Una vez de vuelta, voy a dar un poco de detalle de mi viaje para intentar ayudar a otros viajeros. Coincido en muchos comentarios con el viaje de unos mensajes antes.
Viajamos 2 semanas desde el 22 de agosto con 2 niñas/adolescentes. Volamos con Iberia Express hasta Bari. Inicialmente la idea era hacer la primera parte del viaje en tren y después alquilar un coche sólo los últimos días más de playa, sobre todo porque los coches estaban muy caros y más los automáticos. Finalmente, los precios de los coches de alquiler fueron bajando y entonces lo pillamos sin cambiar el plan, por eso quizás nuestro itinerario sea mejorable.
Para planificar el viaje usamos algunos blogs, información de este foro y la guía Lonely Planet del Sur de Italia en italiano. Hicimos las reservas de vuelos y alojamiento un poco tarde, entre mayo y junio.
Día 1. Llegamos al
aeropuerto de Bari y fuimos a la ciudad en taxi, el precio fue de 30 euros vs 21 del tren. Fue nuestro primer contacto con la conducción del sur de Italia, ya os imagináis…
Aprovechamos la tarde para dar una vuelta por el
Bari histórico, a nuestro aire, disfrutando esa cierta decadencia y vida tradicional dentro de la ciudad.
Cenamos en Il Rustico, podéis ver las reseñas de Google para entender este curioso restaurante. Nos alojamos en B&Bari, muy bien situado y recomendable.
Día 2. Al día siguiente nos fuimos a
Trani en tren desde la estación de Bari Centrale. Compramos los billetes en la máquina y nos liamos un poco porque en el billete no veíamos ni el número de tren ni el andén, casi lo perdemos. No nos dio tiempo a validar antes los billetes en las máquinas verdes pero se lo dijimos al revisor y no pasó nada. Mascarilla (normal) en el tren obligatoria que llevaba casi todo el mundo.
Trani nos pareció muy bonita aunque la catedral estaba cerrada por obras. Nos dimos un buen paseo desde la Villa Comunale por el puerto hasta la ciudad y callejeamos por la ciudad, viendo palacios, sinagoga... Se puso a llover y nos tuvimos que recoger en una cafetería. Por la lluvia, las terrazas estaban cerradas así que la mayoría de restaurantes estaban completos o reservados. Esto nos ocurrió algunas veces en el viaje, sobre todo en fin de semana, con restaurantes completos o que ni siquiera pudimos reservar.
Después de comer, tren a
Molfetta. Tomamos un café, fuimos a la oficina de turismo y ya vimos que hasta las 18:00 estaba todo cerrado y muy “muerto”. Pueblo bonito, con una parte histórica que recuerda en parte a Bari, el puerto, Duomo... Aunque quizás fuera de lo que menos mereciera la pena en el viaje. Al final de la tarde, de vuelta en tren a Bari a dormir. Si no hubiera llovido, podríamos haber encajado ese mismo día la visita de otro pueblecito de la costa.
Día 3. Al día siguiente de nuevo tren a
Giovinazzo. Visita poco útil a la oficina de turismo y vemos la ciudad. Muy bonita y casi sin turistas. Pocos restaurantes abiertos para comer, la mayoría sólo para la cena.
Nos volvemos a
Bari en tren, descansamos un poco en el B&B y vamos a ver con más detalle la ciudad y a perdernos por sus rincones, visitar la catedral, iglesias, palacios, paseo marítimo… Creo que merece la pena dedicarle al menos un día a Bari.
Día 4. Cogemos el tren para ir al aeropuerto a por el coche de alquiler. Ojo porque el tren al aeropuerto se coge en la estación que está al lado de la Central.
Alquilamos el coche con
Italy Car Rent. A pesar de las opiniones negativas, su precio para un coche automático era muy bueno comparado con las demás agencias. No cojo ningún seguro adicional con ellos porque lo había hecho antes con Rentalcover (spoiler: no sé cómo responden porque afortunadamente no he tenido que utilizarlo). Hacemos el papeleo en la oficina de la terminal y vamos a su oficina en el parking (el último, un paseo…) a recoger el coche. Nos dan un Clio automático con muchos pequeños golpes y marcas, y marcamos muchos otros que no estaban en el contrato. Cuando vamos a salir, mi hija pequeña me dice que no encuentra el cinturón, voy atrás y no lo veo… resulta que lo habían cortado… según nos dicen en la oficina, parece que es algo que les pasa a veces… Nos dan otro coche automático, un Fiat 500X, y de nuevo tengo que avisar de otros golpes y llantazos que no estaban marcados.
Con algo de retraso, nos vamos en
Matera en coche, algo menos de 1 hora por buena carretera. Usamos este parking gratuito [googlemaps=
www.google.com/ ...16.5999797 a unos 10 minutos andando del centro, aunque luego vimos en esa misma calle sitios libres más cerca.
]Mapa[/googlemaps]
Estuvimos todo el día en Matera y es una de las ciudades que más nos gustaron del viaje. Es un sitio muy especial. Visitamos un sassi (interesante) y las iglesias rupestres (quizás menos interesante bajo mi opinión).
