Nos vamos la semana que viene a Tahilandia y una vez lleguemos nos gustaría hacer una ruta por el norte (Ayuttaya, lampang, pitsanulok...) hasta llegar a Chiang Mai. Estabamnos buscando algún guia o alguien que nos conduciera para que pudieramos hacer esta ruta.
Alguien tiene algún guia conocido que pueda aconsejarnos????
Nurieta!!!!! Qué recuerdosssss
Suscribo TODO lo que dices!! El año pasado visitamos Tailandia. Partiendo desde Bangkok subimos hacia Ayuthaya, Lopburi, Chiang Rai y Chiang Mai. Simplemente, brutal. Y también fuimos a Krabi, nosotros a Rayavadee. Es tan fantástico que no lo puedo describir. Sólo deciros que este año hemos vuelto (como extensión de Vietnam hemos hecho Bangkok y Krabi, repitiendo hotel). Y el año que viene, ya a saco, Tailandia otra vez, sin complejos por repetir.
Realmente es la tierra de la sonrisa. Y no es fácil olvidar el nadar con peces, pero tampoco un atardecer en Railay.. Y qué decir de Phra Nang, con su preciosa cueva de la princesa.
A mí esta tierra me ha robado el corazón. Hace dos semanas justas que volví, y todavía no me he repuesto...
PD: Nurieta, si vuelves, hazlo con Singapore Airlines. Sale más, barato, más cómodo, aviones más nuevos y DESDE BARCELONA!!! Yo ya fui con Thai el año pasado, y esta vez nos ha ido mejor.
Hola vikeva. En el foro se ha hablado mucho de viajetailandia.com. Yo voy la semana que viene con ellos, son muy apañados. Visita su pagina web y les pones un correo electronico con lo que quieres (hablan y escriben español muy bien).
Un saludo,
Indiana Jones Registrado: 11-11-2007 Mensajes: 3421
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ibiza1966 Escribió:
Mas o menos a 49 , pero no te lo puedo confirmar , menos en los hoteles que es algo peor , en el resto de sitios es similar.
Muchísimas gracias, Ibiza. Sólo una cosa más: en la excursión de Ayuthaya, la visita a las ruinas era en el bus, o te dejan a tu aire para que lo hagas en bici o en tuktuk o como quieras? Se ven bien todos los templos típicos? Estoy planteándome coger la misma excursión que tú pero quiero asegurarme de que se ve todo bien
Saludos.
Mas o menos a 49 , pero no te lo puedo confirmar , menos en los hoteles que es algo peor , en el resto de sitios es similar.
Muchísimas gracias, Ibiza. Sólo una cosa más: en la excursión de Ayuthaya, la visita a las ruinas era en el bus, o te dejan a tu aire para que lo hagas en bici o en tuktuk o como quieras? Se ven bien todos los templos típicos? Estoy planteándome coger la misma excursión que tú pero quiero asegurarme de que se ve todo bien
Saludos.
Veras, el autobus para , y te bajas con el guia , el te va explicando las cosas mas importantes , es un recorrido a pie , así que no te pierdes nada de lo mas importante , mientras tanto también puedes aprovechar para las fotos de rigor , para que te hagas una idea , es un par de paradas donde esta todo muy concentrado , no se si has estado en la riviera maya , pero es como si te vas a ver las ruinas de Tulum.
Indiana Jones Registrado: 11-11-2007 Mensajes: 3421
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ibiza1966 Escribió:
Veras, el autobus para , y te bajas con el guia , el te va explicando las cosas mas importantes , es un recorrido a pie , así que no te pierdes nada de lo mas importante , mientras tanto también puedes aprovechar para las fotos de rigor , para que te hagas una idea , es un par de paradas donde esta todo muy concentrado , no se si has estado en la riviera maya , pero es como si te vas a ver las ruinas de Tulum.
Genial, gracias, tenía dudas porque como hay gente que dice que andando es una paliza y que casi mejor coger bici o alquilar tuktuk... Pero si es como Tulum se puede hacer andando sin problemas
Indiana Jones Registrado: 11-11-2007 Mensajes: 3421
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evarp1973 Escribió:
Aunque ya hace dos meses que estuvimos, y como a mi me fue de mucha ayuda el foro (por cierto, gracias a todos por la información tan buena que colgais), os pongo este enlace a mi relato de viaje por tailandia.
Espero que alguien le pueda ser útil.
El viaje, aunque organizado con menos de un mes, salio perfecto y seguro que volvemos a Tailandia en algun momento (tampoco pronto, que hay otros muchos lugares del mundo por conocer)
Gracias de nuevo a todos los foreros, sobre todo a los habituales, por su ayuda.
Si alguien tiene alguna pregunta, intentare contestarle, aunque no dispongo de mucho tiempo libre...
Muchas gracias por el relato, es muy útil. Quería preguntarte por un detalle, dices que buscabas zapatillas Converse en el MBK y en tiendas de deporte, es fácil encontrarlas? Hay variedad? Te acuerdas de los precios?
Yo también tengo idea de comprarlas y no sabía si sería mejor buscarlas en centro comercial o en mercadillo tipo Chatuchack...
Y otra cosa, dices lo del buceo con tiburones en el acuario del Siam Paragon, yo lo había oído pero estoy indecisa. Sabes cuánto dura, si merece la pena, el precio, etc? La verdad es que sería interesante
Aunque ya hace dos meses que estuvimos, y como a mi me fue de mucha ayuda el foro (por cierto, gracias a todos por la información tan buena que colgais), os pongo este enlace a mi relato de viaje por tailandia.
Espero que alguien le pueda ser útil.
El viaje, aunque organizado con menos de un mes, salio perfecto y seguro que volvemos a Tailandia en algun momento (tampoco pronto, que hay otros muchos lugares del mundo por conocer)
Gracias de nuevo a todos los foreros, sobre todo a los habituales, por su ayuda.
Si alguien tiene alguna pregunta, intentare contestarle, aunque no dispongo de mucho tiempo libre...
Muchas gracias por el relato, es muy útil. Quería preguntarte por un detalle, dices que buscabas zapatillas Converse en el MBK y en tiendas de deporte, es fácil encontrarlas? Hay variedad? Te acuerdas de los precios?
Yo también tengo idea de comprarlas y no sabía si sería mejor buscarlas en centro comercial o en mercadillo tipo Chatuchack...
Y otra cosa, dices lo del buceo con tiburones en el acuario del Siam Paragon, yo lo había oído pero estoy indecisa. Sabes cuánto dura, si merece la pena, el precio, etc? La verdad es que sería interesante
Las Converse solo las vimos en el MBK, en el Siam Paragon y en el Siam Discover y en tiendas de deporte (en Silom hay varias). En mercadillos no. Por eso llegamos a la conclusion de que son autenticas, aparte de que vienen con caja, embalaje y etiqueta perfectas. El precio de las botas normales (de lona) era de uno 750 bahts y de las zapatillas unos 650 bahts. Si las quieres de piel, eran mas caras, pero vamos, nada que ver con los precios de aquí. Variedad si que habia, aunque colores no tantos como aquí.
Lo del buceo, creo que si debe merecer la pena. A nosotros nos dio mucha pena no haberlo sabido. Por lo visto en el acuario de Barcelona hay algo parecido, pero el doble de precio. No estoy segura, pero creo recordar que eran como 150€. Creo que tengo un folleto de esta actividad, si lo encuentro te lo mando. Tenia muy buena pinta...
