Hola. Os cuento experiencias en restaurantes (y gastronomía en general) del viaje que hemos hecho entre final de Agosto y principios de Septiembre por Normandía (y continuo luego en los hilos de Bretaña, Loira, ...). Ante todo, para cumplir con la longitud mínima de este tipo de post, un rollo/comentario general :
- En las comidas, como en otras circunstancias del viaje, hay que intentar adaptarse a la idiosincracia local. En Francia, en general, y en Normandía y Bretaña, en particular, una de las adaptaciones que mas nos cuesta a los sufridos turistas patrios es el horario : pretender pedir mesa para comer a mediodía a partir de las dos y media y cenar por la noche a partir de las nueve y media, nos llevará (en casi todos los casos, en todos en poblaciones pequeñas) a que nos miren como si acabáramos de bajar de una nave extraterrestre o con una mirada de sorna de ... Ya están aquí los españoles. Y a tener que ir mendigando algo que llevarse a la boca tras varias negativas.
Hay que intentar adaptarse rápidamente, si pretendemos ir a restaurantes y locales de servicio en mesa que no estén en los destinos "top" turísticos, donde hay algunos que intentan ampliar horarios para atender a los tardones. Pero en poblaciones pequeñas, esta recomendación general se convierte en sine qua non y es necesario llegar a mediodía en torno las 13,00 h y por la tarde sobre las 19,30-20,00 h. Y en algunos núcleos poco turísticos y con pocas alternativas de restauración, si se adelanta algo sobre el horario anterior mejor.
Nosotros comenzamos la ruta con dos noches tardías (por circunstancias del viaje y porque comíamos no muy pronto a mediodía y a esas horas de merienda como que no apetecía ...) y tras las peripecias y los rechazos, adaptamos el biorritmo para ir picoteando algo durante el día (por otro lado, aprovechas mejor el tiempo) y cenar muy pronto : sobre las 19,00-19,30 h. Hemos comenzado a cenar/merendar en varios sitios (en algunos, fuimos los primeros en el restaurante). Tampoco se trata de llegar a tales extremos si las fuerzas os aguantan como para seguir turisteando y aprovechando las horas de luz. Pero una opción recomendable es cenar pronto y luego seguir paseando, rebajando la cena y disfrutando del entorno a un ritmo mas tranquilo.
- Otra de las adaptaciones recomendables, si no se cuenta con una cartera sin fondo, es controlarse a la hora de pedir bebidas. Los precios de casi todo lo que lleve alcohol en Francia son prohibitivos, comparados con lo que pagaríamos por algo similar aquí. El equivalente a un doble de cerveza sale por entre 4-6 euros en la mayoría de locales; una pinta o similar, entre 8-10 euros; el vino, mas caro que el Channel nº 5, a partir de veintitantos euros los de cosecha y por encima de treinta los que tengan algo de crianza. Y si se te ocurre darte un capricho y probar algo de licores espirituosos locales (ya que estás en la tierra del Calvados ...), un dedo en una copa enorme te sale por mas de diez euros en cuanto te descuides. Lo anterior es una referencia general, yo he tomado bebidas mas baratas en algunos sitios escogidos. Pero para ubicarse ...
Lo único con alcohol que tiene un precio equiparable y asumible es la sidra : en los restaurantes donde hemos estado, hemos tomado botellas de sidra por entre 9,60-15,00 euros, dependiendo del tipo de local, de la calidad de la sidra, ... Si os gusta, es una opción muy recomendable y típica a mas no poder. Las que son "brut" son menos dulces, combinan mejor con la mayoría de gastronomía local y suelen ser de mejor calidad. Y en algunos locales tienen también jarritas o recipiente similares de sidra no embotellada ("pichets"), que salen algo mas económicos.
No obstante, si no os gusta la sidra o queréis controlar mas el coste, las particularidades locales salen en tu ayuda : la famosa "carafe d'eau" ("carafdó" en francés/tarzán). En Francia, desde 1967, los restaurantes y locales que sirven comidas están obligados a servir agua del grifo incluida en el precio
www.economie.gouv.fr/ ...erre-d-eau . Es lo que toman la mayoría de comensales y en muchos te la ponen incluso sin pedirla (aunque en otros dejan que el turista caiga en su inercia y pida una "bouteille d'eau" para aprovecharse y cobrar algunos euros mas). En casi todos los locales, estas botellas de agua del grifo está refrigerada y preparada en mesas auxiliares para ir sirviendo. Y por esta zona, con muy buen sabor (en alguna ciudad grande se nota algo mas la clorificación de la red, pero por Normandía y Bretaña suele ser muy similar al agua mineral embotellada).
