2-PALACIO REAL, EDIFICIO BAYOKE, CENA CRUCERO
Nos recogieron temprano y nos llevaron al Palacio Real antes de que apretara más el calor. Teníamos muchas ganas de visitarlo ya que las fotos que habíamos visto eran espectaculares…aún así nos sorprendió y nos gustó mucho más. Ver esas enormes estatuas mezcla de dragón, mezcla de guerrero, esas figuras doradas, esos edificios,…realmente es precioso aquello y muy diferente a lo que conocemos. Cada paso nuevo que dábamos algo más nos gustaba.
GRAND PALACE
OFRENDAS
CURIOSAS FIGURAS
VISTO DE NOCHE
Es alucinante la manera en la que te agarras a la cámara y no paras de hacer fotos…entre tanto vas escuchando a la guía.
Pudimos ver el Buda Esmeralda y es curioso porque para entrar en ciertas zonas tienes que hacerlo descalzo…ummm eso es un poco…aggg!! Había una zona que rodeabas andando (descalzo sobre moqueta) donde se encontraban las ofrendas: flores, huevos, velas, etc…y ves a mucha gente rezando. Me gustó mucho y me sorprendió lo creyente que es la gente…a ver no lo creyente si no verlos allí en los templos rezando…aquí en las iglesias la verdad es que casi no se ve a nadie.
Estuvimos toda la mañana por allí y creo que no me equivoco si digo que todo el mundo disfrutó con la visita. ¿Algo malo? El calor…ese pesado calor. Menos mal que cuando salíamos de los sitio teníamos a nuestro autobús preparado con el aire acondicionado a tope ¡¡jejej!!
De allí nos llevaban al Edificio Bayote a comer, ya que se había hecho la hora.
EDIFICIO BAYOKE
Es el más alto que se ve en la foto y es el sexto más alto del mundo.
Tiene 88 pisos. Nosotros comimos en la planta 82.
Nada más entrar nos tocaba subir en un ascensor el cual a cierta altura quedaba al descubierto y podías ver a través de los cristales como seguías ascendiendo. Uff aquello parecía la feria ¡¡jejee!! Luego la comida estuvo buenísima, había bastante variedad…como siempre durante todo el viaje: mucho arroz y mucho pollo ¡¡jeje!! Pero también algunos otros platos tipo “chino” de aquí. Después de comer estuvimos en su mirador, en la planta 84, que gira 360º por lo que no te hace falta moverte del sitio para poder ver toda Tailandia. En otra planta había una exposición con un tuc-tuc, unas bicis,…cosas típicas.
VISTAS DE BANGKOK
Cuando terminamos teníamos unas cuantas horas libres hasta la hora de la cena. Así que le dijimos a la guía que nos dejara en el centro comercial MBK para hacer unas compritas ¡¡jejej!! Aquello es enorme y en uno de sus pisos tienes como una especie de mercadillo para comprar al estilo regateo.
DE COMPRAS EN EL MBK
La gente del grupo nos dispersamos y a la hora acordada quedamos para irnos juntos al hotel. Para llegar a él decidimos coger el Tren elevado…ayy que ilusión…parecíamos niños. Y eso que cuando te montas no notas que vayas tan alto, pero eso de vernos mezclados tan de lleno con la gente de allí nos molaba un montón.
TREN ELEVADO
Bajamos en la parada que nos dejaba dos calles más para allá del Holiday. Y una vez en el hotel una ducha y a prepararse para la cena-crucero.
El barco era el Chao Praya Princess. Estaba muy bonito, con música en directo, la cubierta para salir después y bailar un poquito, pero la comida era un poco justa: pollo y arroz no faltaba ¡¡jejee!! También había pescado, ensaladas…en fin un bufett justito.
Lo bonito del crucero es que puedes ver los edificios iluminados y es una pasada ir navegando y ver el Palacio Real, el Wat Arun, etc…es muy romántico.
Y una noche más acabamos en el Pat pong ¡¡jejeej!! Eso era y sería así casi todas las noches del circuito y estuviéramos en la ciudad que fuera. Como terminábamos de cenar sobre las diez o así pues teníamos margen hasta las doce, hora más o menos en que recogen los mercaditos ¡¡jeje!!
Unas compritas y al hotel.