Cansados de patear arriba y abajo por la ciudad, cogimos el coche de vuelta a nuestra última noche en Bari. Dejamos el coche en este parking, que suele ser gratuito las dos últimas semanas de agosto:
www.google.com/ ...16.8679506
Creo que en agosto es habitual que dejen gratis algunos parking privados o de la universidad, pero no sé muy bien por qué.
Día 5. Salimos en coche hasta
Monopoli y aparcamos aquí
www.google.com/ ...17.2989637
Pasamos toda la mañana visitando el caso histórico y toda la zona del puerto y el paseo marítimo hasta la pequeña cala. Nos gustó mucho el pueblo y el ambiente que había. Seguro que es un sitio que merece la pena para hacer una noche y pegarse un baño, nosotros no llevábamos los bañadores.
Después de comer en The King Street Food, cogimos el coche y fuimos un poco hacia atrás a
Polignano a Mare, donde hicimos noche.
En Polignano a Mare aparcamos en el descampado que hay junto a la estación de tren que nos dejaba cerca de nuestro apartamento, Sun House Rooms. Dejamos las cosas, la dueña nos dio algunos buenos consejos y nos fuimos a ver el pueblo. Como era viernes, había bastante gente y además me llamó la atención que había bastante gente “chic”, a veces me recordaba a Ibiza. Nos pareció un pueblo muy bonito, quizás me gustó más Monopoli. Cenamos normal en la plaza en Neuro, también complicado cenar sin reserva.
Día 6. Recogimos las cosas, desayunamos en Martinucci (fuimos a varios de esta cadena en el viaje) y nos fuimos a la Cala Lama Monachile. Estrené mis cangrejeras y allí estuvimos casi toda la mañana. Mucha gente, pero había sitio donde dejar las toallas, eso sí, pegados unos a otros (era sábado). A mis hijas les encantó cruzar la “gruta”, nadar a la zona de rocas de la izquierda y pasarse toda la mañana saltando al agua. Daba miedo desde dónde se lanzaba uno de los chicos.
Comimos y nos fuimos a
Brindisi. Aparcamos en Via Pasquale Camassa, cerca del B&B. Estuvimos viendo la catedral, la columna romana, el castillo, algún palacio… y quizás lo más chulo es la parte del puerto, donde está muy animado y hay un buen ambiente en el paseo con bares, restaurantes, una noria… Cenamos en un restaurante en el puerto, complicado sin reservar.
Día 7. El ferry al otro lado del puerto cerraba a las 18 y el día anterior llegamos más tarde, así que lo usamos este día para ir al monumento al marinero y disfrutar de las enormes vistas. Ojo que nos obligaron a llevar mascarillas ffp2, que no llevábamos, en el resto de transporte público con mascarillas quirúrgicas era suficiente. Dimos otra vuelta por el paseo, comimos pronto en Bella Napoli (muy rico) y cogimos el coche a Lecce. Sin ser feo, comparado con el resto de destinos tan espectaculares del viaje, Bríndisi creo que se queda algo por debajo.
Aparcamos en
Lecce gratis en Via Vespasiano Genuino, que está a algo más de 10 minutos de nuestro apartamento Penthouse Santa Croce, un apartamento moderno con una gran terraza, muy recomendable aunque el dueño debería haber cuidado más algunos detalles.
Salimos a ver la ciudad hacia a la Piazza San Oronzo, después por Via Vittorio Enmanuelle hacia la catedral y el final en la porta Rudiae. Oficina de turismo poco útil. Disfrutamos poco a poco de la ciudad, tomando helados, bebiendo unas cervezas, parando a disfrutar de iglesias y palacios… Es una ciudad espectacular, muy bella, puro barroco. Además, estaba todavía aquí, y en otras ciudades, la decoración típica con luces por la festividad de San Oronzo. Compramos algo de comida en un super junto a la puerta y disfrutamos de la vuelta de noche por Lecce hasta nuestro apartamento.
Día 8. Los próximos días daban algo de lluvia, así que nos fuimos a la playa Le Due Sorelle en
Torre dell’Orso. Una mujer del lugar nos dice que no dejemos el coche al lado de la carretera, que ponen multas seguro, así que lo dejamos en un parking por 4 euros y nos vamos a la playa pública. Había bastante gente y además los lidos privados dejan poca zona libre, pero pillamos un sitio razonable. La playa era de arena un poco oscura y no estaba muy limpia (los italianos no son muy limpios, dejaban mucha basura y simplemente lo tapaban con la arena al marcharse…), pero el agua estaba muy cristalina y el entorno era bonito. Después subimos andando al pueblo y comimos en un restaurante con comida ya preparada, Tavola Calda da Viola, estaba rico y había variedad y platos típicos.
Después nos fuimos a
Torre San´t Andrea donde intentamos dejar el coche cerca pero justo estaba la policía poniendo multas, así que dejé allí a la familia y yo volví hacia el parking público al principio de la carretera de entrada, que tiene una furgoneta que te acerca. Estuvimos viendo los farallones / acantilados y la playa, todo bastante bonito. Y volvimos en coche a Lecce donde cenamos.