- Y otro tema en el que conviene adaptarse a la idiosincracia local para estirar el bolsillo y que dure hasta el final del viaje es ir buscando las opciones de menú ("formule" en francés) que ofrecen casi todos los restaurantes. En general, estos menús especiales se suelen ofrecer tanto a mediodía como por la noche, aunque en algunos sitios con precios diferentes, algo mas caros por la noche. Pero para cenar todavía encuentras menús muy interesantes y no como aquí en España, que muchos restaurantes que tienen menú a mediodía, ni se plantean ofrecer algo similar por la noche.
Como es lógico, los precios varían dependiendo de la categoría y de la ubicación del local (mas o menos turística), pero se pueden encontrar menús por la noche por menos de 15 € con plato principal y postre o primer plato y segundo plato (con primero+segundo+postre, por menos de 20 €). Y en restaurantes de mas nivel o sitios turísticos, los menús pueden estar entre 22-24 € con plato + postre o por algo menos de 30 € con primero+segundo+postre. Incluso en locales con pretensiones gastronómicas, te puedes dar un capricho y probar la "nouvelle cuisine française" (o asín) con menús sobre 32-35 €.
Desde luego, lo mas económico en la zona (y en otras zonas, en general) son las creperías. Hay por todos lados, algunas con muy buena calidad y elaboración. Y con una galette por 7-9 € y un crêpe por 6-8 € para compartir, con carafe d'eau, puedes salir por menos de 12 € por persona. Pero no es la única opción para controlar el gasto gastronómico.
- Otra recomendación recomendable, si queréis ir a algún restaurante en concreto, es reservar con antelación si viajáis en plena temporada turística. Nosotros no teníamos ninguna elección predeterminada inexcusable en este viaje. Y como mi nivel de francés da como para señalar con el dedo y no morirme de hambre o de sed, pero no para mantener una conversación telefónica, ni reservábamos ni nos parábamos a pedirle al personal de recepción de los hoteles que nos hiciera una reserva, silvuplé. Pudimos cenar en todos los sitios (sobre todo, cuando tomamos la determinación de ir a horario de merienda), pero en alguno nos hubiera apetecido probar alguna recomendación del foro que, como la mayoría de lo recomendable, estaba lleno cuando llegábamos "sans réservation".
Una vez soltado el rollo de rigor, os comento experiencias concretas : en
Étretat, tras la imposibilidad de reservar en Rouen y el cambio de destino sobre la marcha
www.losviajeros.com/ ...33#6250233 , comenzamos a buscar un sitio para cenar sobre las nueve menos cuarto ... En plan after.
En el foro, no había muchas experiencias en restaurantes aquí (las que encontré de Bretaña y Normandía están en este mapa
drive.google.com/ ...sp=sharing ). Pero de lo que había buscado con antelación en las webs de referencia, tenía anotada "La Marie Antoinette"
www.marieantoinette-etretat.fr/es/ como una opción recomendable para comenzar el viaje dándose un homenaje de marisco a precio razonable. El problema es que el adelanto de un día sobre el itinerario inicial previsto, hizo que llegáramos a Étretat en miércoles, cuando este restaurante cierra por descanso semanal (aunque en su web en castellano pone que cierra miércoles y jueves, habíamos visto en otras webs y pudimos comprobar al día siguiente que el jueves si que estaba abierto). Echamos un vistazo, por si el lío este de horarios o las fechas estivales había hecho que hubieran cambios en el horario habitual. Pero estaba fermé.
La siguiente opción, para comenzar con la cata de creperías típicas y precios razonables, era "Lann-Bihoué"
www.etretat-lannbihoue.fr/ . Pero, lo que comentaba al principio, cuando llegamos sobre las nueve menos algo nos miran como si les hubiesemos pedido que nos den lo que tengan en la caja y nos dicen que lo tienen todo lleno y que ni se plantean que esperemos a que se vacíe alguna mesa para sentarnos, que cierran la cocina pronto. Por si sirve, dejo las dos opciones por si a alguien le apetece uno de los dos planes.