Aquí puedes ver algo: www.siamoceanworld.co.th/ ...sharks.htm
Y aquí un video que ha colgado alguien (te hacen un dvd y todo con la inmersion) es.youtube.com/watch?v=Alj8W-XuEq4
Indiana Jones Registrado: 11-11-2007 Mensajes: 3421
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evarp1973 Escribió:
Las Converse solo las vimos en el MBK, en el Siam Paragon y en el Siam Discover y en tiendas de deporte (en Silom hay varias). En mercadillos no. Por eso llegamos a la conclusion de que son autenticas, aparte de que vienen con caja, embalaje y etiqueta perfectas. El precio de las botas normales (de lona) era de uno 750 bahts y de las zapatillas unos 650 bahts. Si las quieres de piel, eran mas caras, pero vamos, nada que ver con los precios de aquí. Variedad si que habia, aunque colores no tantos como aquí.
Lo del buceo, creo que si debe merecer la pena. A nosotros nos dio mucha pena no haberlo sabido. Por lo visto en el acuario de Barcelona hay algo parecido, pero el doble de precio. No estoy segura, pero creo recordar que eran como 150€. Creo que tengo un folleto de esta actividad, si lo encuentro te lo mando. Tenia muy buena pinta...
Aquí puedes ver algo: www.siamoceanworld.co.th/ ...sharks.htm
Y aquí un video que ha colgado alguien (te hacen un dvd y todo con la inmersion) es.youtube.com/watch?v=Alj8W-XuEq4
Gracias
Ayer me puse yo a indagar y ya encontré la web, son 5300B si tienes más de 10 inmersiones, es más caro si no tienes experiencia en buceo. Nosotros haremos un par de días de buceo en Ko Tao, si nos sabe a poco igual nos animamos a lo de los tiburones
Día 8 (14 de Mayo) Bangkok
Para seguir con la tradición hoy volvemos a madrugar con la idea de disfrutar de nuestro último día en Bangkok. Con el planning ya hecho cogemos el sky train para ir a visitar la casa de Jim Thompson. Tener en cuenta que dentro del sky train el aire acondicionado está a tope. Puedes coger un bono de día pero creemos que nos va a salir mejor comprar cada viaje el ticket. Pagas en función del trayecto que vas a hacer y hay que guardar el ticket ya que lo tienes que volver a usar al salir de la estación en los tornos. Nos montamos en la parada que están junto a nuestro hotel y nos bajamos en la última parada de una de las dos líneas que tiene. Cuando nos bajamos no tenemos claro para donde tenemos que ir pero por suerte un chico con un tuctuc nos indica el camino. Sin problemas llegamos a la casa museo de Jim Thompson. Mientras esperamos que llegue la hora de que nos hagan la visita guiada en inglés (no se puede hacer por libre) damos un paseo por los jardines. Por suerte a la guía se le entiende bastante bien y disfrutamos de las medía hora de visita. Nos gusta mucho la visita, la verdad es que merece la pena. De ahí vamos a la tienda de Jim Thompson que está junto a la vivienda. La tienda me decepciona un poco, los diseños de los pañuelos de seda no me acaban de convencer y había muchos productos de algodón, además nada baratos. Al final me doy el capricho y me compro una especie de bufanda tejida con seda.. Mientras estamos en la tienda empieza a jarrear con sólo puede hacerlo en Tailandia. Y como a grandes males grandes remedios nos vamos a tomar algo a la cafetería-restaurante también del museo. No sé cuanto estuvimos esperando a que parase, porque está vez no llevábamos paraguas ni chubasqueros, pero tampoco fue demasiado y no se estaba nada mal en la terracita enfrente de un estanque.
Cuando medio paro de llover volvimos a la parada del sky train para poner rumbo a la zona de los centros comerciales. El tren para justo en la entrada del centro comercial Siam Paragon que es digno de ver. Es un centro comercial de auténtico lujo, en la primera planta están todas las tiendas de diseñadores, Dior, Gucci, Armani…En otra planta venden coches, pero no cualquier coche sino ferraris, porches… Vamos para flipar. Parece mentira los contraste de esta ciudad, ayer estábamos navegando entre casa cochambrosas y hoy estamos rodeados de tiendas de lujo. Estamos un ratillo dando vueltas por ahí y cuando salimos decidimos coger un taxi para que nos lleve a la Bayoke. Es nuestra primera toma de contacto con el tráfico y la forma de conducir de Bangkok. Le decimos que nos ponga el taxímetro y lo pone sin pegas, prueba superada. Yo creo que es la hora de más tráfico y los carriles, por lo menos 4 en cada sentido, pero el taxista es un artista y en nada estamos en la puerta de la torre y encima tirado, no lo recuerdo bien, pero creo que fueron menos de dos euros.
Llegar a la planta donde esta el restaurante nos costó un poco, aunque no tenía ninguna complicación. Primero te dejan en una planta y ahí hay que comprar el ticket para el restaurante y con este ticket ya puedes subir en otro ascensor para llegar arriba. El ticket costaba, si no recuerdo mal, unos 17€. Lo primero que hicimos es comer. El buffet es variado, comida oriental y occidental, pero la calidad no es para tirar cohetes y más teniendo en cuenta que para ser Tailandia el menú es caro. Sinceramente creo que no merece la pena comer ahí y más pudiendo hacerlo en el MBK que está tan cerca. Lo que sí merece la pena son las vistas que hay desde el mirador. Parece mentira que todos esos rascacielos estén en la misma ciudad que las casitas de los canales, pero así es Bangkok un ciudad de contrastes.
Después de estar un ratillo contemplando las vistas cogimos otro taxi para ira al MBK.
Ahí aprovechamos a mandar unos correos ya que hay Internet a muy buen precio. Y dimos una vuelta por el famoso centro comercial. Hay tiendas y tiendillas, la verdad es que de ahí se puede salir uniformado para todo el viaje. Como ya comenté nosotros no somos de comprar así que no os puedo decir como están los precios, eso sí había muchas cosas que ya habíamos visto en el mercadillo de Chiang Mai.
Después de un ratillo por ahí mi idea era ir a ver el wat Erawan pero mi marido estaba ya cansado y todavía teníamos que preparar las maletas así que nos quedamos sin verlo. Al hotel volvimos en el sky train que nos resultó de lo más cómodo.
Tocaba preparar las maletas, la verdad es que esa ha sido la peor parte del viaje pero ya nos hemos convertido en unos expertos. Mientras en la calle empieza a llover.
Nuestra idea era ir a ver el hotel Oriental antes de cenar que se supone que estaba cerca de nuestro hotel pero la verdad es que jarrea de lo lindo así que con pena nos quedamos sin verlo. Esa noche cenamos en el Restaurante Maria. Está en la misma acera que la State Tower yendo hacía patpong. Comimos muy bien y a buen precio. Hay para elegir entre comida occidental y tailandesa y el ambiente es como de restaurante Italiano. Mientras en la calle sigue lloviendo. Ya estábamos pensando que nos íbamos a quedar sin tomarnos nuestra copa en el Sirocco pero por suerte por fin para. Así que nos vamos para ahí.
Cuando llegamos casi no hay gente, supongo que por la lluvia porque son alrededor de las 10, así que disfrutamos de las impresionantes vistas, tanto de la ciudad como del sitio, mientras nos tomamos unas copas. Nos cuestan alrededor de 7€ cada una pero aunque son caras merecen la pena. Poco a poco va llegando más gente y empiezan a poner las mesas para cenar y la orquesta empieza a sacar los instrumentos. La verdad es que más vale que no reservamos cena ahí porque nos llovió las cuatro noches y tiene que ser una faena que te pasé mientras estés cenando. Disfrutamos de lo lindo del sitio pero ya era tarde y no nos quedó otra que marcharnos. Eso sí con mucha pena.
Nos encantó Bangkok, ya por conocer está ciudad merece la pena el viaje, y como se nos quedaron cosas por ver ya tenemos excusa para volver.
