Nos levantamos sobre las 6,15 ya que a las 7,15 nos vienen a recoger para llevarnos al aeropuerto de cusco y poder coger un avión ( más bien dicho avioneta ) a Puerto maldonado.
Llegamos allí sobre las 10,15 y al bajarnos del avión nos recibe una bofetada de humedad y calor tremenda!!!!!!! en los días que estuvimos en la selva no paramos de sudar ni un momento. Nos recogieron miembros de la comunidad nativa del infierno, ya que en el lodge que nos quedabamos se empleaba a gente nativa, además de a biologos, para hacer turismo sotenible en sus tierras y asi se van alternando cada seis meses como nos explicaba nuestra primera acompañante-guía.
Desde el aeropuerto estuvimos casi una hora en coche por caminos de tierra, maravillados por todo lo que veiamos, por los sonidos y por las explicaciones!!!!!
Tras esto llegamos a Río Tambopata donde en un bote de motor llegamos tras 2,30h más o menos al embarcadero de la posada. Durante el trayecto nos dieron de comer una comida rara envuelta en hojas raras...........no teniamos mucha hambre pero nos gustó.
Nos llamó un montón la atención el color del agua........marrón y la enorme cantidad de mariposas que hay en la orilla del río tomando sales como nos contó la guía. ¿¿¿cómo disfrutamos con la cantidad de aves que vimos en ese recorrido, con las tortugas, con los murciélagos boca abajo en el tronco de los árboles.....cuantas cosas extrañas y hermosas para ver en la selva!!!!!!
Al ratillo de llegar hicimos nuestra primera excursión con el que sería nuestro guía acompañante, un chico encantador, que tenía una paciencia infinita con nosotros y nos hizo sentir expertos exploradores de la selva............
fuimos hasta una torre de observación de 30 metros de altura, desde donde contemplamos una puesta de sol maravillosa y antes de eso pudimos ver y oir a los monos aulladores que estarían siempre a nuestro alrededor por las copas de los árboles. ( abstenerse aquellos que tengais vértigo! en serio!!!), aunque merece la pena por ver los monos, los loros, los guacamayos y los tucanes que vimos.
Volvimos a la posada con tiempo para la cena.....que rico estaba todo, además era muy familiar, nos sentaban en mesas enormes alargadas y con nuestros guías....todo a la luz de velas!!!!! que precioso.....lo de las velas es porque la luz electrica sólo la tenían dos horas al día para cargar las baterias y demás el resto con linternas y velas, vaya una gozada.
Después de cenar nuestro guía nos explicó el proyecto que estabn realizando allí con la comunidad nativa de infierno y el bien que hacia ese albergue.
Tras una charla amena nos despedimos y nos fuimos a la cama, con ayuda de nuestra linterna.......da pavor desnudarse sin paredes, pero como no te ven ya que no hay luz....jejejje, otra aventura de este viaje!!! y lo del baño ni os lo imaginais!!!!!!