De aquí, nos vamos al "Restaurant La Taverne des Deux Augustins" que tenía anotado con una experiencia anterior de cuca691
www.losviajeros.com/ ...hp?e=60788 y cuando vamos entrando (tardísimo, muy cerca de las nueve ya), sale un camarero desde el fondo como si estuviera jugando al rugby americano y estuviese intentando placar al que viene con la sandía bajo el brazo y, moviendo las manos, nos dice que "fermé, fermé, ...". No tenían muchas mesas ocupadas y, aunque en su web ponía que estaban abiertos hasta las 22,00 h.
www.les2augustins.com/ ...retat.html , parece que querían irse pronto tras despachar a los que ya tenían y no querían comenzar a servir a estas horas.
Ya en plan desesperado y tras dar una vueltecita física por la zona de restaurantes y virtual por la red para ver opciones (e ir descartando varias), nos vamos a
"La Salamandre" www.hotels-etretat.com/ ...mandre.htm , enclavado en un edificio muy interesante (para fotografiar desde fuera y desde dentro), del que había leído críticas para asustar y ni acercarse, pero recordaba una que decía que su mayor virtud es que daba de cenar hasta tarde. Y ante las opciones que teníamos ...
Aquí no nos ponen pegas e incluso vemos llegar varias mesas después de nosotros. Tienen varias salas interiores y una terraza exterior con tarima sobre la calle. Pero la brisilla del mar se nota y preferimos sentarnos dentro. Como decía, lo mejor del sitio es el continente : tanto la sala interior donde nos sentamos como el exterior (del que tomamos fotos al día siguiente) es muy interesante, con estructura de madera vista, ménsulas esculpidas, ...
Por lo que pude leer cuando preparaba el viaje, se trata de un edificio histórico construido en 1912 utilizando en gran parte la anterior estructura de una mansión demolida en Lisieux. Tanto la historia del traslado como algunas de las tallas en madera tienen detalles curiosos, por si a alguien le interesa
portail-rennes-le-chateau.com/ ...alamandre/
En la carta (si a alguien le interesa, podéis ver fotos de la misma aquí
www.dropbox.com/ ...t.rar?dl=0 ), hay alguna opción para poder salir del paso a precio razonable. Por ejemplo, las típicas moules con patatas fritas o ensalada van desde los 14,50 hasta los 17,90 €. Pero el menú sale por 34 € y los platos principales comienzan en 18,50 € el mas económico y llegan hasta 32 €. También hay opciones de marisco a precios todavía mas prohibitivos.
En nuestro caso, dejándonos llevar por el entorno y por la euforia de poder cenar después del susto, nos decidimos por probar algo de gastronomía de pescado local y pedimos "Morue a la Cauchoise" (24 €, había leido que era una receta típica normanda) y "Thon snacké en croûte de sésame" (26 €, atún rebozado, para entendernos). La morue (bacalao) está muy bueno; el atún no tanto, un filete de atún rebozado con patatas sin mucha gracia no justifica lo que cuesta. Comenzando la cata comparativa, pedimos Sidra brut fermier (de granja, en traducción literal, aunque se entiende como artesanal) y nos sacan "Domaine des Cinqs Autels", una sidra bio normanda que está muy buena
www.cinqautels.com/ (14,90 €) . Y de postre, preguntamos por la tarte du jour, nos dicen "aux pommes" (manzanas, mas típico imposible) y también bastante buena (aunque 9,00 € por una ración como la de la foto es un exceso).
Nos costó 73,90 € (59,00 € si nos hubiéramos apañado con la carafe d'eau y no hubiéramos pedido la sidra).
En lo propiamente gastronómico, el sitio no está tan mal como algunas críticas harían suponer, en mi opinión. El bacalao estaba muy bueno y justificaba su precio, teniendo en cuenta que estamos en Francia y en restaurante turístico a tope. El resto no, para lo que cuesta. Y creo que ese es el problema a la hora de valorarlo, que lo que comes, en conjunto, no justifica el importe total de la cuenta.
Pero el entorno donde cenas está muy bien. Y aunque no sería una de las primeras opciones a recomendar (sobre todo, por su relación calidad/precio) si una noche llegas tarde a Étretat y te quieres ahorrar el vía crucis de ir de negativa en negativa por otros sitios, tampoco es una opción a descartar, si vas avisado y eliges con criterio de la carta.