Día 9 (15 de Mayo) Bangkok-Siem Reap / Angkor
Por fin un día que no nos toca madrugar demasiado!! Cogemos el vuelo rumbo a Siemp Reap a las 11 así podemos dormir un poco más de lo habitual. En el camino al aeropuerto nos acompaña un chico que trabaja para Travex, que es la agencia con la que el Corte Ingles ha organizado toda la estancia en Tailandia. Es un estudiante de castellano y un entusiasta de nuestro país, aunque nunca a estado ahí. Agradece que le demos conversación y aprovecha y aprovechamos a conocer más cosas de los dos países, así que el viaje al aeropuerto se nos hacer cortísimo. Esta vez al ir a salir de Tailandia toca pasar por un control de pasaportes donde te quitan el papel que te ponen en el pasaporte al llegar. Por fin no nos toca esperar demasiado en un aeropuerto y a las 11 ponemos rumbo a Camboya en un miniavión de hélices de lo más colorido de Bangkok airways. El viaje dura una hora y media y la ventaja de ir en este tipo de aviones es que no cogen demasiada altura con lo que se ve muy bien el paisaje. Conforme nos acercamos a Camboya este va cambiando a más llano y con menos vegetación con zonas inundadas, suponemos que para cultivar arroz. Es curioso el contraste con el paisaje montañoso del norte de Tailandia. El aeropuerto de Siem Reap es muy bonito, se ve que es bastante nuevo.
Lo primero que hay que hacer cuando llegas a Camboya es el visado. Se necesita una foto de carné y 20 dólares. Nosotros los llevamos de España pero había gente que no los llevaba y tuvieron problemas hasta que consiguieron que la policía les dejase “entrar” al país a cambiar dinero. Lo del visado es de lo más curioso. Tu pasaporte pasa por de mano en mano de unos 10 funcionarios hasta que te lo dan. Total tanto mirar y mirar para que me cambiasen mi apellido, me pusieron como primer apellido el que es mi segundo, vamos el de mi madre, en fin. No me di cuenta hasta más tarde y como el papel del visado se supone que no lo vuelven a leer no tuve ningún problema con eso. En el aeropuerto se puede cambiar dinero a la moneda local pero nosotros nos quedamos con los dólares que llevábamos y no tuvimos problemas en ningún sito, creo de hecho que los camboyanos prefieren que les pagues en dólares. Eso sí puede darse el caso en el que luego ellos te devuelvan en moneda local pero como estamos hablando de cantidades muy pequeña no es ningún problema.
A la salida del aeropuerto nos espera Kong con nuestro transporte, un todoterreno bastante apañado. Tener un coche en Camboya para los camboyanos es casí imposible así que todos viajan en moto o en bicicleta, casitodas de segunda manos, sí las bicis también. Y los taxis aquí son siempre tuc-tucs pero diferentes a los de Tailandia, estos son una moto con un carro enganchado detrás.
Del aeropuerto fuimos directamente al hotel, el Sofitel Angkor. Totalmente recomendable aunque no está cerca del centro de Siem Reap. Las habitaciones son muy amplias y las instalaciones están muy bien, sobretodo si vas en temporada baja como nosotros, ya que los días que estuvimos estábamos casi solos en la piscina. El restaurante tipo buffet no me gustó tanto pero en el francés se come de lujo. Lo desayunos estaban muy bien.
Mientras Kong nos gestionaba la reserva nosotros esperamos con las toallas frías y un té. La verdad es que esto de las toallas frías son un invento y las agradecimos mucho más en Camboya que en Tailandia.
En toda la estancia en Camboya teníamos pensión completa y ese día comimos en el hotel, nos dio tiempo de echarnos una pequeña siesta antes de las 3 que era la hora que habíamos quedado con nuestro guía. Nos comentó que entre las 12.00 y las 15.00 son las hora de más calor, y os puedo asegurar que aun estando a cubierto esas horas hemos pasado muchísimo calor en Camboya, nada que ver con Tailandia.
Lo dicho a las 3 estábamos ya montados en nuestro coche rumbo a Angkor Wat. Antes pasamos por el centro de visitantes donde cogimos un pase para 3 días que cuesta 40 dólares. Los pases son personalizados y te hacen una foto ahí mismo, es conveniente llevarlos siempre encima ya que a la entrada de varios templos te los piden.
Lo que no hace falta que llevéis es agua ya que en todos los sitios que se visitan tienes la posibilidad de comprar y os aseguro que es muy necesaria. Lo que también hay que tener en cuenta es que os vais a llegar a sentir agobiados, por lo menos a nosotros nos pasó, con los niños que os van a rodear nada más salir del coche vendiéndoos de todo. La verdad es que dan mucha lástima y nosotros acabamos comprando un ciento de pulseras, un libro que si se van a visitar los templos por libre vienen muy bien y hasta una flauta con su funda. Algunos hasta hablan algunas palabras en castellano. Como es lógico no puedes comprarles a todos así que al final te acostumbras a decir “no gracias” y a ignorarlos. Nos comentó Kong, y vimos que así era, que cerca de algunos templos hay unas cuerdas en el suelo que los niños no pueden pasar. Además no sabes si realmente le estás ayudando comprándoles ya que muchos dejan la escuela para vender a los turistas y poder ayudar a sus padres.
Bueno pues lo dicho, con nuestros pases pusimos rumbo a Angkor Wat. Cuando de repente lo ves aparece al otro lado del foso impresiona, tanto tiempo esperándolo y por fin estábamos ahí. Esa tarde la pasamos toda en Angkor Wat disfrutando un motón. Además aunque había gente, probablemente en el templo que más gente vimos de todo la visita, no era exagerado, tanto que tenemos la mayoría de las fotos sin que salgan ningún turista más en ellas.
Ya en el hotel aprovechamos a darnos un baño antes de que empezase a llover. Buff si en Tailandia cae aquí todavía más. Además con el inconveniente que el sistema de desagües de Siem Reap creo que es inexistente. Parece mentira que hace 1000 años en Angkor ya tenían un sistema de desagües y ahora mismo parece que no exista. Con el todoterreno nos llevaron a cenar, y más vale que íbamos con coche alto porque yo no sé que altura podría tener ya el agua, imposible andar por la calle. Además tampoco está ciudad está muy iluminada. Bueno lo dicho que nos llevaron a cenar a un sitio muy majillo eso sí, exclusivo de turistas. El menú de la cena ya estaba elegido y no cenamos mal. Y de ahí a la cama que mañana tocaban dianas pronto.
Día 10 (16 de Mayo) Siem Reap / Angkor
Para las 8.30 estábamos en la recepción del hotel tal como habíamos quedado con Tom. El calor a esas horas es ya más que considerable, así que llevar un coche con agua, toallitas frías y aire acondicionado se agradece.
Ese día por la mañana visitamos Baksei Chamkrong, Angkor Thom, Bayon, Preah Palilay y Phimeanakas y el palacio real con su terraza de los elefantes. Todo te impresiona especialmente en mi caso las caras de Bayon. También los árboles creciendo encima de las piedras aunque los que vimos a la mañana nada tenían que ver con lo que nos esperaba a la tarde. Y también impresionan los escalones para subir a las edificaciones, son del estilo a los del Wat Aurum aunque peor conservados, muy altos y estrechos. En algunos casos casi subíamos a cuatro patas. También impresiona la selva que rodean los edificios, no es de extrañar que estuviesen tanto tiempo ocultos. Kong nos llevó muy bien siempre siguiendo una ruta distinta a la de las excusiones grandes de turistas, de tal forma que nunca coincidíamos con ellos y pudimos disfrutar del lugar casi en soledad.
Serían alrededor de las 12.30 cuando volvimos a Siem Reap a comer. Esta vez lo hicimos en el centro de la ciudad en una calle que bien podría estar en cualquier pueblo turístico del Mediterráneo. Esta un poco fuera de lugar pero es bonita. Tom nos explicó que está viniendo muy europeo joven para abrir este tipo de negocios orientado a los turistas. Es este sitio comimos además muy bien. Después de comer volvimos al hotel donde nos echamos un siestilla y nos dimos un baño completamente solos en la enorme piscina del hotel, menudo lujo.