Día 9. Como estaba previsto que lloviera, fue el día que dedicamos a
Lecce con tranquilidad. Cogimos la entrada conjunta para visitar las principales iglesias y disfrutamos de los rincones de Lecce. Muy bonita con ese color de la piedra de la zona. Una ciudad espectacular.
Día 10. Me toca trabajar un poco grrr. Nos vamos al Mar Jónico, en coche a
Baia Verde, aparcamos en parking de pago (4 o 5 euros, no recuerdo) y nos quedamos en la playa pública, que aquí era más amplia. La arena no es espectacular pero el mar tiene un color precioso. Por la tarde nos íbamos a ir a las playas de Porto Cesareo o Punta Prosciutto, pero como estábamos a gusto, al final comimos algo en un chiringuito y nos quedamos aquí tranquilos un poco por la tarde.
A media tarde nos fuimos a visitar
Gallipoli. Bonito pero muchos turistas en las calles estrechas. Al final del día volvimos a nuestra última noche en Lecce.
Día 11. Nos despedimos de la Santa Croce y de Lecce y nos vamos a
Otranto. Nos hospedamos en el A est b&b Otranto, muy recomendable, con parking concertado y con dueños muy simpáticos.
Cogemos mochilas con la ropa de playa y nos vamos al centro. Comemos allí y vemos lo principal. Nos bañamos en la zona de piedras del pueblo, muy divertido y un sitio especial, y después seguimos hasta la playa del Gradoni, también en el pueblo. Otranto es muy bonito y recomendable. Al volver al B&B nos cayó una tormenta tremenda, los del lugar no recordaban tanta lluvia.
Día 12. Nos vamos a la
Baia dei Turchi con la sombrilla que nos dejan en el B&B. Había leído opiniones contradictorias pero los del hotel nos la recomendaron. Aparcamos en Parking 2 Palme (4 euros) y cruzamos el bosque hasta la playa pública. Estaba bastante tranquila y la zona era muy bonita, con arena y zona de rocas. Llevamos focaccia y otra comida de un obrador de Otranto y comimos en la playa. Nos llovió a ratos pero estuvimos muy bien. Tampoco cambiamos de playa a y media tarde volvimos a Otranto a merendar, pasear por el pueblo y cenar en ViaPunta7, recomendable comida y grandes vistas.
Día 13. Salimos a
Ostuni, y llegamos por la mañana al apartamento Cozy House in Ostuni with Panoramic Terraces, recomendable. Aparcamos muy cerca, en Corso Vittorio Emmanuelle. Vamos al centro de Ostuni y lo disfrutamos, es muy bonito. Es curioso, porque en cierto modo muchos pueblos de la zona son muy parecidos pero al mismo tiempo son muy diferentes y con un carácter especial y diferente. Estamos allí todo el día y por la tarde/noche compramos algunas cosas para comer en la terraza del apartamento con vistas sobre la ciudad y el mar al fondo.
Día 14. Seguimos en el Valle de Itria donde no tenemos tiempo a ver pueblos como Martina Franca, Cisternino o la Gruta Castellana. Por la mañana salimos en coche a
Locorotondo y aparcamos en Largo Piazza Antonio Mitrano. Disfrutamos del bonito pueblo un par de horas y seguimos nuestro camino hasta
Alberobello.
En Alberobello aparcamos aquí
www.google.com/ ...17.2355858 junto al Trulli Sovrano y muy cerca de nuestro Trulli del Corso B&B, con una dueña encantadora que nos contó la historia del trulli y su familia. Disfrutamos de la ciudad durante todo el día. Es un sitio diferente y muy especial, nos gustó mucho. Además de la zona típica, Rioni Monti, donde había bastante turistas (era domingo), merece la pena también adentrarse en Aia Picola, donde encuentras trullis igual de bonitos, una zona más auténtica donde todavía vive gente y cero turistas.
Nos dio mucha pena volver a dormir al Trulli porque significaba el fin de nuestro viaje…
Día 15. Paseamos un poco por Alberobello y nos vamos hacia el
aeropuerto. Pongo en el maps la gasolinera Eni que hay cerca de la terminal y al llegar resulta que se han quedado sin gasolina... Por suerte vamos bien de tiempo y a 4km hay otra gasolinera.
Curiosamente en este viaje hemos visto que es normal que en los restaurantes se les acaben ciertos platos, sobre todo en la cena, pero también la cerveza, botellas de agua… e incluso la leche en una cafetería.
Dejamos el coche en la oficina del rent a car, lo revisan en detalle pero no tenía nada nuevo y cogemos el vuelo de vuelta. Por suerte, la huelga de Iberia Express no afectó a este vuelo.
En definitiva, ha sido un viaje que nos ha gustado mucho. Muy recomendable por la parte cultural y artística, la comida, el mar… Las playas no están mal pero no son espectaculares (las que vimos nosotros), tienen pocos servicios salvo en los lidos de pago, y están un poco sucias. Un destino muy variado que puede gustar a viajeros con intereses muy diferentes. Si alguien tiene alguna duda concreta, intentaré ayudarle.
Última edición por Natra el Jue, 15-09-2022 8:55, editado 1 vez