser una isla solo se puede acceder por agua.
El aparcamiento se paga en la entrada por días y está al aire libre pero vigilado. Nosotros habíamos reservado la barca desde España y una de las trabajadoras nos dijo que lancha teníamos que coger.
Ya en Tortuguero, dimos una vuelta por el pueblo y sus playas (que son preciosas pero no se puede nadar en ellas por estar plagadas de tiburones y de corrientes fuertes). Nos fuimos a dormir pronto porque teníamos el tour reservado para el día siguiente muy temprano.