Alrededor de las 3.30 estábamos otra vez en marcha, está vez hacia Thommanon y Ta Prom, yo creo que el templo más conocido de Angkor por los enormes árboles creciendo entre las piedras. De esto sólo puedo decir que impresiona, la gente que ha visto nuestras fotos ha alucinado pues imaginaros tenerlo delante de tus narices, es una pasada!
Estuvimos toda la tarde ahí y nos montamos en el coche justo cuando empezaron a caer las primeras gotas a las que seguiría el diluvio. Lo peor era ver por la carretera como la gente iban en sus motos y bicis calados hasta los huevos, eso sí nadie paraba a buscar cobijo.
Esa noche cenamos en el hotel y aprovechamos a ver las danzas tradicionales camboyanas que hubo durante la cena. Es sorprendente lo parecidas que son a las que luego vimos en Samui, tanto por los vestido que llevan como por las historias que cuenta.
Día 11 (17 de Mayo) Siem Reap / Angkor
Bien pronto por la mañana montamos el coche para ver más templos. Hoy hace un calor increíble, el día más caluroso con diferencia, según nos dice Tom rondaremos los 40º y yo me lo creo, que manera de sudar. Subir las escaleras de los templos se hace realmente duro. Visitamos nuestros últimos templos Pre Rup, desde donde hay unas vistas increíbles de la selva que lo rodea, Banteay Srey de todos lo que hemos visto el que mejor labrada la piedra, suponen que por mujeres. Este templo a mí me gusta mucho aunque el calor es ya casi insoportable y vamos buscando la sombra como locos. Y también visitamos Prasat Kravan muy pequeño pero con unas paredes labrabas en su interior muy bien conservadas. Este es último sitio que visitamos de la zona de templos, por lo que he visto a la vuelta en el libro que compramos “Ancient Angkor” podríamos a ver visto unos cuanto más pero se nos hace más que suficiente.
Volvemos a comer a Siem Reap, esta vez en un restaurante más tradional Camboyano, aunque la comida estaba un poco occidentalizada, a mi la verdad es que me encantó.
Después de comer tocaba la siestita de rigor y el baño en la piscina, esta vez casi solos. Esta vez empezó a llover antes y en cuanto empezaron a caer las primeras gotas nos fuimos de la piscina. A las 6, creo, habíamos quedado con Kong para ir a visitar una fabrica-escuela de seda que está a una hora más o menos de Siem Reap.
En la fábrica nos acompañó un chico que en inglés te va enseñando todo. La verdad es que nos costaba un poco entenderle, sobretodo cuando nos explicaba el proceso de fabricación de las telas. Te enseñan la plantación de los árboles de morera, el criadero de los gusanos, y los telares. Me resulto curioso los tintes naturales que usan para teñir lo hilos. También hay una especie de museo. Como he dicho es una especie taller-escuela donde enseñan a las chicas a tejer para que luego puedan ganarse la vida en alguna fábrica. Es increíble ver como trabajan, y como hacen los dibujos de las telas.
Después como es lógico te pasan a la tienda. Tenían cosas chulísimas, desde vestidos a pañuelos a tela al peso… Los diseños me gustaron más que los que habíamos visto en Tailandia, eran más occidentales y los precios también me parecieron mejor supongo que el hecho de que estuviesen en dólares ayudaba, así que aproveché a darme algún capricho y a comprar unos regalos.
De ahí nos llevaron al hotel y nos despedimos de Kong hasta el día siguiente. Aprovechamos a dejar medio hechas las maletas para al día siguiente andar más tranquilos.
Es noche comimos en el restaurante francés que nos lo abrieron exclusivamente para nosotros y comimos de lujo.
Día 12 (18 de Mayo) Siem Reap – Ko Samui
Con tiempo más que de sobra llegamos al aeropuerto, viendo en el camino todos los hoteles que se están construyendo. Kong nos acompañó hasta la puerta pero no entró ya que a ellos no les dejan. Estuvimos esperando un ratillo en la sala que hay nada más llegar para que apareciese el aviso de nuestro vuelo a Samui pero no lo hacía. Sólo había uno que se dirigía a Bangkok con el mismo número que nuestro vuelo. Nosotros estábamos convencidos que íbamos directos pero que el número de vuelo a Bangkok fuese el mismo nos mosqueó un poco y fuimos a preguntar al mostrador de Bangkok airways. Nos dijeron que el vuelo no era directo que hacía escala en Bangkok así que nada un poco molestos facturamos. Fue fallo nuestro el no fijarnos mejor ya que aunque en el billete electrónico ponía Siem Reap-Samui, las horas del vuelo eran demasiada. Vimos que había más gente como nosotros porque mientras facturábamos una pareja preguntó lo mismo. La verdad es que resulta un poco cutre, te dan tu tarjeta de embarque con destino Bangkok pero a mano tachan esto y escriben Samui. En fin que pasamos el control de pasaporte donde hay una tienda de recuerdo donde vendían además de otras cosas algunos de los productos que vimos en la tienda de seda y al mismo precio. La espera se nos hace un poco larga, lo malo de este viaje son los ratos de los aeropuertos. Puntuales a las 12.50 despegamos rumbo a Bangkok y para las 14.00 estamos ahí. Con los papeles de entrada a Tailandia bien rellenados por dirigimos a la zona de transito. En el stand de Bangkok Airways nos cambian a mano el número de nuestro vuelo, pasa de ser el PG906 al se el PG906W. Cuando llaman para embarcar al PG906 hay un poco de confusión ya que la hora de embarque es la misma para los dos vuelos y el número en principio el mismo. Pero no hay ningún problema, primero embarcan los de el otro vuelo y luego seguiditos nosotros. El asiento asignado es el mismo que el del vuelo Siem Reap-Bangkok.
El vuelo sale a las 15.00 y para las 16.30 estamos en el aeropuerto de Samui. Este aeropuerto es muy bonito. Todo al aire libre, solo hay techos, cada una de las zonas son como cabañas. Una vez recogidas las maletas vamos a la salida, donde esperábamos encontrar nuestro chofer, pero nos indican que hay que ir a la zona donde está la cafetería, que es ahí donde nos recogerán. No tenemos que esperar nada y una chica que hablaba castellano nos acompaña hasta el hotel, el Sala Samui. La recepción de este hotel es muy curiosa, está toda al aire libre y lo único que lo cubre es el techo, a mi me pareció bonita. Mientras hacemos el check-in nos invitan a un té y nos dan la toallita fría. Y de repente aparecen con un enorme ramo de rosas que se lo dan a mi marido para que me lo de a mí, todo muy romántico. De ahí nos acompañan a nuestra habitación, una pool villa. Impresionante!! Su enorme cama con un motón de almohadas para elegir, el baño al aire libre con sus dos lavabos y su bañera con pétalos de rosas. Que decir de la piscina, fue nuestro capricho del viaje pero le sacamos chispas.
Del Sala Samui decir que es un hotel ideal para parejas que quieren disfrutar de su intimidad, está construido de tal forma que nadie puede verte mientras está en tu piscina. El hotel en si mismo no tiene nada salvo dos piscina junto a la playa muy bonitas. No hay ningún tipo de actividades con lo cual es muy tranquilo. Tiene dos restaurantes, uno italiano, y gimnasio. También una biblioteca con Internet gratuito. Tienes tiendas cerca y a la largo de la playa hay más bares y restaurantes pero todo muy tranquilo. Los precios están bastante bien aunque nosotros hicimos todas las comidas en nuestro hotel.
No esperéis una playa paradisiaca, aunque la arena es blanca y fina el agua está un poco turbia.
Día 13-16 (19-22de Mayo) Ko Samui
Estos días nos dedicamos a descansar y a disfrutar de nuestra piscina. Por la mañana íbamos a la playa y ya la tarde la pasábamos en nuestra villa, incluso comíamos ahí. También aprovechamos a darnos otro masaje tai, está vez en condiciones y aunque duele nos dejan como nuevos.
De Samui no os puedo contar mucho porque no visitamos la isla. Sí que hicimos la excursión a el parque nacional Ang Thom y disfrutamos un montón de ese día. En ese parque sí que hay playas de postal, es una excursión que se la recomiendo a cualquiera que vaya a Samui.
Día 17 (23de Mayo) Ko Samui-Bangkok-Madrid
Este es nuestro último día en Tailandia y estamos ya con mucha pena de tener que abandona ese país tan maravilloso en el que hemos estado tan a gusto. Nuestro avión sale a las 18.30 y hasta las 17.00 no nos vendrán a buscar. 2 días antes habíamos probado suerte para ver si había alguna posibilidad de dejar la habitación más tarde, no a las 12.00 como debíamos y tenemos suerte, supongo que al no haber demasiada gente en el hotel no tienen problemas de habitaciones y podemos disfrutar de la nuestra hasta las 16.00 sin ningún cargo extra, la verdad es que nos regalan un día más de vacaciones.
La hora en la que tenemos que esperar al coche que nos llevará al aeropuerto la pasamos en una sala con televisión, bebidas, café, té…
El guía que nos acompaña al aeropuerto nos explica que si queremos podemos facturar desde Samui directamente a Madrid, aunque volamos a Bangkok con Bangkok Airways y de Bangkok a Madrid con la Thai, y hacer el trámite de los pasaportes también ahí. Eso sí hay que pagar 200bath por persona y si se factura en Bkk no. Nosotros facturamos directamente desde Samui ya que nos parece más cómodo y más rápido.
Una vez que estamos en la sala de espera disfrutamos de una pequeña merienda que te puedes servir gratis ahí mismo. Café, té, algún bollito…
A las 18.30 ponemos rumbo a Bkk y en hora y media más o menos estamos ahí. Hasta las 00.00 no cogemos el vuelo con destino a Madrid así que nos dedicamos a patear el aeropuerto haciendo tiempo.
A la hora prevista embarcamos y nos despedimos de Tailandia, país que nos ha encantado y al que esperamos volver algún día.
Día 8 (14 de Mayo) Bangkok
Para seguir con la tradición hoy volvemos a madrugar con la idea de disfrutar de nuestro último día en Bangkok. Con el planning ya hecho cogemos el sky train para ir a visitar la casa de Jim Thompson. Tener en cuenta que dentro del sky train el aire acondicionado está a tope. Puedes coger un bono de día pero creemos que nos va a salir mejor comprar cada viaje el ticket. Pagas en función del trayecto que vas a hacer y hay que guardar el ticket ya que lo tienes que volver a usar al salir de la estación en los tornos. Nos montamos en la parada que están junto a nuestro hotel y nos bajamos en la última parada de una de las dos líneas que tiene. Cuando nos bajamos no tenemos claro para donde tenemos que ir pero por suerte un chico con un tuctuc nos indica el camino. Sin problemas llegamos a la casa museo de Jim Thompson. Mientras esperamos que llegue la hora de que nos hagan la visita guiada en inglés (no se puede hacer por libre) damos un paseo por los jardines. Por suerte a la guía se le entiende bastante bien y disfrutamos de las medía hora de visita. Nos gusta mucho la visita, la verdad es que merece la pena. De ahí vamos a la tienda de Jim Thompson que está junto a la vivienda. La tienda me decepciona un poco, los diseños de los pañuelos de seda no me acaban de convencer y había muchos productos de algodón, además nada baratos. Al final me doy el capricho y me compro una especie de bufanda tejida con seda.. Mientras estamos en la tienda empieza a jarrear con sólo puede hacerlo en Tailandia. Y como a grandes males grandes remedios nos vamos a tomar algo a la cafetería-restaurante también del museo. No sé cuanto estuvimos esperando a que parase, porque está vez no llevábamos paraguas ni chubasqueros, pero tampoco fue demasiado y no se estaba nada mal en la terracita enfrente de un estanque.
Cuando medio paro de llover volvimos a la parada del sky train para poner rumbo a la zona de los centros comerciales. El tren para justo en la entrada del centro comercial Siam Paragon que es digno de ver. Es un centro comercial de auténtico lujo, en la primera planta están todas las tiendas de diseñadores, Dior, Gucci, Armani…En otra planta venden coches, pero no cualquier coche sino ferraris, porches… Vamos para flipar. Parece mentira los contraste de esta ciudad, ayer estábamos navegando entre casa cochambrosas y hoy estamos rodeados de tiendas de lujo. Estamos un ratillo dando vueltas por ahí y cuando salimos decidimos coger un taxi para que nos lleve a la Bayoke. Es nuestra primera toma de contacto con el tráfico y la forma de conducir de Bangkok. Le decimos que nos ponga el taxímetro y lo pone sin pegas, prueba superada. Yo creo que es la hora de más tráfico y los carriles, por lo menos 4 en cada sentido, pero el taxista es un artista y en nada estamos en la puerta de la torre y encima tirado, no lo recuerdo bien, pero creo que fueron menos de dos euros.
Llegar a la planta donde esta el restaurante nos costó un poco, aunque no tenía ninguna complicación. Primero te dejan en una planta y ahí hay que comprar el ticket para el restaurante y con este ticket ya puedes subir en otro ascensor para llegar arriba. El ticket costaba, si no recuerdo mal, unos 17€. Lo primero que hicimos es comer. El buffet es variado, comida oriental y occidental, pero la calidad no es para tirar cohetes y más teniendo en cuenta que para ser Tailandia el menú es caro. Sinceramente creo que no merece la pena comer ahí y más pudiendo hacerlo en el MBK que está tan cerca. Lo que sí merece la pena son las vistas que hay desde el mirador. Parece mentira que todos esos rascacielos estén en la misma ciudad que las casitas de los canales, pero así es Bangkok un ciudad de contrastes.
Después de estar un ratillo contemplando las vistas cogimos otro taxi para ira al MBK.
Ahí aprovechamos a mandar unos correos ya que hay Internet a muy buen precio. Y dimos una vuelta por el famoso centro comercial. Hay tiendas y tiendillas, la verdad es que de ahí se puede salir uniformado para todo el viaje. Como ya comenté nosotros no somos de comprar así que no os puedo decir como están los precios, eso sí había muchas cosas que ya habíamos visto en el mercadillo de Chiang Mai.
Después de un ratillo por ahí mi idea era ir a ver el wat Erawan pero mi marido estaba ya cansado y todavía teníamos que preparar las maletas así que nos quedamos sin verlo. Al hotel volvimos en el sky train que nos resultó de lo más cómodo.
Tocaba preparar las maletas, la verdad es que esa ha sido la peor parte del viaje pero ya nos hemos convertido en unos expertos. Mientras en la calle empieza a llover.
Nuestra idea era ir a ver el hotel Oriental antes de cenar que se supone que estaba cerca de nuestro hotel pero la verdad es que jarrea de lo lindo así que con pena nos quedamos sin verlo. Esa noche cenamos en el Restaurante Maria. Está en la misma acera que la State Tower yendo hacía patpong. Comimos muy bien y a buen precio. Hay para elegir entre comida occidental y tailandesa y el ambiente es como de restaurante Italiano. Mientras en la calle sigue lloviendo. Ya estábamos pensando que nos íbamos a quedar sin tomarnos nuestra copa en el Sirocco pero por suerte por fin para. Así que nos vamos para ahí.
Cuando llegamos casi no hay gente, supongo que por la lluvia porque son alrededor de las 10, así que disfrutamos de las impresionantes vistas, tanto de la ciudad como del sitio, mientras nos tomamos unas copas. Nos cuestan alrededor de 7€ cada una pero aunque son caras merecen la pena. Poco a poco va llegando más gente y empiezan a poner las mesas para cenar y la orquesta empieza a sacar los instrumentos. La verdad es que más vale que no reservamos cena ahí porque nos llovió las cuatro noches y tiene que ser una faena que te pasé mientras estés cenando. Disfrutamos de lo lindo del sitio pero ya era tarde y no nos quedó otra que marcharnos. Eso sí con mucha pena.
Nos encantó Bangkok, ya por conocer está ciudad merece la pena el viaje, y como se nos quedaron cosas por ver ya tenemos excusa para volver.
Día 9 (15 de Mayo) Bangkok-Siem Reap / Angkor
Por fin un día que no nos toca madrugar demasiado!! Cogemos el vuelo rumbo a Siemp Reap a las 11 así podemos dormir un poco más de lo habitual. En el camino al aeropuerto nos acompaña un chico que trabaja para Travex, que es la agencia con la que el Corte Ingles ha organizado toda la estancia en Tailandia. Es un estudiante de castellano y un entusiasta de nuestro país, aunque nunca a estado ahí. Agradece que le demos conversación y aprovecha y aprovechamos a conocer más cosas de los dos países, así que el viaje al aeropuerto se nos hacer cortísimo. Esta vez al ir a salir de Tailandia toca pasar por un control de pasaportes donde te quitan el papel que te ponen en el pasaporte al llegar. Por fin no nos toca esperar demasiado en un aeropuerto y a las 11 ponemos rumbo a Camboya en un miniavión de hélices de lo más colorido de Bangkok airways. El viaje dura una hora y media y la ventaja de ir en este tipo de aviones es que no cogen demasiada altura con lo que se ve muy bien el paisaje. Conforme nos acercamos a Camboya este va cambiando a más llano y con menos vegetación con zonas inundadas, suponemos que para cultivar arroz. Es curioso el contraste con el paisaje montañoso del norte de Tailandia. El aeropuerto de Siem Reap es muy bonito, se ve que es bastante nuevo.
Lo primero que hay que hacer cuando llegas a Camboya es el visado. Se necesita una foto de carné y 20 dólares. Nosotros los llevamos de España pero había gente que no los llevaba y tuvieron problemas hasta que consiguieron que la policía les dejase “entrar” al país a cambiar dinero. Lo del visado es de lo más curioso. Tu pasaporte pasa por de mano en mano de unos 10 funcionarios hasta que te lo dan. Total tanto mirar y mirar para que me cambiasen mi apellido, me pusieron como primer apellido el que es mi segundo, vamos el de mi madre, en fin. No me di cuenta hasta más tarde y como el papel del visado se supone que no lo vuelven a leer no tuve ningún problema con eso. En el aeropuerto se puede cambiar dinero a la moneda local pero nosotros nos quedamos con los dólares que llevábamos y no tuvimos problemas en ningún sito, creo de hecho que los camboyanos prefieren que les pagues en dólares. Eso sí puede darse el caso en el que luego ellos te devuelvan en moneda local pero como estamos hablando de cantidades muy pequeña no es ningún problema.
A la salida del aeropuerto nos espera Kong con nuestro transporte, un todoterreno bastante apañado. Tener un coche en Camboya para los camboyanos es casí imposible así que todos viajan en moto o en bicicleta, casitodas de segunda manos, sí las bicis también. Y los taxis aquí son siempre tuc-tucs pero diferentes a los de Tailandia, estos son una moto con un carro enganchado detrás.
Del aeropuerto fuimos directamente al hotel, el Sofitel Angkor. Totalmente recomendable aunque no está cerca del centro de Siem Reap. Las habitaciones son muy amplias y las instalaciones están muy bien, sobretodo si vas en temporada baja como nosotros, ya que los días que estuvimos estábamos casi solos en la piscina. El restaurante tipo buffet no me gustó tanto pero en el francés se come de lujo. Lo desayunos estaban muy bien.
Mientras Kong nos gestionaba la reserva nosotros esperamos con las toallas frías y un té. La verdad es que esto de las toallas frías son un invento y las agradecimos mucho más en Camboya que en Tailandia.
En toda la estancia en Camboya teníamos pensión completa y ese día comimos en el hotel, nos dio tiempo de echarnos una pequeña siesta antes de las 3 que era la hora que habíamos quedado con nuestro guía. Nos comentó que entre las 12.00 y las 15.00 son las hora de más calor, y os puedo asegurar que aun estando a cubierto esas horas hemos pasado muchísimo calor en Camboya, nada que ver con Tailandia.
Lo dicho a las 3 estábamos ya montados en nuestro coche rumbo a Angkor Wat. Antes pasamos por el centro de visitantes donde cogimos un pase para 3 días que cuesta 40 dólares. Los pases son personalizados y te hacen una foto ahí mismo, es conveniente llevarlos siempre encima ya que a la entrada de varios templos te los piden.
Lo que no hace falta que llevéis es agua ya que en todos los sitios que se visitan tienes la posibilidad de comprar y os aseguro que es muy necesaria. Lo que también hay que tener en cuenta es que os vais a llegar a sentir agobiados, por lo menos a nosotros nos pasó, con los niños que os van a rodear nada más salir del coche vendiéndoos de todo. La verdad es que dan mucha lástima y nosotros acabamos comprando un ciento de pulseras, un libro que si se van a visitar los templos por libre vienen muy bien y hasta una flauta con su funda. Algunos hasta hablan algunas palabras en castellano. Como es lógico no puedes comprarles a todos así que al final te acostumbras a decir “no gracias” y a ignorarlos. Nos comentó Kong, y vimos que así era, que cerca de algunos templos hay unas cuerdas en el suelo que los niños no pueden pasar. Además no sabes si realmente le estás ayudando comprándoles ya que muchos dejan la escuela para vender a los turistas y poder ayudar a sus padres.
Bueno pues lo dicho, con nuestros pases pusimos rumbo a Angkor Wat. Cuando de repente lo ves aparece al otro lado del foso impresiona, tanto tiempo esperándolo y por fin estábamos ahí. Esa tarde la pasamos toda en Angkor Wat disfrutando un motón. Además aunque había gente, probablemente en el templo que más gente vimos de todo la visita, no era exagerado, tanto que tenemos la mayoría de las fotos sin que salgan ningún turista más en ellas.
Ya en el hotel aprovechamos a darnos un baño antes de que empezase a llover. Buff si en Tailandia cae aquí todavía más. Además con el inconveniente que el sistema de desagües de Siem Reap creo que es inexistente. Parece mentira que hace 1000 años en Angkor ya tenían un sistema de desagües y ahora mismo parece que no exista. Con el todoterreno nos llevaron a cenar, y más vale que íbamos con coche alto porque yo no sé que altura podría tener ya el agua, imposible andar por la calle. Además tampoco está ciudad está muy iluminada. Bueno lo dicho que nos llevaron a cenar a un sitio muy majillo eso sí, exclusivo de turistas. El menú de la cena ya estaba elegido y no cenamos mal. Y de ahí a la cama que mañana tocaban dianas pronto.
Día 10 (16 de Mayo) Siem Reap / Angkor
Para las 8.30 estábamos en la recepción del hotel tal como habíamos quedado con Tom. El calor a esas horas es ya más que considerable, así que llevar un coche con agua, toallitas frías y aire acondicionado se agradece.
Ese día por la mañana visitamos Baksei Chamkrong, Angkor Thom, Bayon, Preah Palilay y Phimeanakas y el palacio real con su terraza de los elefantes. Todo te impresiona especialmente en mi caso las caras de Bayon. También los árboles creciendo encima de las piedras aunque los que vimos a la mañana nada tenían que ver con lo que nos esperaba a la tarde. Y también impresionan los escalones para subir a las edificaciones, son del estilo a los del Wat Aurum aunque peor conservados, muy altos y estrechos. En algunos casos casi subíamos a cuatro patas. También impresiona la selva que rodean los edificios, no es de extrañar que estuviesen tanto tiempo ocultos. Kong nos llevó muy bien siempre siguiendo una ruta distinta a la de las excusiones grandes de turistas, de tal forma que nunca coincidíamos con ellos y pudimos disfrutar del lugar casi en soledad.
Serían alrededor de las 12.30 cuando volvimos a Siem Reap a comer. Esta vez lo hicimos en el centro de la ciudad en una calle que bien podría estar en cualquier pueblo turístico del Mediterráneo. Esta un poco fuera de lugar pero es bonita. Tom nos explicó que está viniendo muy europeo joven para abrir este tipo de negocios orientado a los turistas. Es este sitio comimos además muy bien. Después de comer volvimos al hotel donde nos echamos un siestilla y nos dimos un baño completamente solos en la enorme piscina del hotel, menudo lujo.
Alrededor de las 3.30 estábamos otra vez en marcha, está vez hacia Thommanon y Ta Prom, yo creo que el templo más conocido de Angkor por los enormes árboles creciendo entre las piedras. De esto sólo puedo decir que impresiona, la gente que ha visto nuestras fotos ha alucinado pues imaginaros tenerlo delante de tus narices, es una pasada!
Estuvimos toda la tarde ahí y nos montamos en el coche justo cuando empezaron a caer las primeras gotas a las que seguiría el diluvio. Lo peor era ver por la carretera como la gente iban en sus motos y bicis calados hasta los huevos, eso sí nadie paraba a buscar cobijo.
Esa noche cenamos en el hotel y aprovechamos a ver las danzas tradicionales camboyanas que hubo durante la cena. Es sorprendente lo parecidas que son a las que luego vimos en Samui, tanto por los vestido que llevan como por las historias que cuenta.
Día 11 (17 de Mayo) Siem Reap / Angkor
Bien pronto por la mañana montamos el coche para ver más templos. Hoy hace un calor increíble, el día más caluroso con diferencia, según nos dice Tom rondaremos los 40º y yo me lo creo, que manera de sudar. Subir las escaleras de los templos se hace realmente duro. Visitamos nuestros últimos templos Pre Rup, desde donde hay unas vistas increíbles de la selva que lo rodea, Banteay Srey de todos lo que hemos visto el que mejor labrada la piedra, suponen que por mujeres. Este templo a mí me gusta mucho aunque el calor es ya casi insoportable y vamos buscando la sombra como locos. Y también visitamos Prasat Kravan muy pequeño pero con unas paredes labrabas en su interior muy bien conservadas. Este es último sitio que visitamos de la zona de templos, por lo que he visto a la vuelta en el libro que compramos “Ancient Angkor” podríamos a ver visto unos cuanto más pero se nos hace más que suficiente.
Volvemos a comer a Siem Reap, esta vez en un restaurante más tradional Camboyano, aunque la comida estaba un poco occidentalizada, a mi la verdad es que me encantó.
Después de comer tocaba la siestita de rigor y el baño en la piscina, esta vez casi solos. Esta vez empezó a llover antes y en cuanto empezaron a caer las primeras gotas nos fuimos de la piscina. A las 6, creo, habíamos quedado con Kong para ir a visitar una fabrica-escuela de seda que está a una hora más o menos de Siem Reap.
En la fábrica nos acompañó un chico que en inglés te va enseñando todo. La verdad es que nos costaba un poco entenderle, sobretodo cuando nos explicaba el proceso de fabricación de las telas. Te enseñan la plantación de los árboles de morera, el criadero de los gusanos, y los telares. Me resulto curioso los tintes naturales que usan para teñir lo hilos. También hay una especie de museo. Como he dicho es una especie taller-escuela donde enseñan a las chicas a tejer para que luego puedan ganarse la vida en alguna fábrica. Es increíble ver como trabajan, y como hacen los dibujos de las telas.
Después como es lógico te pasan a la tienda. Tenían cosas chulísimas, desde vestidos a pañuelos a tela al peso… Los diseños me gustaron más que los que habíamos visto en Tailandia, eran más occidentales y los precios también me parecieron mejor supongo que el hecho de que estuviesen en dólares ayudaba, así que aproveché a darme algún capricho y a comprar unos regalos.
De ahí nos llevaron al hotel y nos despedimos de Kong hasta el día siguiente. Aprovechamos a dejar medio hechas las maletas para al día siguiente andar más tranquilos.
Es noche comimos en el restaurante francés que nos lo abrieron exclusivamente para nosotros y comimos de lujo.
Día 12 (18 de Mayo) Siem Reap – Ko Samui
Con tiempo más que de sobra llegamos al aeropuerto, viendo en el camino todos los hoteles que se están construyendo. Kong nos acompañó hasta la puerta pero no entró ya que a ellos no les dejan. Estuvimos esperando un ratillo en la sala que hay nada más llegar para que apareciese el aviso de nuestro vuelo a Samui pero no lo hacía. Sólo había uno que se dirigía a Bangkok con el mismo número que nuestro vuelo. Nosotros estábamos convencidos que íbamos directos pero que el número de vuelo a Bangkok fuese el mismo nos mosqueó un poco y fuimos a preguntar al mostrador de Bangkok airways. Nos dijeron que el vuelo no era directo que hacía escala en Bangkok así que nada un poco molestos facturamos. Fue fallo nuestro el no fijarnos mejor ya que aunque en el billete electrónico ponía Siem Reap-Samui, las horas del vuelo eran demasiada. Vimos que había más gente como nosotros porque mientras facturábamos una pareja preguntó lo mismo. La verdad es que resulta un poco cutre, te dan tu tarjeta de embarque con destino Bangkok pero a mano tachan esto y escriben Samui. En fin que pasamos el control de pasaporte donde hay una tienda de recuerdo donde vendían además de otras cosas algunos de los productos que vimos en la tienda de seda y al mismo precio. La espera se nos hace un poco larga, lo malo de este viaje son los ratos de los aeropuertos. Puntuales a las 12.50 despegamos rumbo a Bangkok y para las 14.00 estamos ahí. Con los papeles de entrada a Tailandia bien rellenados por dirigimos a la zona de transito. En el stand de Bangkok Airways nos cambian a mano el número de nuestro vuelo, pasa de ser el PG906 al se el PG906W. Cuando llaman para embarcar al PG906 hay un poco de confusión ya que la hora de embarque es la misma para los dos vuelos y el número en principio el mismo. Pero no hay ningún problema, primero embarcan los de el otro vuelo y luego seguiditos nosotros. El asiento asignado es el mismo que el del vuelo Siem Reap-Bangkok.
El vuelo sale a las 15.00 y para las 16.30 estamos en el aeropuerto de Samui. Este aeropuerto es muy bonito. Todo al aire libre, solo hay techos, cada una de las zonas son como cabañas. Una vez recogidas las maletas vamos a la salida, donde esperábamos encontrar nuestro chofer, pero nos indican que hay que ir a la zona donde está la cafetería, que es ahí donde nos recogerán. No tenemos que esperar nada y una chica que hablaba castellano nos acompaña hasta el hotel, el Sala Samui. La recepción de este hotel es muy curiosa, está toda al aire libre y lo único que lo cubre es el techo, a mi me pareció bonita. Mientras hacemos el check-in nos invitan a un té y nos dan la toallita fría. Y de repente aparecen con un enorme ramo de rosas que se lo dan a mi marido para que me lo de a mí, todo muy romántico. De ahí nos acompañan a nuestra habitación, una pool villa. Impresionante!! Su enorme cama con un motón de almohadas para elegir, el baño al aire libre con sus dos lavabos y su bañera con pétalos de rosas. Que decir de la piscina, fue nuestro capricho del viaje pero le sacamos chispas.
Del Sala Samui decir que es un hotel ideal para parejas que quieren disfrutar de su intimidad, está construido de tal forma que nadie puede verte mientras está en tu piscina. El hotel en si mismo no tiene nada salvo dos piscina junto a la playa muy bonitas. No hay ningún tipo de actividades con lo cual es muy tranquilo. Tiene dos restaurantes, uno italiano, y gimnasio. También una biblioteca con Internet gratuito. Tienes tiendas cerca y a la largo de la playa hay más bares y restaurantes pero todo muy tranquilo. Los precios están bastante bien aunque nosotros hicimos todas las comidas en nuestro hotel.
No esperéis una playa paradisiaca, aunque la arena es blanca y fina el agua está un poco turbia.
Día 13-16 (19-22de Mayo) Ko Samui
Estos días nos dedicamos a descansar y a disfrutar de nuestra piscina. Por la mañana íbamos a la playa y ya la tarde la pasábamos en nuestra villa, incluso comíamos ahí. También aprovechamos a darnos otro masaje tai, está vez en condiciones y aunque duele nos dejan como nuevos.
De Samui no os puedo contar mucho porque no visitamos la isla. Sí que hicimos la excursión a el parque nacional Ang Thom y disfrutamos un montón de ese día. En ese parque sí que hay playas de postal, es una excursión que se la recomiendo a cualquiera que vaya a Samui.
Día 17 (23de Mayo) Ko Samui-Bangkok-Madrid
Este es nuestro último día en Tailandia y estamos ya con mucha pena de tener que abandona ese país tan maravilloso en el que hemos estado tan a gusto. Nuestro avión sale a las 18.30 y hasta las 17.00 no nos vendrán a buscar. 2 días antes habíamos probado suerte para ver si había alguna posibilidad de dejar la habitación más tarde, no a las 12.00 como debíamos y tenemos suerte, supongo que al no haber demasiada gente en el hotel no tienen problemas de habitaciones y podemos disfrutar de la nuestra hasta las 16.00 sin ningún cargo extra, la verdad es que nos regalan un día más de vacaciones.
La hora en la que tenemos que esperar al coche que nos llevará al aeropuerto la pasamos en una sala con televisión, bebidas, café, té…
El guía que nos acompaña al aeropuerto nos explica que si queremos podemos facturar desde Samui directamente a Madrid, aunque volamos a Bangkok con Bangkok Airways y de Bangkok a Madrid con la Thai, y hacer el trámite de los pasaportes también ahí. Eso sí hay que pagar 200bath por persona y si se factura en Bkk no. Nosotros facturamos directamente desde Samui ya que nos parece más cómodo y más rápido.
Una vez que estamos en la sala de espera disfrutamos de una pequeña merienda que te puedes servir gratis ahí mismo. Café, té, algún bollito…
A las 18.30 ponemos rumbo a Bkk y en hora y media más o menos estamos ahí. Hasta las 00.00 no cogemos el vuelo con destino a Madrid así que nos dedicamos a patear el aeropuerto haciendo tiempo.
A la hora prevista embarcamos y nos despedimos de Tailandia, país que nos ha encantado y al que esperamos volver algún día.
Afortunadamente hoy hace un día soleado y podemos ir a las islas Phi Phi.Son famosas por su magníficos paisajes, sus playas de arena blanca, el mar turquesa y una fauna y flora submarina multicolor. La contratamos con Arlymear y nos cuesta 2200 baths por perrsona con guía en español.Vamos a ir en una lancha rápida con tres motores y no somos más de 20 personas. Nos recogen a las 8.30 en el hotel y nos llevan a Marina Phuket, un puerto deportivo a media hora de Karon beach. Una vez allí nos explican como será la excursión y nos vamos. En la lancha nos ponemos atrás, cerca de los motores ya que se notan menos los saltos de la lancha y el mareo es menor. Después de una hora de viaje hacemos nuestra primera parada en Phi Phi Le, playa donde se rodó la película " The Beach". El lugar, Maya Bay, es impresionante, la playa y las rocas alrededor son bellísimas. Lo malo es que hay mucho turista. Nos dan media hora y nos damos un baño entre la multitud. La siguiente parada es una especie de laguna rodeada de acantilados donde también se rodaron escenas de la misma película. Allí nos bañamos y vemos los primeros peces. Luego pasamos por Viking cave, lugar donde se recolectan nidos de golondrina, muy codiciados en la cocina asiática. Seguimos camino y nos paramos a ver como los monos bajan por los acantilados a comer los plátanos que les dan los turistas.
Ahora nos toca snorkel y estamos 45 minutos disfrutando del espectáculo. Desde la lancha lanzan pan y fruta y nadamos rodeados de peces de colores. Maravillosa experiencia.
Ya con un hambre voraz paramos en la más grande y habitada de las islas, Phi Phi Don. Aquí se ven varios resorts con muy pinta y de los más integrado en el paisaje. Almorzamos bastante bien en un resturante buffet de comida muy variada. Ya son las 2 de la tarde y volvemos a tierra. De camino hacemos otra parada en la bella isla de Ka Lak. Una hora para bucear y tomar el sol. De la lancha bajan bebidas y frutas y podemos tomar lo que queramos. Sobre la 4 y media estamos en puerto y media hora más tarde en Karon.
Descansamos un rato y nos vamos a dar una vuelta por Karon. Recojemos a unos amigos del circuito en el Hotel "The Village" y me encantó. Vimos la piscina y su bungalow. Precioso, bien decorado y muy íntimo. Nuestro hilton es muy grande pero no tiene tanto encanto.
Nos tomamos un aperitivo en el hotel Movenpick con música en directo y después cenamos en el restaurante Vitaporn. Magnífica comida thai a muy buen precio. Salimos de allí muy satisfechos y pagamos 14 por pareja. Lo recomiendo si estais por Karon.
Y se nos acaba nuestra estancia en Phuket. Nos ha gustado la isla y la cantidad de cosas que se oueden hacer. El tiempo ha acompañado y creo que nos ha faltado algún día más para conocer la isla un poco mejor.
Dia 14 Iniciamos el regreso
Hoy nos levantamos a las 9 y tras el gran desayuno nos vamos a disfrutar de la piscina. Nos vamos a la 13.30 y en recepción nos dejan la habitación hasta esa hora. Apuramos hasta el final y nos recojen puntuales. Ya en el aeropuerto embalamos las 3 maletas a ¡6 euros cada una! y facturamos directamente las maletas a Málaga. Nos pesan 44 kg y por 1 nos libramos de pagar sobrepeso. 4 días antes en Chiang Mai pesaron 39 kg. No lo entiendo. Creo que esto está trucado para pagar más. Nos despedimos de nuestro cachondo guía Yoyo y nos vamos para Bangkok. Allí estaremos 6 horas esperando volar hacia Madrid. Allí ahy miles de tiendas de recuerdos, boutiques de lujo, resturantes... Allí pasamos el rato hasta que llega la hora de irnos. Día 15 Llegada
El vuelo se hace menos pesado que la ida debido al cansancio acumulado. La thai de nuevo perfecta. En comida, puntualidad, limpieza, amabilidad...
Nos ponen dos servicios: ensalada gnochetti con gambas, frutas, ternera al vino tinto o pollo al curry verde con arroz thai. 9 horas después el segundo: Macedonia de frutas, tortilla francesa con salchicha o quiché de champiñon y queso. Al ir medio dormidos casi no comemos. Después de 13 horas llegamos a Madrid sanos y salvos y con la sensación de haber conocido un país fascinante.
Nos ha encantado Tailandia. Desde la trepidante Bangkok, hasta la belleza del norte y las playas paradisíacas del sur. Su gente, su cultura, su comida, sus costumbres. Totalmente recomendable el viaje. Y para Iberojet también buena nota porque no ha fallado en ningún momento.
En fín, esto ha sido todo. Muchas gracias por aguantarme y aquí estoy por si os hago falta.
Un saludo a todos